Harry y Meghan: su historia de amor
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Meghan Markle y el Príncipe Harry dejan de ser desde hoy parte de la Familia Real Británica. Después de la presión a la que se han visto sometidos en todas sus etapas como pareja, el hijo pequeño de Carlos de Inglaterra y su esposa, han decidido vivir al margen de la institución procurándose ellos mismos los fondos económicos. A partir de hoy serán simplemente Harry y Meghan.
La historia de amor de Meghan Markle y el Príncipe Harry
Se conocieron hace cuatro años. En una cita a ciegas en el verano de 2016. La prensa no tardó en enterarse del idilio. En octubre aparecían las primeras informaciones.
La actriz protagonista de la serie Suits empezaba a ser tan acosada por los paparazzis que la casa de Isabel II tuvo que pedir en noviembre respeto e intimidad para la norteamericana. En diciembre de ese mismo año, por fin salieron a la luz las primeras imágenes de la pareja.
En enero de 2017 la relación dio un paso más. Meghan conoció a los que serían sus cuñados: Kate Middleton y Guillermo de Inglaterra De estas dos parejas se hablará de todo desde entonces. Y mucho. Y de todo.
En marzo acuden a una boda juntos. No hay posado oficial. Es un evento privado, pero sí hay fotos y la relación empieza a consolidarse de cara a la opinión pública.
Cuando llega la boda de Pippa Middleton, ya no hay duda de que Harry y Meghan van en serio. Aunque Meghan no acude a la ceremonia religiosa, sí lo hace a la fiesta posterior.
El verano de 2017 lo pasaron juntos en África. A la vuelta de las vacaciones llegó la prueba de fuego para Meghan. Tenía que tomarse el té con la Reina Isabel II. La merienda debió de salir bien porque dos meses después el Palacio de Kensington anunciaba el compromiso de la pareja.
En diciembre, hecho sin precedentes, la prometida del Príncipe Harry pasó las Navidades junto al resto de la Familia Real. Entonces Meghan asumió el papel institucional que implicaba casarse con un miembro senior de la realeza y comenzaron sus primeros actos oficiales.
El 18 de mayo se casaron en una de esas bodas que se quedan para siempre en la retina de todos. Y tres meses después llegó el anuncio que todo el mundo esperaba. Meghan Markle estaba embarazada. Archie, nació en mayo de 2019 y sus padres se mostraron muy celosos de su intimidad. Algo que no gustó demasiado en Gran Bretaña.
En noviembre la pareja decide tomarse un respiro y alejarse, literalmente, de la vida real. Cancelan sus agendas y anuncian que no pasarán las Navidades en Gran Bretaña junto al resto de su familia. En enero de este mismo año llegó la bomba. De forma unilateral y a través de Instagram anuncian su intención de abandonar la Familia Real Británica y empezar una nueva independiente de la institución.