Los tiempos de Erdogan
- En Portada aborda la división en Turquía entre partidarios y detractores del presidente Erdogan
- Es el líder con más poder desde Ataturk, el fundador de la República
- Los tiempos de Erdogan se emite el lunes 26 de junio a las 23:30 en La 2 de TVE
El puente de Gálata une la ciudad vieja de Estambul con la parte más moderna. Es un lugar privilegiado no solo para admirar la ciudad o contemplar sus bellos amaneceres o sus espléndidas puestas de sol, sino para comprender el momento que vive el país.
Por este transitado lugar, por el que, lo mismo pasa gente apresurada por llegar a su destino que otros se paran solo para ver el tiempo pasar, es fácil encontrar opiniones opuestas sobre la marcha de este país. Enfoques completamente diferentes que reflejan la polarización cada vez mayor de la sociedad turca.
Para unos, Turquía ahora va por buen camino, nunca ha conocido tiempos mejores y confían plenamente en su líder, el presidente Erdogan. Para otros, el país va a la deriva, pasa por sus momentos más difíciles y el presidente Erdogan es considerado un peligro para la democracia.
Recep Tayip Erdogan, el rais, como le apodan sus partidarios, es el líder con más poder desde la muerte en 1938 de Mustafá Kemal Attaturk, fundador de la república turca. Llegó al poder en 2002 cuando su partido Justicia y Desarrollo (AKP) ganó por primera vez las elecciones parlamentarias.
Erdogan prometió acabar con los privilegios de algunos, repartir la riqueza, aupar a la economía y contar con la participación de todos los colores de la sociedad incluidos los proscritos kurdos a los que Ataturk ni siquiera había reconocido su identidad y les denominaba los turcos de la montaña.
La economía avanzó y se lograron espectaculares cambios en las infraestructuras del país. Turquía se postulaba firmemente como candidato a la Unión europea, pero Erdogan fue poco a poco agrandando su poder, alejándose de las promesas de contar con todos, ganando desafíos solo con represión, como en el parque de Gezi en 2013, encarcelando a sus críticos, acaparando cada vez más poder como con el reciente referéndum presidencialista. Convirtiéndose en el líder único, al que pocos se atreven a contrariar.
Erdogan inició su carrera política en Estambul como alcalde. Esta es la ciudad más poblada de Turquía y un ejemplo de la idiosincrasia de este país, una ciudad que, también ha ido cambiando con el paso del tiempo, pero que conserva como ninguna otra tanto los rasgos de su pasado otomano, como los de su apuesta por la modernidad.
En esta ciudad ajetreada pero sin prisas, conocimos a Recep Gürgen, un maestro relojero que mantiene a punto todos los relojes de los Palacios, Recep nos enseña su Estambul, la ciudad de cultura universal.
Estambul situada entre dos continentes tiene el privilegio de formar parte de los dos y no pertenecer a ninguno de ellos, de ser ella misma, una ciudad particular, entrañable y profundamente bella.
Esta ciudad que ha visto nacer y caer imperios, es hoy un espejo de la complicada e impredecible situación que vive el país.