La fiebre tifoidea golpea Acacias
- El barrio de Acacias acaba de pasar por una de sus mayores tragedias
- La epidemia de fiebre tifoidea se ha llevado la vida de Marco y varios vecinos
- Resolvemos dudas con el licenciado en Medicina y Cirugía F.Javier Tostado
El barrio de Acacias acaba de pasar por una de sus mayores y devastadoras tragedias debido a la epidemia de la fiebre tifoidea, que se ha llevado la vida de varios vecinos y del joven Marco, dejando a Claudio, su amante, devastado.
Por un lado, la enfermedad ha tenido en vilo a todo el altillo, pues casi acaba con Fabiana. Mientras tanto, la dueña de la sastrería, doña Susana, también ha conseguido superar las fiebres después de un difícil tratamiento, así como María Luisa, que se negó a ser ingresada en el hospital de campaña.
Una bacteria del género Salmonella
La fiebre tifoidea es una infección bacteriana causada por una bacteria del género Salmonella. Se transmite por contagio fecal-oral y se propaga a través de alimentos, agua o bebidas contaminadas, ya sea por las manos sucias de portadores sanos, que los manipulan; por contacto con moscas -que pueden transportar los gérmenes de las heces a los alimentos-; o por aguas polucionadas por otras residuales.
Los mejillones, ostras y otros moluscos procedentes de criaderos cercanos en los puertos de las ciudades, especialmente si las cloacas vierten cerca de ellos, pueden ser el origen.
No debe confundirse con el “tifus”, que está producido por otro tipo de bacterias.
Cuando Germán confirma que hay varios casos el barrio, pide a los vecinos que eviten el intercambio de fluidos entre ellos, pues, como vemos, la bacteria entra en el organismo a través del sistema digestivo. Esta llega al intestino y pasa a la sangre; después se propaga hacia diversos órganos produciendo inflamaciones y necrosis.
Con estos síntomas tan agresivos, podemos entender por qué Marco ha fallecido, al igual que muchos otros vecinos, y también la gran fortaleza que han demostrado Fabiana y Susana, por ejemplo, ya que son personas de avanzada edad. En RTVE.es hemos acudido al licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Barcelona Francisco Javier Tostado, para que nos explique mejor qué es la fiebre tifoidea y un poco de su historia.
Confundida con otras enfermedades
Francisco Javier explica que muchas de las epidemias de la antigüedad siempre han sido atribuidas a la peste, la viruela y el cólera. Sin embargo, según los últimos estudios, ahora se cree que la acontecida en Atenas en el año 428 a.C. fue causada por la fiebre tifoidea.
Aunque hasta hace poco se pensaba que la causante fue la peste, un estudio realizado en 1994 por el profesor Manolis Papagrigorakis y publicado en la revista International Journal of Infectius Diseases determinó que se debió a la fiebre tifoidea al encontrarse la bacteria Salmonella tihpy en la pulpa dental de tres dientes examinados en cuerpos encontrados en el cementerio de Kerameikos de Atenas, datados en esa época. No obstante, no todos los expertos coinciden con su apreciación.
En España, la última gran epidemia se dio en Barcelona, en 1914, causando la muerte de más de 2.500 personas. Esta enfermedad sigue siendo un "problema serio" incluso en nuestros días: "en nuestro país se van sucediendo brotes epidémicos esporádicos que por suerte se controlan rápidamente", señala Tostado.
El agente causante de la enfermedad -Salmonella typhi- fue descubierto en 1880 por el patólogo alemán Karl Joseph Ebert, y en 1897, Almroth Edward Wright desarrolló la primera vacuna. Posteriormente, en la época de la II Guerra Mundial, Ralph Walter Graystone Wyckoff desarrolló otra vacuna.
La fiebre tifoidea predomina en los meses de verano y en España cada año se declaran entre 5 - 40 casos, aunque probablemente la cifra sea superior. La enfermedad, que está casi ausente en los países desarrollados, aún es frecuente en los países en desarrollo.
La muerte sobreviene en el 10% - 30% de los casos no tratados, pero con tratamiento temprano se reduce al 1% y suele curarse en una o dos semanas, siendo generalmente el pronóstico favorable. La infección es más benigna en niños que en personas maduras.
Formas de evitarla
Para evitarla, el mejor tratamiento es la prevención, método que no pudieron llevar a cabo en Acacias, pues consiste en consumir agua "segura" y alimentos no contaminados y/o bien cocidos, algo que no podían controlar con el agua de la fuente del barrio. Es por eso que los viajeros a zonas endémicas deben beber solo agua hervida o embotellada e ingerir alimentos bien cocidos.
Epidemiológicamente hablando, hay que vigilar especialmente a los portadores sanos, ya que, aunque no desarrollan la enfermedad, van diseminando los bacilos en sus heces durante años.
La importancia del agua
A lo largo de los últimos capítulos de 'Acacias 38' hemos podido observar cómo los afectados por la fiebre pedían agua constantemente, y es que el tratamiento, además de la utilización de antibióticos, incluye, como parte muy importante, la rehidratación del paciente con el aporte de líquidos y electrolitos, tanto por vía oral como por vía intravenosa, según el grado de gravedad.
En algunos de los infectados brota en la piel del tronco, sobre todo la del vientre, la roséola, unas manchitas circulares de 2 a 4 mm de diámetro, de color entre rosa y rojo, que no suelen durar más de dos días. Es en este momento cuando los enfermos suelen estar somnolientos o estuporosos -de aquí el nombre de tifoidea, del grupo typhos: estupor- y deliran.
Es entonces cuando las deposiciones son diarreicas y adquieren un color amarillo claro o verdoso y el hígado y el bazo suelen inflamarse.
En la tercera semana de la enfermedadse alcanza el momento crítico, ya que con frecuencia se inician los indicios de mejoría o por el contrario de empeoramiento, pudiendo originar graves complicaciones como hemorragias, perforación del intestino o incluso shock séptico.
Por suerte y gracias al gran trabajo del doctor Germán y la ayuda de algunos vecinos, la epidemia en Acacias ha terminado, han retirado el hospital de campaña y todos pueden seguir con sus vidas, tanto para lo bueno como para lo malo.