¡Contágiate de la fiebre de los 'food trucks'!
- La street food responde a los nuevos hábitos alimenticios
- Cada food truck crea una marca personal para diferenciarse del resto
- Chefs con estrella Michelin deciden ampliar su negocio con estas caravanas
Pasión, creatividad, innovación culinaria y nomadismo podrían ser los puntos que definen el creciente movimiento food truck. Lo que empezó siendo sencillos puestos ambulantes en los que se distribuían ciertos alimentos se ha convertido en auténticas obras de arte sobre ruedas, atentas a las nuevas tendencias gastronómicas y ansiosas por crear una marca personal que les diferencie del resto.
La street food (“comida callejera”) es “una tendencia que responde a nuevos hábitos alimenticios, a una sociedad cada vez más conectada y en búsqueda de alternativas gastronómicas”, explican Leire Pérez y Aitor Apraiz, promotores de la empresa Foodtruckya.com.
La rapidez de sus fogones y el bajo coste de sus propuestas se han convertido en el objeto de deseo de todos aquellos que no disponen de tiempo para comer o que simplemente quieren atreverse con nuevos sabores y formas de hacerlo.
¿Cuál es el origen de todo esto?
Resulta difícil datar el origen de los food trucks en una fecha concreta. El lugar está claro: Estados Unidos. Hay quienes creen que apareció hace más de un siglo para abastecer a los vaqueros del lejano Oeste y quienes lo sitúan en 1691, concretamente en Nueva York, cuando los pushcarts (“carretillas de comida”) llegaron a las calles de la ciudad con una oferta rápida y económica para alimentar a la población.
“El verdadero boom, la sofisticación, la aparición de lo “Gourmet” no se ha iniciado hasta el 2007”, apuntan Leire y Aitor. La gente quiere comer rápido pero de forma sana, a diferencia de los fast food.
¿Por qué está proliferando en España?
España tiene una gastronomía de calidad pero, a la hora de montar un restaurante, los precios son un tanto elevados. “La complicada situación de trabajo actual lleva a los emprendedores a crearse una salida laboral de manera más económica que en locales fijos o tradicionales, con los costes que pueden suponer la compra o el alquiler”, añaden.
Los food trucks rompen con esa idea para que uno pueda ajustar el negocio a sus necesidades. “Su coste varía, lo primero de todo, en el tipo de vehículo, si es una caravana (desde 7.000€), una furgoneta pequeña (desde 15.000€), una mediana (desde 30.000€) o una grande (desde 50.000€). Después, habría que tener en cuenta el modelo de maquinaria que vamos a incluir. Los aparatos oscilan entre los 3.000 y los 30.000€”, explica Antonio Larrea, CEO de The Food Trucks Club.
Muchos restaurantes apuestan por una versión 'food truck'
Pero no solo es un salvavidas para emprendedores, muchos restaurantes utilizan estos camiones para acercarse a un nuevo público más allá del lugar donde tengan asentado su local. Pierre-Julien, co-fundador de SigaelFoodTruck, confía en que “se trata de un modelo que está creciendo en todos los países del mundo”.
En España, un foodtrackero no puede abrir su camión al público donde quiera legalmente, son eventos gastronómicos como MadrEAT, Van Van Market, Palo Alto o Eat Street, entre otros, los que ayudan a difundir este estilo de vida.
Algunos de los pioneros que apostaron por este negocio en nuestro país fueron Verónica Morales con Sal&Chichen, Leire Pérez con Hambroneta, el primer food truck de España certificado con la Q de Calidad turística, y el conocido chef Koldo Royo (una estrella Michelin) con El Perrito callejero.
Los promotores de Foodtruckya.com aseguran que la globalización, Internet y la posibilidad de viajar hace que cada vez seamos más conscientes de lo que está pasando en el mundo, lo probemos, lo analicemos y queramos poner en marcha las mejores ideas.
Próximamente, 'La cultura food truck y la ley española'