Madrid posa para Vogue orgullosa de su pasado y mirando al futuro
- La revista rinde homenaje a la ciudad en un número dedicado a “la generación de un nuevo mundo”
- Miguel Reveriego fotografía a la top española Miriam Sánchez en lugares emblemáticos de la capital
- Vemos a diseñadores como Carlota Barrera, cantantes como Nia de O.T. y Billie Eilish, activistas como Jedet...
Cuando llegues a Madrid, chulona mía voy a hacerte emperatriz de Lavapies; y alfombrarte con claveles la Gran Vía, y a bañarte con vinillo de Jerez. En Chicote, un agasajo postinero con la crema de la intelectualidad y la gracia de un piropo retrechero más castizo que la calle de Alcalá. Este famoso chotís de Agustín Lara suena desde las páginas de la revista Vogue que en su número de agosto se convierte en una carta de amor a la ciudad: a sus edificios y sus calles pero también a su espíritu abierto y tolerante.
El Edificio Metrópolis, el Paseo de la Castellana, la Plaza Mayor, la Puerta del Sol y la Plaza de Castilla posan con orgullo y sin coches para el fotógrafo Miguel Reveriego y también, cual chulapa, la modelo madrileña Miriam Sánchez que, según dice la revista, encarna "el poder creativo de la juventud y el talento aplicado a todos los ámbitos". Vogue quiere retratar el alma de la ciudad y además poner en valor el potencial regenerador de una ciudad que mira al futuro.
Por eso en sus páginas vemos y leemos a diseñadores como Carlota Barrera, Paolina Russo, Harris Reed, Quique Vidal, Arturo Obegero, Ernesto Naranjo; cantantes como Lianne La Havas, Nia Correia, Billie Eilish; artistas como Claudia Riera, Carmen Arrufat; emprendedores como Maitane Alonso, Gala Freixa; activistas como Amal Hussein, Jedet... Jóvenes que Vogue ampara porque ve en ellos talento y poder para cambiar el mundo. Pero la revista tiene un talante abierto, integrador e inclusivo, y acoge en su grupo de jóvenes a mujeres con más de 50 años porque la juventud no tiene edad y el espíritu joven no entiende de números.
“La idea de ser jóvenes no trata tanto de anhelar que el tiempo se detenga… como de que algunas de las sensaciones, experiencias y emociones de esos años de formación nos acompañen el resto de nuestra vida”, dice Eugenia de la Torriente, directora de la revista que apoya además las acciones del Ayuntamiento a través de su plataforma Madrid Capital de Moda que pelea con fuerza para apoyar el comercio local y de proximidad, tendiendo puentes entre el público y las tiendas y mercados de cada barrio.
Las imágenes de Reveriego ofrecen una mirada distinta a la ciudad. Sola, vacía... imponente. Rasgos potenciados por el uso del blanco y negro para enfatizar que no hay bullicio ni coches, ni esas gentes de distintos lugares que han decidido vivirla, para siempre, por una temporada, por una noche. Madrid es la musa de poetas y cantantes, de cineastas y escritores, y ahora también de la revista Vogue.
Allá donde se cruzan los caminos, donde el mar no se puede concebir, donde regresa siempre el fugitivo. Pongamos que hablo de Madrid. (Joaquín Sabina)