Miguel Trillo. Doble exposición
Emisión 25 de abril de 2018 · La 2
A lo largo del pasado año, se han podido ver en Madrid tres exposiciones en torno a la efervescente escena artística madrileña desde finales de los años 70, a principios de los 90. En una serie de tres programas consecutivos, Metrópolis ofrece un recorrido por estas tres muestras de la mano de algunos de sus más destacados artistas y gestores.
El primero de ellos se centra en “Doble Exposición”, comisariada por Juan Albarrán para el Centro de Arte Dos de Mayo de Móstoles, donde se recuperan las dos primeras muestras individuales de Miguel Trillo, fotógrafo que supo retratar a esa joven generación que conformó una subcultura que encontraba en la música y su estética, una forma de expresión ideológica y emocional en respuesta a las transformaciones sociales de su tiempo.
Miguel Trillo (Jimena de la Frontera, Cádiz, 1953) llega a Madrid a mediados de los años 70 y pronto empieza a relacionarse con los fotógrafos de la revista Nueva Lente, publicación que impulsó la renovación fotográfica en esos primeros años. En ese momento, la fotografía artística participaba de una corriente fantástica o surrealista, en la que Trillo también se enmarca con algunas naturalezas muertas realizadas entre los años 1972 y 1979. En esos últimos años comienza a trabajar como profesor de literatura, y además acude a los encuentros de fotografía de ARLES, la muestra Venecia 79 y los primeros encuentros fotográficos de Andalucía, lo que permitirá entrar en contacto con algunos autores como Diane Arbus (Nueva York, 1923-1971) o el fotógrafo alemán August Sander (Herdorf, 1876 – Colonia, 1964), que condicionaron de forma notable su fotografía.
Miguel Trillo. Fotografía Surrealista (1971-79)
9 Fotos
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Sin título (Miguel Trillo, 1979)
24.04.2018Miguel Trillo, serie "Imagenaciones" FotografÃas Fantásticas o Surreales, años 70tve -
Sin título (Miguel Trillo, 1976)
24.04.2018Miguel Trillo, serie "Imagenaciones" FotografÃas Fantásticas o Surreales, años 70tve
POP PURRI. Dos años de música pop en Madrid (Galería Ovidio, 1982)
En ese momento (finales de los 70 y principios de los 80), Trillo comienza a interesarse por otro tipo de fotografía más cercana al retrato, alejada ya de esa tendencia surrealista de la primera época, y empieza a tomar fotografías de conciertos en colegios mayores y salas de conciertos de la nueva ola madrileña. Así llegamos la primera exposición individual de Trillo en 1982, Pop Purrí, Dos años de música pop en Madrid, en la galería Ovidio. Es importante señalar que era una galería especializada en arte contemporáneo, no en fotografía, donde habían mostrado algunos de sus proyectos artistas próximos a los nuevos comportamientos como Concha Jerez, Eva Lootz o Santiago Serrano.
Las fotografías incluidas en esta muestra habían sido tomadas en conciertos de la nueva ola madrileña que se desarrollaban en la Sala Rock-Ola, la Sala carolina, la discoteca Consulado o la Escuela de Caminos, que incluían artistas como Alaska y los Pegamoides, Parálisis Permanente, Zombies, Nacha Pop, Aviador Dro, Los Secretos, Radio Futura, Glutamato Yé-yé o Fabio McNamara. Ya no son fotografías en blanco y negro, aquí todo es color ya que reflejan ese cambio estético y social que estaba ocurriendo. Son fotografías a partir de diapositivas, dispuestas a modo de fotogramas en paneles de madera en colores pastel como si de una tira de película se tratara. Para Trillo, este display suponía además el reflejo de “esa película que yo estaba viviendo que era el Madrid de vibraciones, el Madrid nocturno”.
Miguel Trillo. Pop Purrí. Dos años de música pop en Madrid (Galería Ovidio, 1982)
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Pop Purrí (Galería Ovidio, 1982)
24.04.2018Miguel Trillo, Pedro, Almodóvar & McNamara, sala Marquee, Madrid 1982tve -
Objetivo Birmania (Miguel Trillo, 1983)
24.04.2018Miguel Trillo, Birmettes, Objetivo Birmania, Madrid 1983tve
ROCKOCÓ
Además de Nueva Lente (1971-1983), destacan otras revistas y publicaciones que contribuyeron a la difusión de la fotografía en España como PhotoVision (1981-2000) o, a partir del año 80, Poptografía, dirigida por Miguel Oriola. En ésta última, Trillo fue invitado a publicar un dossier de fotografías de los jóvenes en los conciertos, pero nunca se publicó, lo que le impulsó a editar en 1981, su propio fanzine autoeditado, bajo el título de Rockocó que se distribuía en tiendas de discos, salas de conciertos y en el Rastro de Madrid.
En esta publicación no aparecían firmas lo que podría sugerir que se trataba de una obra colectiva aunque en realidad era como un heterónimo de Miguel Trillo que incluía su fotografía en blanco y negro, con una imagen “más espontánea, más directa, más punk”. Surge ante las dificultades de dar a conocer su fotografía ante la escasez de publicaciones y la emergencia de diferentes fanzines dedicados a la nueva ola madrileña como 96 Lágrimas o La pluma eléctrica.
En 2017, La Fonoteca reeditó los seis números originales de Rockocó junto a un número especial: #6: Imágenes de la juventud española, 2000-2016.
FOTOCOPIAS. MADRID –LONDON (Sala Amadís, 1983)
Pasado un tiempo, la mirada y el interés de Trillo se desvía desde los cantantes a los públicos a quienes hace posar frente a la cámara. Ya no son fotos documentales de momentos concretos como un concierto o una actuación, sino que se trata de jóvenes retratados en su vida cotidiana, en sus momentos de ocio, y siempre ligados a una banda sonora.
La segunda exposición individual de Miguel Trillo llega en 1983 a La Sala Amadís. Igual que Ovidio, Amadís tampoco era una sala dedicada a la fotografía, sino que era una sala de arte que dependía del Ministerio de Cultura. Allí expusieron Luis Pérez-Mínguez, Pablo Pérez-Mínguez o pintores próximos a la nueva figuración madrileña. Para esta muestra, Trillo propone Fotocopias Madrid-London incluyendo fotografías de jóvenes a la salida de conciertos o bares donde ellos se movían, tomadas en Madrid y Londres entre 1980 y 1983. En esta ocasión el display elegido por Trillo se alejaba del tradicional cubo blanco donde se alinean de forma ordenada las obras. Un fondo de plástico negro servía de soporte para las fotocopias en color de las fotografías originales dispuestas de forma desordenada y prendidas con celofán de colores porque con esto, en palabras de Trillo, “pretendía alejarme de la fotografía encorsetada en un passepartout y atrapada por un cristal como si fuera una jaula. Se trataba de una cultura alternativa, una cultura underground en la que la parte estética era muy importante” y eso debía reflejar también el espacio expositivo.
1985, UN CAMBIO DE RUMBO
A principios de los 80, varias administraciones públicas como la Fundación Juan March, la Biblioteca Nacional, o el Círculo de Bellas Artes empezaron a programar fotografía y con sus exposiciones, empezaron a legitimar la fotografía como un medio artístico de pleno derecho. Este proceso de institucionalización del medio fotográfico tiene un punto de inflexión importante en el año 85 con la aparición FOCO, el festival de fotografía contemporánea de Madrid, y la exposición La Fotografía en el Museo en el MEAC, Museo Español de Arte Contemporáneo, que a vez, realiza la primera gran adquisición de fotografía española contemporánea.
El año 85 supone además un punto de inflexión en la carrera de Miguel Trillo. Es el momento en el que, tras la muerte de un rocker en las inmediaciones de la Sala Rock-Ola, cierra la sala de conciertos y la movida parece empezar a decaer dando paso a otras manifestaciones musicales en el extrarradio de la capital. Es entonces cuando Trillo centra su mirada en el incipiente RAP, el HIP HOP y la cultura urbana que va asociada a estos ritmos.
Miguel Trillo. HIP HOP / RAP (fotografías 1986-1991)
Próximos programas:
- ESPACIO P. 1981-1997- LA CARA OCULTA DE LA LUNA. Arte alternativo en el Madrid de los 90
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