Virgil Abloh, gurú de la moda y capitán de Off-White, destierra la moda deportiva
- El diseñador, uno de los más influyentes, adentra en la sastrería y apuesta por los clásicos
- Abloh dice que la moda streetwear desparecerá y que se impondrán las prendas vintage
- El Brexit empuja a Craig Green a abandonar Londres e incorporarse al calendario parisino
Es uno de los gurús del momento. Uno de los diseñadores, por llamarlo de alguna manera, más inlfuyentes. Por eso el mundo de la moda analiza cada uno de sus pasos y cada una de sus palabras. Su última revelación fue a finales de 2019. En una entrevista a la revista Dazed, Virgil Abloh dijo que en 2020 asistiremos al fin de la moda streetwear, que ha dominado toda la década anterior, y del comsumismo porque se van a imponer las prendas vintage.
Se refiere a las piezas que tienen más de 15 años (antes eran 20 años) y que con el paso del tiempo han cogido una pátina de glamur que interesa mucho más que las montañas de ropa que se lanzan cada día. Tanto en las pasarelas como en las redes sociales, esos 'nuevos cebos' que incitan a comprar y comprar. "¡Algo tiene que cambiar porque ¿cuántas camisetas más podemos tener, cuántas sudaderas, cuántas deportivas?!”, se preguntaba Abloh, que además diseña las colecciones de hombre de Louis Vuitton. Desfile que veremos este jueves 16 de enero.
Por eso había tanta expectación por ver el desfile para su firma Off-White presentada este miércoles en París. Sobre la pasarela hemos visto un trabajo más maduro que se aleja del estilo que nos tiene acostumbrados, una propuesta que se desprende de los códigos típicos de la ropa deportiva y se adentra en otros terrenos, coqueteando con la sastrería y los clásicos del armario masculino. Siempre llevando las prendas a su terreno y pensando en sus fanáticos seguidores que crecen, cambian de estilo de vida, se ponen a trabajar, se reproducen y necesitan un nuevo estilo en sus armarios.
La camisería llama especialmente la atención, tanto por los guiños a esa fiebre vintage -especialmente a las camisas icóniocas de Gucci- que amenaza instalarse en nuestras vidas como por los arriesgados ejercicios de deconstrucción. Abloh juega con el tejido, deformándolo con elásticos caprichosos para obtener distintas versiones de una misma pieza, y con el patrón, añadiendo cintas que caen por diferentes partes aportando movimiento a cada prenda.
Los pantalones se despegan del cuerpo, despreciando los modelos que se ajustan a la pierna como una segunda piel, algo que todavía, por desgracia para la vista, vemos en las calles. Ahora se ven más anchos, cayendo rectos hasta rozar el calzado. Los hay 'cargo' con grandes bolsillos exteriores por la parte delantera y también con juegos de pliegues en la caja, más sofisticados.
El jersey de punto, convertido en 2020 en la nueva camiseta, se decora con frutas o grecas retro y logos. Y cogen protagonismo las prendas de abrigo: cazadoras muy potentes, algunas oversize, y gabardinas de las de toda la vida, esas que siempre resisten el paso del tiempo. Son prendas que le sirven para poner en valor la durabilidad de la moda y poner freno al consumo masivo. Abloh se suma así al mensaje sostenible. No queda otra. Sobre la pasarela destacó el rapero Sik-k, un ídolo en Corea del Sur. ¿Desaparecerá la moda deportiva? ¿Esta tendencia es apta para todos los bolsillos?
Con el show de Off-White la maquinaria de la moda se pone en marcha, aunque antes se pudo ver el desfile de Études y el martes, los de Rodhe y Ami by Alexandre Mattiussi. Su propuesta también tiene un aire nostálgico y en ella destacan prendas en punto que parece hecho a mano, camisas con chorreras y volantes y prendas en tejidos brillantes, perfectas para no pasar desapercibido por la noche. "Tratamos de hacer ropa, ropa que nos gusta, ropa que queremos ver en la gente en la calle", decía Mattiussi después de su desfile. En el desfile de Rhode los invitados iban vestidos casi igual que los modelos, con prendas cargo y ,como no, la pieza estrella de la temporada, el chaleco. Eso sí, reinventada.
París promete y eso que la huelga de transportes -y controladores- es un gran problema. El diseñador Dries Van Noten ha pedido que a su desfile se vaya en la línea 1 de metro, unas de las que no se ven afectadas por los paros. Porque nada puede ensombrecer el gran espectáculo de la moda francesa. Un imán para muchos diseñadores de fuera, aunque por varios motivos.
Craig Green es uno de los diseñadores británicos más relevantes del momento y uno de los mejor valorados por la prensa especializada. También es uno de los que ha decidido abandonar Londres para presentar sus propuestas en París y lo hace, dice, empujado por la incertidumbre que se han instalado en la ciudad con el Brexit a la vuelta de la esquina. Su desfile es uno de los más esperados en esta semana parisina de la moda en la que destacan tres firmas españolas. Loewe, Palomo Spain y Oteyza.
Habrá 53 desfiles a lo largo de los seis días que acogen el calendario en el que hay notables ausencias, Celine, capitaneada por Hedi Slimane, y Demna Gvasalia, que ha salido de Vetements, una de las firmas más influyentes de la última década. Por suerte tenemos a Jacquemus que regresa al calendario masculino de París y compartirá protagonismo como Givenchy, con Clare Waight Keller avait como directora creativa, que se estrena con una colección masculina en la capital francesa tras presentar la primera que hizo para Givenchy en Florencia.