Alimentos que nos ayudan a reducir el estrés

• ¿Sabías que tenemos dos “cerebros” en el organismo”?
• Nuestro sistema digestivo tiene millones de neuronas, el sistema nervioso entérico
• Si tienes problemas de ansiedad no te pierdas estos consejos para controlarla

El segundo cerebro

En este siglo XXI tan frenético que nos ha tocado vivir, cada vez son más los problemas que nos afectan al sistema gástrico. No solo a nivel orgánico sino también emocional: la relación entre el sistema nervioso y nuestro aparato digestivo es mucho mayor de lo que pensamos y por eso es tan importante aprender a mantener a raya la ansiedad. Algo que podemos conseguir a través de métodos como la relajación o incluso con la ayuda de ciertos alimentos que nos ayudan a reducir el estrés.

El segundo “cerebro”

Sí, has leído bien, porque no solo tenemos un cerebro en el organismo, sino dos, más o menos. En nuestro sistema digestivo podemos encontrar unos 500 millones de neuronas que forman el sistema nervioso entérico, conectado al cerebro propiamente dicho, pero que puede funcionar incluso de manera autónoma.

Y por eso los trastornos neurológicos pueden afectar de diferentes maneras a ese segundo “cerebro”. Puede ser más acusado en el estómago y padecer ansiedad estomacal (se vacía peor, puede secretar más ácido…) o al intestino y traducirse en neurosis intestinal (el intestino funciona peor, no por una causa orgánica sino por algo relacionado con el sistema nervioso), etc.

¿El estrés hace que engordemos?

Estos problemas afectan prácticamente a todo el mundo. Todos vivimos con cierta ansiedad, horarios, necesidades de desplazamiento y tareas por completar. Aunque no nos demos cuenta, todas esas cosas nos afectan, más de lo que pensamos, al sistema digestivo. Y aquí viene el quid de la cuestión, ¿puede el estrés hacernos engordar? El cortisol es una hormona que aumenta con las situaciones estresantes, y puede hacer, no solo que comamos de manera más compulsiva sino que efectivamente engordemos, aunque sea un poco más de lo habitual.

Cómo podemos arreglarlo

Está claro que solo con la alimentación no podemos “eliminar” por completo ese estrés que nos genera nuestro ritmo de vida. Pero sí que podemos hacer que nos afecte lo menos posible. ¿Cómo? Por ejemplo intentando comer ordenadamente y no alterando nuestros hábitos. Masticando despacio, tranquilamente…

Incluso hay alimentos que pueden ayudarnos a reducir el estrés. Sobre todo, los pistachos que tienen una gran cantidad de melatonina. Para que os hagáis a la idea, mientras que las nueces, que son el segundo alimento que más contienen, nos aportarían unos 10 nanogramos de melatonina por gramo, ¡los pistachos nos aportarían cerca de 600! Y la melatonina nos ayuda a dormir mejor (igual que estos alimentos que os explicamos en este artículo), a relajarnos e incluso, según ciertos estudios, también ayudan a reducir los efectos físicos del estrés.

Por otra parte sentimos ser los portadores de malas noticias, pero si has escuchado que el chocolate nos ayuda a relajarnos… No es cierto. Sí que podemos obtener cierta satisfacción psicológica pero no a nivel fisiológico.