Ainhoa Arteta, María Esteve y la Terremoto se ponen a coser en 'Maestros de la costura'

• Las tres artistas han ayudado a Begoña, Margarita y David a coser tres vestidos de novia
• Cada una ha cosido con uno de los finalistas de Maestros de la costura
• Su visita ha dejado momentos divertidos en esta habilidad desconocida de ellas

Maestros de la Costura 3 - María Esteve, Ainhoa Arteta y Terremoto ayudan a los aprendices

La final de Maestros de la costura 3 ha contado con tres invitadas de excepción para la segunda prueba de la noche: Ainhoa Arteta, María Esteve y la Terremoto. Begoña, ha sido la que ha superado el reto y se ha convertido en la segunda duelista de la noche junto a Joshua.

Las artistas han tenido que ayudar a los aprendices a confeccionar un vestido de novia. Cada una de ellas ha estado cosiendo durante 200 minutos con uno de los finalistas.

Begoña, al haber sido el segundo mejor diseño de la primera prueba, pudo elegir con quién quería coser. La aprendiz escogió a la soprano, Ainhoa Arteta, mientras que María Esteve ha ayudado a Margarita y la Terremoto fue elegida por David. Pero las invitadas tenían otra importante misión: decidir qué vestido de novia iban a replicar.

Ainhoa quiere una máquina de coser

Ainhoa Arteta ha confesado durante su presentación que, cuando fue a Nueva York a estudiar, su primer trabajo fue como costurera. Por sus comentarios durante la prueba, le ha gustado eso de coser, y cantar, pues entre puntada y puntada ha podido dar ánimos a Begoña con alguna canción. Hasta ella misma se sorprendía de lo que estaba haciendo: "Te estoy haciendo unas mangas Begotxu...". La experiencia le ha gustado tanto que ahora quiere pedir una máquina de coser por su cumpleaños.

Por su parte, María ha dicho que es "costurero-curiosa". Se ha criado entre vestidos, pero avanzaba que iba a intentar coser: "Haré lo que pueda". Al final, ha ayudado a Margarita a hacer el dificultoso corsé del vestido, pero sobre todo a levantar el ánimo a la finalista, que ha estado negativa durante toda la prueba. "Me has ayudado mucho, sobre todo con el ánimo", le ha dicho Margarita ya con ganas de terminar el vestido.

La Terrremoto ha sido un caso aparte. Llevaba un vestido de Eduardo Navarrete, aprendiz de la primera edición del concurso. Su incursión en la costura ha sido "como observadora", aunque también como costurera con algún pespunte. Las risas y el buen rollo no han faltado en el taller de David, donde ha aprendido a hacer el plisado característico de la marca Basadúa. Pero también ha animado al finalista, que ha estado a punto de tirar la toalla.

Además, Terremoto y Caprile han recordado cómo se conocieron. En un programa de TVE sobre misses travestis en el que el diseñador era Miss Cantabria.

"He aprendido a valorar más la moda"

Ainhoa ha querido destacar el aprendizaje que saca tras 200 minutos de costura: "Detrás de cada prenda hay muchísimas horas de trabajo y he aprendido a valorar, más si cabe, la moda".