Diez rodajes de películas que sufrieron accidentes
- James Bond ha sufrido un retraso en su grabación por la reescritura de guion y la lesión de Daniel Craig
- Repasamos otros rodajes que fueron una ruina
Hay ocasiones en las que muchos directores habrán pensado en el momento que decidieron involucrarse en el rodaje de una película. Decorados destrozados, lesiones de actores, enfermos a causa de pasar horas bajo el agua. Muchos factores que pueden convertir la grabación de una película en una ruina. Repasamos algunos de estos films.
James Bond no gana para sustos. El cambio de director solo fue la primera desgracia que tuvo que afrontar el equipo, lo que ha retrasado el rodaje y la fecha de estreno de la última de 007. A las continuas reescrituras de guion, se suma la lesión de Daniel Craig y su paso por el quirófano.
Otro que no gana para tiritas es Tom Cruise, que ha sufrido varios accidentes porque no utiliza doble. El actor disfruta rodando él mismo las escenas de “Misión Imposible”, aunque a veces le cueste pasar por el hospital como cuando se rompió el tobillo.
Donde sí utilizan doble es en “Residente vil”. La doble de Milla Jovovich perdió el antebrazo durante una escena de acción. Sufrió un grave accidente en moto que le costó esta parte del cuerpo. Además, la joven tiene varias lesiones en la columna vertebral y en un ojo. Aún está reclamando la indemnización y ya han pasado cuatro años.
El protagonista de “La pasión de Cristo”, Mel Gibson, resultó herido en la escena en la que era fustigado. Se dislocó el hombre al cargar la cruz, sufrió hipotermia y, el último día de rodaje, le cayó un rayo. Una vez estrenada la película, tuvo que ser operado de corazón.
Otras veces el problema es el propio directo. En “El Resplandor”, Kubrick le hizo la vida imposible a Shelley Duvall, que enfermó y perdió pelo durante el rodaje. Los cambios en el guion eran tan frecuentes que Nicholson no se aprendía sus líneas hasta minutos antes de rodar cada escena.
Y mucho cuidado con dónde son los rodajes. En “Waterworld” un huracán destruyó el atolón, que tuvo que ser reconstruido. Además, las constantes bajas por los mareos de los actores en el agua alargaron el rodaje de 65 días a 157 jornadas.
Para el rodaje de “Titanic”, se construyó una carísima reproducción a escala real del transatlántico. Tanto tiempo pasó Kate Winslet sumergida en agua helada que enfermó de pulmonía y, además, a punto estuvo de ahogarse durante una escena. Por un momento, la realidad casi supera a la ficción.
En “Tiburón” la guerra no solo la dio el robot que hacía del temeroso animal y que funcionaba mal. Uno de los barcos de la grabación casi se hunde y los problemas de alcoholismo del actor Robert Shaw obligaron a repetir escenas.
No queda ahí, Coppola casi se arruina con “Apocalypse Now”, cuyos decorados fueron arrasados por un tifón y Martin Sheen sufrió un ataque al corazón.
La palma de los infiernos se la lleva “El exorcista”. Un incendio destruyó parte de los escenarios, la protagonista sufrió una fractura de espalda debido a un truco que no salió bien y dos actores murieron durante el montaje. Normal que dijeran que esta película estaba endemoniada.