Territorios indefinidos. Perspectivas sobre el legado colonial
Emisión 7 de octubre de 2019 · La 2
Esta noche dedicamos la emisión a la exposición “Territorios indefinidos” que puede verse en el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (MACBA). Comisariada por Hiuwai Chu, la muestra analiza la huella de la represión colonial a través de la obra de artistas procedentes de geografías muy distintas. También señal los retos de la independencia y cómo el colonialismo en su variante moderna sigue ejerciendo control económico e intelectual.
Los artistas incluidos en la exposición son: Maria Thereza Alves, Lothar Baumgarten, Black Audio Film Collective, Alán Carrasco, Mariana Castillo Deball, Sandra Gamarra, Jeffrey Gibson, Maryam Jafri, Kapwani Kiwanga, Naeem Mohaiemen, Daniela Ortiz y Xose Quiroga, The Otolith Group, Pala Pothupitiye, Superflex, Munem Wasif y Dana Whabira.
Una pieza central de la exposición es la película de Naeem Mohaiemen (n. 1969) Two Meetings and a Funeral (2017), que entreteje meticulosamente imágenes de archivo y nuevas filmaciones con la narración del historiador Vijay Prashad (n. 1967); y aborda una crónica del giro crítico que realizó Bangladés desde el socialismo al islamismo con el apoyo de la Organización para la Cooperación Islámica.
El itinerario de la muestra comienza con el mural del artista choctaw-cherokee Jeffrey Gibson “Mira hasta dónde hemos llegado” (2017), abierto a distintas interpretaciones; pero si tenemos en cuenta la escasa probabilidad de que los Estados Unidos sean descolonizados, solo puede leerse en sentido irónico.
Por su parte, Mariana Castillo Deball presenta una obra de suelo que se puede pisar y recorrer, titulada: Mapa de Nuremberg de Tenochitlan (2013) Es una ampliación del mapa detallado de la antigua capital azteca (hoy Ciudad de México) que el conquistador español Hernán Cortés envió al rey de España en 1520, que fue instrumentalizado para describir a los aztecas como bárbaros que el imperio español tenía que civilizar.
Sobre la pared ha dibujado Alán Carrasco su obra: “Chinkachiy” (2019). Chinkachiy («eliminar» o «borrar» en quechua) es un vago retrato de Túpac Amaru II (1738-1781), el indígena que lideró la rebelión contra el dominio español en Perú. El proyecto reflexiona sobre la valoración de este personaje y de su representación, a lo largo del tiempo.
Lothar Baumgarten en Salto (Pipa Cornuta), reivindica un lugar y una cultura restituyendo los nombres de los ríos de la Gran Sabana en lengua nativa.
Daniela Ortiz y Xose Quiroga en “Estado Nación-Parte1. Ejercicio #1. Historia. Cristóbal Colón” (2013) denuncian el continuo enaltecimiento de Cristóbal Colon como «descubridor» de las Américas, incluso muchos años después de la independencia de las colonias españolas.
Maria Thereza Alves en “Esto no es un albaricoque” ilustra veinte tipos diferentes de frutos indígenas que la artista encontró en un mercado del Amazonas, a los que el vendedor se refería con una única palabra: albaricoques. Sus nombres originales han quedado relegados al olvido tras décadas de imperialismo lingüístico.
Munem Wasif en Tierra de territorio indefinido (2016) realiza una meditación sobre el modo de definir el espacio y nuestra relación política con el territorio. El paisaje anónimo que aparece en la obra corresponde a una de las zonas históricamente más conflictivas entre India y Bangladés, con fronteras cambiantes definidas por las divisiones poscoloniales y la guerra.
Sandra Gamarra en Mercancía (2018) reflexiona sobre como la pintura paisajística y la naturaleza muerta son géneros vinculados con la expansión colonial europea en tierras lejanas, donde han impuesto una mirada occidental y han contribuido a crear la noción del «Otro» inferior.
Black Audio Film en Expediciones 1: signos del imperio (1983), muestra una sucesión de fotografías de archivo de la era colonial británica que se yuxtaponen con reportajes contemporáneos. Acompañada de textos y de una sombría banda sonora interrumpida por discursos políticos, la obra es una poderosa narración de constructos coloniales de la identidad y de sus ecos en la realidad contemporánea de Gran Bretaña.
Pala Pothupitiye en Colombo Fort (2016) y en El otro comercio (2016) muestra como la cartografía es una poderosa herramienta: sus líneas institucionalizan fronteras y sus textos legitiman la toponimia. También detalla la propia historia de Sri Lanka, marcada por las ocupaciones portuguesa, holandesa y británica, y la guerra civil que asoló el país durante más de un cuarto de siglo, lo que pone en cuestión la idea de una rígida soberanía territorial.
The Otolith Group en El núcleo de la gran unión (2017) revisita el viaje que el novelista afroamericano Richard Wright hizo a la Costa de Oro (Ghana) en 1953 para acompañar al Partido de la Convención Popular en su campaña para independizarse del gobierno británico. El filme es un vaciado y reconfiguración digital del archivo de más de 1.500 fotografías que tomó Wright durante su viaje y que ha permanecido inédito.
Superflex en Kwassa Kwassa (2015) cuenta la historia reciente de Mayotte, una de las antiguas islas de la República Federal Islámica de las Comoras que eligió ser recolonizada por los franceses en 2011. La construcción de pequeños barcos de fibra de vidrio hechos a mano y los viajes que permiten son el tema principal de un trabajo que constituye una meditación visual sobre la migración, la economía, la ciudadanía y la historia.
Kapwani Kiwanga en Flores para África (2014-2017) revive la memoria histórica mediante la reconstrucción de arreglos florales a partir de fotografías de archivo relacionadas con las ceremonias de independencia en países africanos. Los arreglos florales son interpretaciones realizadas por un florista profesional a partir de las fotografías históricas proporcionadas por la artista. En el transcurso de la exposición se deja que las flores se marchiten, aludiendo a nociones de impermanencia y flujo, así como a los retos que plantea la independencia.
Maryam Jafri en Día de lndependencia 1934-1975 (2009) a través de un trabajo de investigación de más de 30 archivos en los países de origen, Independence reúne fotografías de las primeras celebraciones del Día de la Independencia en antiguas colonias de África, Asia y Oriente Medio. Las imágenes ponen de manifiesto hasta qué punto las nuevas naciones han mantenido la estética, el protocolo y a veces los sistemas de gobernanza de sus antiguos colonizadores.
Para terminar, Dana Whabira en Luz solar negra (2017) analiza el uso de la lengua como herramienta de represión y manipulación. El título se inspira en la novela de culto de Dambudzo Marechera, prohibida en Zimbabue en 1981 por obscena y eurocéntrica. Escrita con letras de neón aparece la frase «It’s not the end of the world» [No es el fin del mundo], con la letra L, que no existe en lengua shona, oscurecida para crear otro significado [word, palabra]. Junto con un vídeo de una clase de shona que incluye fragmentos de entrevista con Marechera, la obra denuncia las calculadas interpretaciones erróneas de la lengua indígena y cómo a menudo se ha aludido al nacionalismo africano para justificar regímenes totalitarios por todo el continente.
Como conclusión, debemos tener en cuenta que la descolonización, en pleno siglo XXI, sigue pendiente.