Vega sufre alopecia y confiesa de una manera valiente que no teme verse sin pelo
- La cantante ha compartido con sus seguidores que padece alopecia consecuencia de la Covid-19
- Dolor de espalda y fuertes migrañas hacen que la cantante se sienta sin fuerza en su día a día
- Consultamos con un especialista la relación entre alopecia y Covid y posibles tratamientos
Vega nos ha sorprendido mostrándose una vez más valiente y sincera a la hora de abordar temas que le preocupan. En esta ocasión la cantante ha querido compartir con sus seguidores que sufre alopecia como consecuencia de haber padecido coronavirus: “Hace un mes me diagnosticaron una alopecia secuela de Covid. La estoy tratando a ver si hay suerte. Mi espalda está dolorida, todos los días a partir de media tarde me cuesta aguantar el tipo, a veces me falta el aire y las migrañas se suceden danzando despreocupadas”. De esta manera tan directa ha explicado la que fuera concursante de la segunda edición de Operación Triunfo el momento delicado de salud que está atravesando, “de ahí la vanidad de una foto con pelo mientras dure. No me asusta, ya me vi rapada al cero por voluntad”
““
Vega tiene 41 años y siempre se ha caracterizado por su sinceridad. La cantante afirma que lleva mucho tiempo sin maquillarse y que ha decidido hacerlo para una entrevista en la que ha aprovechado para hacerse el selfie que ha compartido en su perfil de Instagram. “He concluido que se me ha olvidado mi cara de #selfish, que apenas comparto mi cara en las redes salvo que tenga algo que decir. Salvo hoy. Que tengo tan poco que decir como mi foto”. Discreta y emotiva añade unas emotivas palabras: "Uno vive conforme a sus prioridades, responsabilidades, temores y vanidades, a su juicio de lo justo y coherente, de sus sueños. Me refugié en un refugio, no es redundante, es literal. Aquí, en esta cabaña, empiezo a sentirme simplemente mi propia víctima, víctima de todo eso, desde mis propias prioridades hasta mis sueños".
Alopecia y Covid
En Flash Moda hemos hablado con un con un especialista en tratamientos capilares, el Dr. López Bran que nos cuenta sobre la relación entre el estrés por los confinamientos, los fármacos, o incluso la propia COVID-19 y cómo pueden provocar una excesiva caída de cabello. “Hay que tener en cuenta que la infección por cualquier virus y en este caso el coronavirus, no iba a ser una excepción, puede provocar una pérdida aguda intensa de pelo. Lo que los dermatólogos llamamos un efluvio, que probablemente va a ser temporal, va a durar unas semanas y posteriormente se va a restaurar el cabello perdido”.
Cómo identificar los signos de una mayor caída del cabello
En esta situación tan excepcional que estamos viviendo es importante extremar los cuidados del cabello y saber identificar a tiempo signos de una caída que no sea normal para poder consultar cuanto antes a un especialista: “Al peinarnos, a lavar el pelo, al ponernos un jersey, en la almohada, vamos a observar que la cantidad de pelo que estamos perdiendo es muy superior a la que podríamos considerar normal. Son características evidentes que enseguida uno detecta y que deben ser motivo de consulta para poder poner el remedio y la solución eficaz”.
Junto a una higiene adecuada del cuero cabelludo, una rutina de sueño y un aporte correcto de aminoácidos en la dieta, este profesional incluye distintas soluciones dermatológicas para tratar la alopecia: “La utilización de fármacos que han demostrado su eficacia clínicamente comprobada y que, además, son seguros, como por ejemplo el conocido Minoxidil en aplicación local en concentraciones que van del 2 al 5% o la utilización del plasma rico en plaquetas, un procedimiento sencillo que consiste en la extracción de sangre como nos extraerían en cualquier analítica que nos realicemos. Esa sangre que obtenemos se centrifuga en una centrifugadora. La centrifugación conlleva la separación de los diferentes elementos de la sangre y deja en el sobrenadante las plaquetas, que va a ayudar a una mayor y mejor recuperación del pelo perdido por las causas que estamos viviendo.
En última opción en caso de que la caída por estrés vaya unida a la alopecia androgénica estaría indicado el trasplante de pelo, una de las intervenciones más demandadas en los últimos años.