El hombre que ha denunciado a una residencia por maltrato: "A mi madre le daban azotes antes de acostarla"

• Decidió grabar lo que ocurría tras sosprechar que maltrataban a su madre
• Los vídeos muestran insultos, agresiones y vejaciones hacia los ancianos
• El centro ha despedido al único empleado que todavía trabajaba en el centro
• Toda la información en la página web de 'La Mañana'

El hombre que ha denunciado a una residencia por maltrato: "A mi madre le daban azotes antes de acostarla"

La primera denuncia llegó hace tres años, por entonces nadie sabía el horror que se escondía en esta reputada residencia ancianos de Hortaleza, en Madrid. Francisco Polonio, el hijo de una residente, comenzó a sospechar que su madre no estaba recibiendo el trato adecuado. “Hematomas en los brazos, hinchazones en la rodilla, torceduras en el tobillo… Ellos decían que podía ser por artrosis”, comenta en el plató del programa ‘La Mañana’.

El detonante por el que decidió abrir su propia investigación llegó una tarde en la que se encontraba en el centro durante una visita. Antes de marcharse, pudo oír a su madre gritar mientras los cuidadores la acostaban. Fue entonces cuando tomó la iniciativa de grabar lo que pasaba en ese momento colocando un teléfono móvil sin que los trabajadores se dieran cuenta. “En las imágenes podía ver que a mi madre le daban seis o siete azotes antes de acostarla”, cuenta durante su intervención en directo.

La primera denuncia de Polonio en un juzgado no prosperó al considerarse que en las imágenes no se percibía ningún indicio de delito. El hijo de la residente decidió entonces proseguir con sus indagaciones y realizar más grabaciones. El espanto que grabó aquella cámara excedía con creces lo esperado. Escenas de agresiones, vejaciones y también insultos hacia unas personas incapaces de defenderse por sí mismas.

La Fiscalía de Madrid ha presentado una denuncia contra los tres presuntos agresores de la residencia y ha solicitado que sean citados en calidad de investigados. Por su parte, la dirección del centro ha hecho público un comunicado donde tacha el asunto de ‘repugnante’ y ‘deleznable’. Según indica el documento, dos de los empleados no trabajan en el centro mientras que el tercero ya ha sido despedido.