Llega 'About Time: Fashion and Duration', la esperadísima expo del MET
- 33 000 vestidos y complementos invitan a la reflexión sobre la moda y su durabilidad
- Se modificó para tener en cuenta el 'Black Lives Matter' surgido tras la muerte de George Floyd
- La Gala del MET extiende su pasarela en las redes sociales y las celebrities se vuelcan con ella
Tenía que haberse inaugurado en mayo de 2020 pero la pandemia ha retrasado la apertura seis meses. Este 29 de octubre el Metropolitan Museum of Art de Nueva York (The MET) abre sus salas al tiempo. La esperadísima exposición About Time: Fashion and Duration está ya lista para llevar al visitante a un viaje que comienza en 1870 y termina en 2020. Un siglo y medio de moda "en el que se analiza cómo la ropa genera asociaciones temporales que combinan pasado, presente y futuro", dicen Andrew Bolton, conservador del Instituto del Traje y uno de los comisarios.
Consta de más de 33 000 piezas de ropa y accesorios expuestos para invitar a la reflexión sobre la moda y su durabilidad. "La moda, como muy pocas formas de expresión artística, capta una época y un espíritu y los proyecta hacia adelante", añade Max Hollein, director del Met.
Para evitar una instalación cronológica Bolton ha apostado por presentar duetos de 'distinta edad', colocando juntas dos piezas de dos épocas diferentes que comparten similitudes estéticas. "La idea es hacer que el pasado y el presente coexistan para abandonar el marco cronológico y ver el tiempo de una manera muy diferente".
La muestra se articula en dos galerías fabricadas como enormes esferas de reloj y organizadas en torno al concepto de '60 minutos de moda': cada 'minuto' contará con un par de prendas, representando el trabajo primario la naturaleza lineal de la moda y el trabajo secundario su carácter cíclico. "Para ilustrar el concepto de duración de Henri Bergson (del pasado coexistiendo con el presente) las obras de cada par estarán conectadas a través de forma, motivo, material, patrón, técnica o decoración", dicen en el museo.
Pongamos algunos ejemplos. Vemos un vestido de falla de seda en negro de línea princesa que data de finales de la década de 1870 que dialoga con una falda Bumster de Alexander McQueen de 1995. Cerca hay un vestido de satén de seda negro con enormes mangas de mediados de la década de 1890 que rivaliza con un conjunto deconstruido de Comme des Garçons de 2004.
Hay patrones, botones, lentejuelas, bordados y encajes que alguna vez fueron signos de opulencia y estatus social pero que décadas más tarde se convirtieron en detalles puramente estéticos, en simples instrumentos de fantasía. "La moda siempre está en movimiento, es nueva y es efímera. Pero también a veces se queda obsoleta", dice Andrew Bolton.
Resulta fascinante que esta exposición se haga este año, cuando el MET celebra su 150 aniversario, porque es quizá uno de los museos que mejor ha sabido reinventar el tiempo como sinónimo de duración, poniendo en valor piezas de otras épocas y remarcando su vigencia, tanto en las salas como en la gala que suele preceder a su inauguración y que este año se ha cancelado. Pero hay más motivos fascinantes para ir a verla. Virginia Woolf se convierte en la narradora 'fantasma' que acompaña al viajero, del tiempo y del espacio.
El uso del color es especialmente llamativo y esclarecedor. Hay una serie de vestidos negros y este tono sirve para neutralizar detalles que despisten y centrarnos en los cambios que sufre la silueta con el paso del tiempo. Solo al final hay un vestido blanco, un diseño de alta costura de 2020 de Viktor & Rolf. "Está elaborado a partir de retales reciclados formando un patchwork y representa el futuro de la moda, ese reto que tiene el sector por delante para ser sostenible y responsable, pero también pone de manifiesto el compromiso de la moda con la sociedad, solo colaborando juntas ese reto será mucho más fácil de lograr.
El tiempo, o mejor dicho, los nuevos tiempos han marcado también la exposición. En el último minuto los responsables la han modificado para tener en cuenta el movimiento Black Lives Matter surgido tras la muerte de George Floyd en mayo "La versión original de la exposición incluía diseñadores de color, pero no muchos, e hice algunos cambios", reconoce Bolton, el hombre que trabaja estrechamente con Anna Wintour.
Ella, la todopoderosa editora del Vogue USA ha recibido duras críticas por la falta de igualdad en sus publicaciones, e incluso ha tenido que leer y escuchar insultos de racista. "Ciertamente he cometido errores, y si hubo errores cometidos en Vogue bajo mi liderazgo, depende de mí corregirlos, y estoy decidida a hacerlo", dijo en una entrevista con el New York Times.