Moda sostenible, mucho más que una tendencia
- Especial tendencias de moda para el verano de 2020: ¡Busca en tu armario antes de comprar!
- El furor por el vintage y la ropa de segunda mano te permite rescatar prendas que tenías olvidadas
- Es la hora de los clásicos: camisas azules, pantalones blancos, caftanes, toreras, estampados de rayas
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Esta primavera y este verano de 2020 son especiales por muchos motivos. Durante meses, sobre todo a raiz de la Cumbre del Clima, hemos estado hablando de la sostenibilidad, del consumo responsable, de reducir el impacto negativo de la moda sobre el planeta, de avanzar como sociedad… ¡Y ha llegado el momento de poner en práctica todo lo que hemos defendido y celebrado en este tiempo, sobre todo en las redes sociales! Es más fácil de lo que parece pero sobre todo, dadas las circunstancias actuales, es el paso más lógico y el más sensato.
La moda 'amable' con el planeta no es una tendencia pasasarela, es una filosofía de vida y negocio pero también una necesidad para una sociedad moderna. Hoy, ser moderno es tener una conciencia respetuosa con el medioambiente. En España son muchos los diseñadores y modistos que están en el cambio. Entre ellos, Sonia Carrasco.
Su propuesta para esta temporada hilvana prendas muy versátiles que combinan muy bien unas con otras pero además llevan ‘trucos’ para transformarse por antojo. Como los botones que permiten unir dos partes de una prenda o cambiar las solapas de un trench. “Todos los botones están hechos con papel reciclado, algodón ecológico o nuez de corozo. Y también todo el packaging, e incluso las etiquetas que las hacemos con sobrantes de tejido. Guardamos todos los sobrantes y vamos a hacer un tapiz enorme con ellos”, decía el día del desfile.
La cuarentena a la que nos vemos obligados para frenar la pandemia del coronavirus está cambiando nuestras costumbres y nuestros hábitos. Más de lo que creemos. Hemos entrado en la primavera sin apenas darnos cuenta (el confinamiento y el cambio de tiempo tienen la culpa) y el hecho de no poder pisar la calle nos ha privado de mirar escaparates e ir de tiendas para ver qué se lleva y qué nos proponen para esta temporada. Por suerte están las redes sociales y los medios de comunicación online. Y por suerte tenemos armarios porque en ellos está todo, o casi todo, lo que nos vamos a poner encima el día que podamos salir a la calle.
Quizá la tendencia más potente sea la vuelta de la ropa vintage y la de segunda mano, una moda aupada por las famosas, tanto en las alfombras rojas como en sus diarios virtuales, es decir, en Instagram. Esto nos invita a bucear en nuestra memoria primero y en nuestros baúles, altillos y trasteros, después. La idea es rescatar todas esas prendas que están pidiendo a gritos una segunda o tercera vida. Es hora de ver con otros ojos esas prendas que hace tiempo que no nos ponemos y si hay es preciso comprarlas se puede recurrir a tiendas online y aplicaciones que ofrecen un extenso catálogo de joyas del ayer ¿Pero qué tenemos que recuperar?
Esta temporada viene cargada de nostalgia e invita a volver a los clásicos. Las prendas más sencillas, esas que aguantan con elegancia el paso del tiempo, recobran protagonismo. La camisa azul es la pieza estelar. Se lleva en tono pastel y en tono índigo, masculina y muy femenina, ajustada o en patrón oversize, lisa o con rayas. Es una prenda fetiche que te resultará fácil encontrar en tu armario o en el de tu pareja. La camisa, que se impone ahora a las camisetas, es versátil y admite distintas combinaciones, tanto para el día como para la noche, para un look serio y para otro informal. Hay una tendencia a los patrones grandes y se llevan especialmente las que son más largas por detrás que por delante.
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Otra de las prendas que arrasa es el pantalón. Llevamos varias temporadas alabando sus virtudes y ese quizá la pieza que más ha cambiado en estos años. Los nuevos llevan elástico y cordón en la cintura, eliminan la bragueta y llevan grandes bolsillos. El rey absoluto es el pantalón blanco pero como en este revival de los clásicos es obligatorio rendir culto al vaquero. Atrás quedan, por suerte, los pitillos y los rotos en las rodillas, ahora se tiende al pantalón que parece nuevo sin serlo o que parece viejo sin serlo. Por eso hay que recuperar todos los que las últimas tendencias desterraron y si compramos hay que buscar los que no parezcan que están hechos ahora.
El pantalón es la prenda que mejor encaja en la tendencia retro. Se llevan los que tienen un aire setentero, de talle alto y ligeramente acampanados. Y siempre en tonos azules. Se admiten con cremallera y con botones, con bolsillos exteriores (un nuevo 'cargo') e interiores, con aspecto desgastado o impolutos… Resultan perfectos para llevar con camisa pero también con un top.
El top bra, una mezcla entre sujetador y bustier, arrasó en 2010 en todas las pasarelas y en la calle, y ahora pide a gritos otra oportunidad. Y lo hace abriendo sus posibilidades. Si antes solo se llevaba con falda, ahora resulta perfecto con pantalones, con camisas abiertas, chalecos y abrigos de verano sin mangas. Los hemos visto en casi todos los desfiles y firmas como Loewe, Dior, Givenchy y Tom Ford han hecho de él toda una declaración de intenciones. Es una prenda que te permite jugar a las superposiciones y dependiendo de cómo y con qué la combines te da opciones de día y de noche. Tiene un potente caracter deportivo pero ahora se presenta muy sofisticado, feminino y absolutamente arrebatador. Con pantalón arrasa pero también combina bien con faldas tubo, faldas lenceras y faldas vaqueras.
Hay prendas que se ajustan al cuerpo y otras que lo liberan o envuelven. Es el caso de las túnicas y los caftanes. Son prendas impregnadas de sensualidad y exotismo que antes solo se veían en las colecciones de baño pero ahora tienen personalidad propia y saltan de las playas y piscinas a la calle, con elegancia y un adorable aire vintage. Tuvieron su máximo apogeo en los años setenta pero nunca han desaparecido, siempre han estado ahí y ahora reclaman que les prestes la máxima atención porque tienen el poder de resultar perfectos para el día y par ala noche, tan solo tienes que elegir los complementos adecuados para que cambie de estilo. Valentino y Dior los proponen de estilo camisero pero Elie Saab les imprime un halo retro poderosamente sexy. Con el caftán llegan todas sus variedades, desde el vestido túnica hasta el vestido diosa. Busques el estilo que busques, lo encontrarás.
El blanco y el negro, clásicos que todos tenemos en el armario, tienen un poder enorme pero siempre en solitario, con looks monocromáticos de los pies a la cabeza. El verano ha sido siempre el escenario del blanco y en 2020 también lo es. La novedad radica en las texturas. El algodón sigue presente pero ahora se abre la puerta a todo tipo de acabados para darle otras expresiones a este tono que es la mezcla de todos los colores.
Tejidos rugosos, con discretas aplicaciones o bordados, con sencillas mezclas de materiales... y siempre aportando luz. Sarah Burton, directora creativa de McQueen, lo propone con enormes cinturones negros creando contraste y Lemaire apuesta por el total look, tanto en la ropa como en los complementos. De día resulta perfecto y de noche es arrebatador. Este verano haz una oda al blanco.
Los tonos pastel son sin duda los protagonistas de esta temporada, sobre todo los de la gama de azules, verdes y rosas. Pero hay colores que irrumpieron con fuerza el verano pasado y afianzan su poder ahora. Es el caso del marrón. Es un tono que no suele gustar mucho y que provoca cierto rechazo pero no hay que tenerle miedo. Es perfecto para estos meses en los que la piel se broncea y combina de maravilla con complementos mate, especialmente en negro, y con los de textura metalizada, creando un potente contraste. Lo vemos en firmas tan potentes como Hermés y Fendi, en tejidos opacos y en transparencias.
Otro de los colores que son tendencia es el verde, un tono con muchos significados que resulta perfecto en estos tiempos marcados por la sostenibilidad y también por la esperanza. Prada y Carolina Herrera han apostado por él pero también firmas más jóvenes como Custo o Lacoste.
Los estampados pierden protagonismo y tan solo los cuadros y las rayas tienen espacio esta temporada. Las rayas siempre en vertical que estilizan mucho más la figura y resultan más fáciles de combinar. Se apuesta por el total look; es decir, llevar rayas en la camisa y el pantalón o falda. E incluso para los abrigos de verano o las sobrecamisas. Será sin duda una temporada de tonos lisos y esto es una suerte. Las prendas de tonos lisos son, por lo general, atemporales y tienen muchas vidas. Rebusca en tu armario esas prendas sencillas pero que tienen un enorme poder de atracción. El ‘menos es más’ nunca ha tenido tanto sentido.
Por eso otra de las tendencias es el minimalismo. Parece que hemos dejado atrás el maximalismo, los volantes exagerados, los lazos gigantes, las aplicaciones-joya, el derroche… Las prendas, las buenas, no necesitan adornos para gustar y para que te queden bien. La eliminación de ornamentos, éticos y estéticos, marca la moda de esta primavera y del verano.
Una de las piezas más atrevidas es la falda lencera. Juan Vidal, Fendi, Burberry, McQueen… son muchos los diseñadores y firmas que apuestan por esta pieza. El estilo menina arrasó en las pasarelas y ahora llega a la calle más suavizado en las formas pero más osado en los tejidos. Lo vemos en conjuntos de día, de noche y e incluso para las novias. La lencería está de moda desde que Madonna la puso de moda en los años 80 y de esa época viene también la blazer corta o blazer torera.
Esta mini chaqueta tan funcional se ha recorrido casi todas las pasarelas y ahora pide paso en tu armario. Busca bien al fondo, seguro que encuentras alguna. O pídesela a tu madre, tu tía e incluso a tu abuela, porque esta prenda, aunque no lo parezca, es una veterana de la moda. Para chicas y para chicos. Porque la fuerza de la moda de esta temporada es que las prendas que más se llevan, esos clásicos actualizados, no entienden de géneros y saltan, con orgullo, de un armario al otro.
Hay otras tendencias que no hay que olvidar. Los volantes siguen presentes en las colecciones y resultan divertidos y elegantes. Las prendas pañuelo están en alza, sobre todo en camisas de seda y vestidos veraniegos. Son otro guiño a esa estética vintage que marca la pauta de la temporada. Tras una potente apuesta por la ambigüedad y la ropa sin género se vuelve a la femenidad absoluta aunque reinventada. Dior, Victoria Beckham, Juan Vidal, Alexander McQueen, J.W. Anderson, Loewe, Fendi, Hermes... son muchas las firmas que redefinen este concepto abriendo la puerta a otras siluetas, tejidos y colores. Ahora es tu turno. Abre las puertas del armario y busca esas prendas que te sientan bien, que te gustan, que aguantan con dignidad el paso del tiempo y dales otra oportunidad.