Cosmética natural: Todo lo que debes saber y beneficios para tu piel
- Conoce qué hay que tener en cuenta a la hora de ver la composición y leer las etiquetas
- Qué tienen de especial estos bolsos para que todas las mujeres los quieran tener
La cosmética natural, orgánica o ecológica, o artesanal es cada vez más demandada por un consumidor cada vez más experto, consciente de que la cosmética es un producto con el que debemos ser exigentes y que le gusta informarse sobre sus componentes.
La demanda crece en calidad, pero también en naturalidad. Los cambios en la mentalidad de consumo son los que marcan las leyes del mercado, y cada vez son más las personas que se preocupan por el comercio justo, el comercio de cercanía o los productos “cruelty free”, el desarrollo sostenible, el impacto medioambiental, la salud del planeta además de nuestra salud… lo que hace que la cosmética natural y ecológica se posicione cada vez más como una opción muy demandada entre las personas comprometidas con la ecología ¿eres una de ellas?
¿Qué es la cosmética natural?
La cosmética natural y ecológica no es más que la evolución del uso de los productos naturales como tratamiento de belleza. Ya los antiguos romanos usaban productos naturales como la miel para el cuidado de la piel y son también conocidos los baños de Cleopatra con leche de burra y el uso del aceite de oliva para embellecer su rostro.
Se trata de una alternativa a la cosmética convencional, más suave y libre de sustancias químicas algunas de las cuales cada vez se toleran menos por parte de una población cada vez más sensibilizada y con tendencia en auge a pieles reactivas y atópicas.
Se trata de una opción muy recomendable incluso para personas con piel muy sensible. Nuestros hábitos y nuestro ritmo de vida han cambiado, el nivel de stress es elevado, la cantidad de tóxicos a los que estamos expuestos debido a la polución es enorme, la sobreexposición a las pantallas y a la luz azul… se necesitan soluciones naturales que nos ayuden a minimizar el impacto de las consecuencias que ello conlleva en nuestra salud y no sólo en nuestro cutis. En este sentido la investigación y la ciencia afortunadamente están dando pasos adelante de forma muy importante.
Qué normativa siguen los productos naturales
La cosmética natural actualmente no dispone de un reglamento específico, sino que se desarrolla bajo el mismo reglamento que afecta a todos los productos cosméticos (Reglamento 1223/2009 CEE) ello significa que los fabricantes pueden decidir los % de naturalidad de sus fórmulas libremente y llevar a cabo las estrategias de marketing que deseen para el posicionamiento de sus productos.
Sin embargo, es muy fácil perderse en el mundo de las normativas y aspectos legales, ya que actualmente existen en el mercado muchas certificaciones privadas de cosmética natural (Cosmos, Natrue, Ecocert, BDIH,…) ¿A cuál hay que hacer caso? Existe una norma internacional llamada ISO 16128que unifica todos los criterios de definición de la naturalidad en una fórmula, cuyo objetivo es la harmonización y la transparencia en la comunicación, unifica el sistema de cálculo para definir el % de naturalidad de un producto. Algunas marcas ya identifican los % de naturalidad según este estándar común y específico para los productos cosméticos
¿Qué debe tener un producto para ser natural y cómo están hechos?
Para resolver esta pregunta hemos querido preguntar a una especialista en el sector de la cosmética natural, Marta Estebanell, directora técnica de SkinLove.
Lo más importante son los ingredientes en la fórmula y que el máximo % sea de origen natural. Asimismo, la inversión en el packaging y la sostenibilidad deben maximizarse empleando materiales reciclables o “green” siempre que sea posible o buscar alternativas que minimicen el impacto ambiental.
Los ingredientes naturales funcionan de manera diferente a los ingredientes sintéticos. Además, su tacto, aspecto y olor es diferente. A lo mejor la versión natural de un ingrediente puede caducar antes o no funcionar en la fórmula.
La sensorialidad de la textura, su color, su olor, su aspecto en general puede variar enormemente cuando en una fórmula empleamos ingredientes totalmente naturales.
Beneficios de la cosmética natural sobre nuestra piel
En primer lugar, se reduce la carga química de origen sintético en contacto con nuestro organismo. Los productos naturales no deben contener sustancias que no aporten un beneficio sobre la piel. La cosmética natural y ecológica es más compleja de formular, son mezclas complejas que requieren de una definición precisa para poder identificar su composición y efectos.
Es una cosmética biomimética con nuestra piel, lo que significa que presenta una gran afinidad en contacto con nuestra epidermis cuidándola y regenerándola de forma suave a la vez que eficaz.
Tiene una acción preventiva a la vez también que efectiva y por tanto el resultado es más visible y evidente a medio y largo plazo. La cosmética natural y ecológica defiende la cosmética “sin prisas” y con ello desaparecen los “productos milagro”.
Favorece el equilibrio de las funciones cutáneas de forma natural tanto para la piel como para el cabello y ello es esencial para mantenerlos en su óptimo estado.
La combinación de diferentes ingredientes naturales conforma tratamientos estéticos y ecológicos que permiten devolver a la piel la luminosidad perdida, un aspecto visiblemente rejuvenecido o protegerla simplemente ante factores externos.
Finalmente, despierta nuestros sentidos y emociones de forma muy diferente a través de los aceites esenciales, extractos vegetales, aguas florales… y muchos otros componentes que se utilizan en la cosmética natural y ecológica.
Qué es lo que hay que tener en cuenta a la hora de comprar un producto de cosmética natural
- Aprende a leer el listado de ingredientes, INCI, es el único dato que nos permite identificar la composición de la fórmula y su naturalidad.
- Recuerda: en el listado de ingredientes, los componentes se ordenan por concentración de mayor a menor, hasta concentraciones del 1% (a partir de entonces se pueden ordenar de forma aleatoria).
- Ojo: sé prudente con la información de la parte frontal de la etiqueta. Contrástalo con el listado de ingredientes y su posición en ella. Recuerda, los últimos ingredientes tienen poca presencia en la fórmula.
- Hay muchas certificaciones en cosmética natural que son privadas, pero actualmente existe una norma internacional llamada ISO (16128) que unifica todos los criterios de definición de la naturalidad en una fórmula. Esta nueva norma más transparente, ya que unifica el sistema de cálculo para definir el % de naturalidad de un producto. Algunas marcas ya identifican los % de naturalidad según este estándar común y específico para los productos cosméticos. Es una buena guía para saber el % de naturalidad de un producto de una forma harmonizada y global. Fíjate en el frontal de todos los productos de donde encontrarás dicho tanto por ciento.