Día Mundial sin Alcohol, una jornada para reflexionar sobre sus efectos

• Más de 3 millones de personas en España consumen alcohol de forma habitual
• Una droga legal y social, muy presente e interiorizada en nuestra cultura
• Conocemos los casos de Luis y Daniel, ex adictos, que lo perdieron todo y con la ayuda de expertos han conseguido remontar

La Mañana - Día Mundial sin Alcohol, una jornada para reflexionar sobre sus efectos

El 15 de noviembre, se celebra el Día Mundial Sin Alcohol, una fecha establecida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para concienciar sobre los daños físicos y psicológicos que produce el consumo de este tipo de sustancias en nuestro organismo, un tipo de droga legal y social que parece inofensiva, de la que muchas veces se desconocen sus efectos y que en la actualidad es la droga más consumida en España.

Hay quien no concibe salir de fiesta sin beber alcohol, lo cual puede terminar convirtiéndose en una adicción muy peligrosa, no en vano, miles de personas en nuestro país lo sufren, y especialistas afirman que es una de las drogas más letales que existen, la que más muertes causa.

Fue en pleno siglo XX cuando el alcoholismo fue declarado como enfermedad y hoy en día sigue siendo el responsable de 3 millones y medio de muertes al año, principalmente porque se sigue combinando con la conducción, acarreando terribles accidentes que no solo le destrozan la vida a la persona que se encuentra bajo sus efectos, sino también a múltiples inocentes que se atraviesan a su paso.

Luis y Daniel lo consumían por diversión hasta que cambió sus vidas

El caso de Luis, es común a otras muchas personas, reconoce que empezó a beber muy joven, con 16 años por diversión, para pasárselo bien, y le costó años desengancharse de la bebida, a día de hoy lleva 27 meses sin tomar alcohol. El problema, según los expertos, no es solo usar el alcohol para salir por la noche, sino que la bebida forma parte de nuestra cultura, de nuestra forma de relacionarnos con los demás, algo que tenemos muy interiorizado, y a veces, no hay control.

Luis lo utilizaba en un principio para salir y divertirse, sin embargo, todo cambió cuando empezó a tomarlo como vía de escape, para no tener que enfrentarse a miedos o problemas laborales o familiares, al final no lo consumía de esa forma social sino en la soledad, muy compulsivamente, si hubiera sabido los daños que le ha ocasionado en su vida no lo habría probado nunca.

Está dentro de la media, los españoles empezamos a beber con 16 años. Pero, desafortunadamente, para dos de cada diez personas que lo consumen, se transformará en adicción.

Daniel, también perdió mucho por culpa de su adicción a la bebida,  su familia y amigos se distanciaron de él y no fue capaz de conservar su trabajo.  Al igual que Luis, lo consumía cuando salía por las noches, hasta que comenzó a beberlo diariamente y su carácter comenzó a cambiar,  se sentía irascible, enfadado con todo lo que le ocurría, con una resaca continua. Estaba obsesionado, y hasta que no se vio en la situación de saber que estaba perdiendo a sus seres queridos no pidió ayuda. Está convencido de que “si tú quieres, puedes” y hoy hace ya 9 meses que no lo prueba

Afecciones graves en nuestro organismo

Puede alterar el apetito, el sueño, el carácter, la emocionalidad, la alteración, cambios de humor, de peso y afecciones en todos los órganos y sistemas de nuestro organismo. Daños que conocen bien los que trabajan a diario con adictos al alcohol, José Luis Martínez, director del centro terapéutico “Momento” nos cuenta que un alcohólico sabe que el alcohol le hace daño, pero es incapaz de dejar de ingerirlo y termina perdiéndolo todo.

Cómo combatirlo

Existen iniciativas para evitar que caigan en las redes del alcohol. Entramos en uno de los autobuses violetas “Drogas o tú” que la Comunidad de Madrid pone a disposición de los jóvenes madrileños para resolver todas las dudas acerca de ésta droga, tan aceptada socialmente.

Se encargan de dar información sobre efectos y consecuencias de las drogas, y sobre el alcohol advertimos de un efecto a corto plazo del consumo excesivo y sin control como el coma etílico, una sobredosis de alcohol, que puede provocar incluso la muerte. La prevención, por tanto, es muy importante para que no se den casos como estos.

Talleres y charlas también son buenas herramientas para concienciar a los jóvenes sobre los peligros del alcohol. Preparar cócteles sin alcohol nos sirve para que prueben sabores más agradables, separando así el ocio y la diversión del consumo de alcohol para enseñar a los menores a disfrutar sin consumir ninguna sustancia nociva para la salud y su desarrollo.