Saúl Craviotto: "Desde que me fui de casa con 15 años, hablo todos los días con mi madre"
- Saúl Craviotto, campeón de piragüismo y ganador de la segunda edición de MasterChef Celebrity nos abre las puertas de su casa
- El deportista decide homenajear a su madre con un menú de lo más especial con la ayuda de Carlos Maldonado y de Cayetana Guillén Cuervo
- Revive los mejores momentos de Cena con Mamá en la web oficial del programa
En esta ocasión nos desplazamos a Asturias para cenar con un auténtico campeón. Policía de profesión y piragüista de vocación. Tiene 4 medallas olímpicas y además, por si fuera poco, ganó la segunda edición de MasterChef Celebrity Cayetana Guillén Cuervo se cita con Saúl Craviotto para prepararle una cena – homenaje a su madre en Cena con mamá.
Como no podía ser de otra manera, a Saúl lo encontramos entrenando en su “oficina” particular, en el embalse de Trasona. Allí pasa la mayor parte de su tiempo: “Entreno todo el día, desde las nueve hasta las siete que llego a casa más o menos”, desvela cómo es la vida de un deportista de élite y lo complicado que resulta a veces: “El mayor sacrificio de todo esto es estar lejos de la familia”.
Al hablar de su madre Emma, la sonrisa le llega de oreja a oreja y asegura que, a pesar de la distancia, están muy unidos: “Desde que me fui de casa con 15 años hasta hoy, todos los días nos llamamos por teléfono” y quiere prepararle esta cena tan especial “por estar siempre en los momentos buenos y, sobre todo, en los momentos malos y complicados”
El deportista también se sincera y repasa los momentos en los que se ha sentido frustrado o impotente a la hora de desarrollar su disciplina. De hecho, estuvo pensando en retirarse en 2015 tras una mala prueba para la que se preparó durante cuatro años.
Además, tiene buenos recuerdos de su paso por MasterChef Celebrity, ganó la segunda edición del concurso, aunque admite que lo pasó mal: “En MasterChef perdí 7 kilos”. También reconoce que su paso por el programa le ha venido bien para darse a conocer a nivel social: “A raíz de MasterChef noto que me reconocen más, antes en redes sociales tenía veinte mil seguidores y ahora tengo unos ochenta mil”. Incluso tiene algo en común con Cayetana en relación al “talent” culinario y es que ambos, como aspirantes, han sido de los que más cortes han sufrido a lo largo del programa.
Como siempre, Carlos Maldonado ha sido el líder de los fogones, esta vez en la casa de Saúl. El chef le ha ayudado a darle una vuelta de rosca, algo más vanguardista, al menú que había pensado el deportista para sorprender a su madre. De primero prepararon una coca de recapte con gelatina de berenjenas asadas, gel de pimientos rojos y anchoas. El plato principal ha sido una zarzuela de pescado con carabineros y tallarines de calamar y, de postre, dedicado a su abuela, un arroz con leche con perlas de tapioca. Entre cuchillos y sartenes, han surgido varias conversaciones, entre ellas, la de la paternidad. Tanto Carlos como Saúl son padres primerizos y cuentan con emoción sus primeras aventuras cambiando pañales.
Con todo listo, Cayetana acude a la estación de Oviedo a recoger a Emma, la madre de Saúl, que para nada se espera dicha sorpresa. La pilla un poco desprevenida y cuando llegan a casa y ve la mesa puesta ya empieza a ver por donde van los tiros… La cena y sus sabores dan para muchas conversaciones, entre ellas anécdotas de la infancia de Saúl y lo deportista que ha sido siempre desde pequeño.
Pertenecer a la familia de un deportista de élite le permite a uno vivir experiencias únicas y eso, les ha sucedido a los Craviotto. Emma explica cómo ha vivido su entorno el tener cerca a un deportista de alto rendimiento y representar a España en los Juegos Olímpicos. Ello les ha permitido viajar siempre allá dónde iba su hijo, menos a Río de Janeiro, donde volvió a ganar dos medallas, una de bronce en la modalidad K1 (individual) y la medalla de oro en la modalidad K2 (por parejas).
Y tras un postre muy especial, homenajeando también a la abuela de Saúl, llega uno de los momentos más emotivos de la cena. Saúl le dedica unas preciosas palabras a su madre en forma de carta en la que le agradece toda esa paciencia, sacrificio y trabajo que ha tenido por él. Saúl le confiesa en su carta que le encantaría transmitir esos mismos valores a sus dos hijas.