Fidel: "No quiero parecer ni grosero ni engreído, pero de verdad creo que Dios al nacer me tocó"
- Ha sido el concursante más divertido y viral: "Los memes y todo eso me lo tomo fenomenal. Me flipa lo creativa que es la gente"
- Asume el papel de pacificador que ha tenido: "Ahora aquello es Hiroshima"
- Entre risas sobre su expulsión de Masterchef: "¡No fue mi culpa!"
Edición y montaje: Mercedes Jaramillo
Fidel es el concursante más viral de Masterchef 8. No sólo lo asume, se siente orgulloso: "Al parecer he hecho gracia. A la gente le he caído bien. Hay amigos míos a los que le han preguntado: Oye, ¿Fidel es así? ¿Está haciendo un papel? Y es que lo peor de todo es que soy así. Y los memes y todo eso me lo tomo fenomenal. Me flipa lo creativa que es la gente. Y el feedback que estoy teniendo con ellos."
Nos confiesa que el primer día de emisión, ya en su casa tuvo que apartar el móvil porque era imposible leer todas las notificaciones que le llegaban. "Las redes sociales es que son tremendas", nos dice entre risas. Igual que reconoce que es algo que no quiere olvidar " ni con el "mayor de los 'alzheimeres": "Voy a echarlo de menos ahora una vez fuera del programa, cuando se olviden de mí."
Fidel reconoce que es un tipo con suerte
El jurado siempre le ha criticado su bajo nivel culinario. Pero como a Jordi y compañía les encantan los retos, decidieron darle una oportunidad. "Tengo algo que creo que es innato. No quiero parecer ni grosero ni engreído, pero de verdad creo que Dios al nacer me tocó." Todos sus amigos daban por hecho que entraría a Masterchef cuando anunció que se presentaba al casting: "Nací sólo con seis meses, es verdad. Y tampoco alardeo de ser muy inteligente. Pero tengo una suerte especial. De verdad. En todo, en general. La vida me sonríe."
Fidel, el pacificador de Masterchef
Él sonríe también. Su papel ha sido clave hasta ahora en el concurso. Buen carácter, enorme corazón (como el que le tocó en la prueba de exteriores) y buen compañero. No lo decimos nosotros. Lo dicen todos los expulsados que han hablado con Corazón y tendencias hasta la fecha. Digamos que Fidel hacía el papel de pacificador: "Era árbitro de boxeo también" dice sonriendo.
"No era fácil. La verdad es que sobre todo el tema de la convivencia es duro". Muchas horas de plató, mucha competencia, que terminaban pasando factura en la casa que comparten los concursantes durante las semanas de grabaciones: "Había días que los 21.30 estaba en la cama. Decía: yo ya no quiero saber nada de nadie. Me voy a dormir y mañana será otro día, ya no quiero escuchar más historias." Como él mismo nos cuenta, era previsible: "Era normal que entre caracteres que hubiera ahí algunos chocaran... Bueno es que ¡era de cajón!"
Eso sí. Lo tiene claro. Se queda con lo bueno. Asegura que ha habido momentos muy entrañables que recuerda con las risas como banda sonora. Pero queremos saber más y le preguntamos cómo será esa casa desde que él no está para soltar el chiste que rompa la tensión: "Aquello, ahora es Hiroshima." nos dice entra carcajadas y teatro: "Id avisando al ejército que acordonen la casa. Si hay algún policía secreto que pueda estar allí, que simule que es un cocinero, lo que queráis. Pero por favor no los dejéis solos. Lo que pueden crear ellos es peor que el coronavirus." Y nos deja con la miel en los labios cuando con su mirada intensa nos promete que lo más intenso está por llegar: "Vienen curvas".
Michael, el único con el que no congenia
Ya lo dijo en el programa. De Michael no se fía. Y es que el concursante norteamericano se ha convertido en el blanco de las críticas del resto de aspirantes ¿Por qué? "Sinceramente no tiene nada ver su personalidad delante de las cámaras con luego su personalidad fuera y entonces la convivencia es más complicada. A los demás los quiero bastante. A unos más y a otros menos, pero con él, es con el que menos afinidad tengo. Él es más introvertido y no se relaciona con nosotros."
Ese sentimiento, más o menos acentuado, lo tienen el resto de compañeros de Fidel. Y en el último programa de Masterchefemitido hemos visto como los jueces, especialmente Samantha, salieron a defender a Michael frente a los demás concursantes: "Bueno, por audiencia." Cree Fidel: "Por el perfil que el cumple les interesará. Pero los que estamos ahí sabemos lo que hay."
Para el que tenga dudas sobre sus afirmaciones busca un dato que para él es clave: "Sólo te digo que si una mujer de 74 años y medio no lo ve claro... ahí lo dejo". Recordando que ni Juana traga al californiano.
¿Conseguirá Fidel volver en la repesca?
Consciente del drama que supone su marcha para las redes sociales, Fidel promete guerrear más. Quiere repesca: "Voy a tope. Como siempre. Además, teniendo el handicap de que me han eliminado no por un plato que haya cocinado yo, tengo un poquito la expectativa de que si ya hago un buen plato, tener un pequeño valor añadido y que sean un poco más cariñosos conmigo y poder entrar otra vez."