Acampada nocturna e historias de miedo en la Academia
- Los chicos se han puesto el pijama y han instalado sus colchones en la sala de ensayos
- Ivan Labanda les ha contado historias de miedo ambientadas con efectos sonoros
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La de hoy ha sido una noche distinta en la Academia de OT 2020. Con Nia, Hugo y Eva como finalistas, y Maialen, Flavio, Samantha y Anajú jugándose los dos puestos que quedan libres para llegar a la final, la agenda de los chicos está a rebosar de actividades y ensayos. Pero no todo es trabajar en Operación Triunfo y hoy han tenido un viernes noche... de miedo.
Al terminar la cena, Noemí les ha dicho a los chicos que se fuesen a poner el pijama y que trajesen los colchones a la sala de ensayo. Los concursantes se han quedado muy sorprendidos y rápidamente han ido a lavarse los dientes y a cambiarse la ropa. Cuando han visto lo que la organización del programa había preparado para ellos en la sala se han quedado alucinados.
Un tapete verde simulando ser césped, una hoguera en medio, una nevera portátil, unas cestas de mimbre, prismáticos, linternas, fiambreras… ¡todo lo indispensable para ir de acampada! Eva se ha mostrado entusiasmada y no ha podido dejar de tocarlo todo.También había una guitarra que Hugo se ha agenciado enseguida mientras sus compañeros intentaban averiguar qué iba a ocurrir. ¿Un scape room? ¿Una noche de miedo? ¿Una fiesta de pijamas?
De repente, se han apagado las luces y se ha encendido la hoguera. “Pues yo tengo un poco de miedo”, ha exclamado Maialen mientras Nia no dejaba de reírse a carcajada limpia. “¿Pero Halloween no era en noviembre?” ha preguntado Hugo. Y sí, lo han pasado mal cuando alguien que iba disfrazado ha entrado en la estancia.
Los chicos han salido corriendo en pleno ataque de risa y de gritos. Maialen ha sido quien más ha sufrido, asegurando que la broma la estaba asustando de verdad. Todos han abandonado la zona baja y han subido a lo alto de los escalones mientras "un lobo" los intimidaba. “No nos puede tocar porque hay coronavirus”, ha dicho Mailen para tranquilizarse.
Finalmente, el visitante se ha quitado la máscara… ¡y era Ivan Labanda! Cuando los chicos han descubierto su identidad ya se han sentido tranquilos para volver a la zona de los colchones. El profesor de interpretación les ha dicho que esa noche iban a contar historias de miedo (“miedo chachi”, ha dicho para calmar a Maialen) y les ha preguntado si han vivido experiencias paranormales. Anajú ha dicho que sí y ha relatado la suya.
Hugo ha confesado que ve ovnis desde hace un montón de años: “Tú te pones a mirar el cielo y hay luces. Se quedan un rato, luego se van, luego miras a otro lado y hay lo mismo…”. Maialen, por su parte, ha afirmado que Franco le habló una vez cuando estaba con su prima.
Ivan ha iniciado sus narraciones de miedo con la famosa historia de "La chica de la curva", con efectos sonoros incluidos que han hecho pegar saltos del susto a más de uno. No obstante, las historias que más les han impactado son las que hacen referencia al Hospital del Tórax, el centro psiquiátrico que estaba en el lugar donde ahora se ubica la Academia. Y ahí sí que han pasado miedo...
Los ruidos, los golpes y las voces que han ido colándose en sus narraciones han puesto los pelos de punta a los concursantes, así como el rostro masculino que ha aparecido tras los cristales (bautizado como "el chico guapo" por las chicas). La narración de las gemelas ha sido la que ha puesto punto final a la noche de miedo. Noemí ha entrado en la sala y les ha dicho que su acampada había terminado y que podían quedarse a dormir ahí o irse a las habitaciones. Los chicos han permanecido un rato más en la sala y Hugo se ha venido arriba contando relatos paranormales vividos por él mismo y por su madre.
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