Mostar
- En Portada vuelve a Bosnia 20 años después de la guerra
- Mostar fue una de las ciudades más castigadas
- El Stari Most o Puente Viejo es el escenario principal de este reportaje
- Diversos personajes nos muestran cómo el fantasma de la guerra sigue presente
- 'En Portada', estreno jueves a las 23:40 h en La 2
Equipo En Portada
Guión: Ester Vázquez
Realización: Teresa Mora
Imagen y sonido: Joaquín Relaño y Santiago Aguilar
Montaje: Montse Franco
Hace veinte años finalizó la guerra más cruenta de Europa desde la Segunda Guerra Mundial. En Bosnia, una de las ciudades más castigadas por aquella guerra fue Mostar, una bucólica localidad dividida en dos por el río Neretva. Dos orillas que están conectadas gracias a su famoso puente, el Stari Most o Puente Viejo, el puente que da nombre a esta ciudad.
Cuando pensamos en hacer un reportaje que retratara la actual situación de Mostar, nos preguntábamos hasta qué punto seguían abiertas las heridas. Nuestra idea de que el Puente Viejo, fuera el escenario principal de este reportaje y que todos sus protagonistas estuvieran de un modo u otro en él, nos permitió descubrir rápidamente que esas heridas no habían cicatrizado.
Nuestro guía y uno de los protagonista del reportaje Cámil, había hablado con algunos de los habitantes de esta hermosa ciudad, para que las entrevistas fueran en el marco inconfundible del puente, pero enseguida notamos que no todos encontraban este lugar como el más idóneo ¿por qué?
El puente de Mostar construido en 1566 durante la dominación turca y símbolo de la convivencia, fue destruido a cañonazos por la artillería croata una fría mañana de noviembre de 1993. Un ataque deliberado, que no pretendía solo destruir el monumento declarado Patrimonio de la Humanidad, sino que iba dirigido contra todo lo que representaba, es decir, la unión y la convivencia entre las distintas comunidades que habitaban allí: serbios, croatas y bosniacos.
El puente fue reconstruido gracias a la ayuda internacional, un minucioso trabajo supervisado por la Unesco, que consiguió que en julio de 2004 el puente resucitara, pero ya nada fue igual.
Cámil un bosniaco que adora su ciudad, siempre ha vivido en el casco viejo, junto al Puente ese que, nos decía, siempre lleva en su corazón, por eso no dudó en ponerse el uniforme para defenderlo durante la guerra. Cámil pertenece a esa generación que vivió aquella tragedia y que aunque desea olvidarla, no puede.
Goran, Edita, Igor y otros de los personajes de este reportaje forman parte de otra, la generación que ha conocido la guerra a través de las historias de sus padres, aquellos que ahora, escuchan diferentes versiones de la misma en sus respectivas escuelas , en las que hay diferentes planes de estudio y distintos idiomas aunque entre ellos se entiendan perfectamente. Son la primera generación de una postguerra, que paso a paso, intenta borrar su huella. Jóvenes que no quieren que sólo se hable de eso y a los que les preocupan otros problemas como el alto índice de paro, que ha hecho que muchos solo piensen en emigrar, o el estancamiento de sus instituciones y la corrupción.
Mostar es el reflejo de lo que ocurre en todo el país. Un complejo puzle repleto de instituciones y cargos públicos difícil y costoso de mantener, con una presidencia rotatoria de las tres comunidades que hace que el gobierno cambie continuamente.
Veinte años después de que acabara esta guerra, el país continúa rigiéndose por los acuerdos de Dayton aquellos con los que se consiguió parar los combates y la máxima autoridad sigue siendo el Alto Representante elegido por Naciones Unidas. La guerra concluyó, pero como un fantasma, sigue presente en cada rincón de Mostar.
- 'En Portada': 'Mostar', estreno jueves 15 a las 23:40 h en La 2