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Investidura de Joe Biden

Ivanka Trump se despide de la Casa Blanca con un futuro incierto: así han sido sus cuatro años como 'primera hija'

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Ivanka Trump, la mano derecha de Trump, dice adiós a la Casa Blanca
Ivanka Trump, la mano derecha de Trump, dice adiós a la Casa Blanca

La ausencia de Ivanka Trump en la investidura de Joe Biden invita a hacerse preguntas sobre el futuro de su carrera política. También contrasta con sus palabras de despedida como asesora de la Casa Blanca. En su último comunicado, la 'primera hija' decía que servir a los estadounidenses bajo el mandato de su padre ha sido "el mayor honor de su vida" pero, donde Donald Trump afirmaba que la familia "ya encontrará una manera de volver" a la administración, Ivanka se posicionaba neutralmente: afirmando que espera que la nación pueda "seguir hacia delante" y que los ciudadanos logren "reconocer sus diferencias y encontrar un terreno común".

Este discurso mesurado, que después continúa por senderos patrióticos, alimentaba la expectación existente sobre su asistencia o no a la investidura. Tras varias semanas de especulaciones, con fuentes afirmando que Ivanka se habría enfrentado a su padre para proteger su propio futuro en política, NBC News informaba de que "no se esperaba la asistencia" a la ceremonia de ayer, donde el exvicepresidente Mike Pence fue el único representante de su legislatura.

El discurso de despedida de Ivanka Trump en sus redes sociales

El discurso de despedida de Ivanka Trump en sus redes sociales @ivankatrump

El protocolo nunca ha sido la mayor prioridad de los Trump, que por primera vez desde 1952 tampoco han ofrecido la reunión con "té y tour" que generalmente protagonizan las primeras damas de Estados Unidos: Melania Trump no dio la bienvenida a Jill Biden, como hizo con ella Michelle Obama, ni a la familia que tomará su relevo en la Casa Blanca. Por su parte, Ivanka y su marido, Jared Kushner, habrían pasado sus últimas horas en el despacho oval revisando los 100 indultos que el presidente ha ofrecido a sus aliados antes de abandonar Washington y poner rumbo a Florida en una huida sin gloria antes de la ceremonia.

¿Qué futuro le espera a Ivanka tras la toma de posesión? Analizamos la figura de la hija del presidente Trump: de modelo a empresaria y una de las asesoras más influyentes de su padre, sus pensamientos e intenciones son el secreto mejor guardado de la última legislatura.

El presidente de Estados Unidos Donald Trump e Ivanka Trump salen de la Casa Blanca en Washington

El presidente de Estados Unidos Donald Trump e Ivanka Trump salen de la Casa Blanca en Washington

El asalto al Capitolio, un duro golpe para su imagen

Las cámaras la captaban hace unos días desalojando el ala oeste de la Casa Blanca y vistiendo los colores de su padre. Con un vestido rojo y el control taimado que la caracteriza, es difícil adivinar qué se le pasa por la cabeza: Ivanka Trump le ha dedicado cuatro años a construir una carrera política que, según las malas lenguas, se tambalea a la luz de los eventos de las últimas semanas. Con su condena insuficiente y tardía del asalto al Capitolio, la hija del presidente podría haber perdido sus últimos apoyos entre la élite estadounidense.

Ivanka Trump abandona el ala oeste de la Casa Blanca, 14 de enero de 2020

Ivanka Trump abandona el ala oeste de la Casa Blanca, 14 de enero de 2020

Según declaraciones obtenidas por la revista Vanity Fair, Jared Kushner e Ivanka se habrían convertido en "apestados" incluso dentro de su círculo social tras una insurrección donde el papel de Ivanka no está claro. Por un lado, fuentes aseguran que la 'primera hija' habría tenido una influencia clave en la intervención televisada en la que Donald Trump, si bien fallaba en condenar el asalto, llamaba a los manifestantes a contener la violencia y respetar a las fuerzas de seguridad. Por otro, ella misma se veía obligada a borrar un tuit en el que calificaba de "patriotas" a la misma masa de personas a la que su padre decía en directo: "Os queremos, sois muy especiales, idos a casa".

Varios medios reportan que esto habría destruido la legitimidad de Ivanka, que en su silencio cómplice y su lealtad a su padre ha perdido la confianza de sus aliados más moderados, entre los que se incluyen magnates, compañeros de negocios y estudos e incluso su cuñada, la modelo Karlie Kloss. Sin embargo, se la sigue señalando como una potencial candidata presidencial, y podría reemprender su carrera política en Florida.

Ivanka Trump durante un acto de campaña en Iowa, noviembre de 2020

Ivanka Trump durante un acto de campaña en Iowa, noviembre de 2020

Ivanka Trump, una figura 'meticulosamente ambigua'

¿Es Ivanka más sensata y moderada que Donald Trump o es sólo la cara amable de su padre, a quien respalda incluso en sus decisiones más polémicas? El magnate y su heredera han sido sido opacos a conciencia en lo tocante a este tema, y es muy difícil determinar el alcance de la influencia que Ivanka ha tenido como asesora.

Para muchos ella, graduada cum laude en la escuela Wharton y amiga hasta hace poco de Chelsea Clinton, ha sido siempre la encargada de hacer control de daños: responsable de templar entre bambalinas los exabruptos de Trump pero, en público, siempre leal a su apellido. Y esta versión, deseable incluso para los detractores de Donald Trump —que desean ver en la heredera un futuro más templado para el partido republicano—, parece del agrado de la propia Ivanka. La distancia real o imaginaria que la separa de su padre puede ser el tícket dorado que la haga triunfar allá donde él, tras allanarle el camino, ha fracasado.

Ivanka durante la visita oficial de Donaldd Trump a Jerusalén, 2017

Ivanka durante la visita oficial de Donaldd Trump a Jerusalén, 2017

Tal vez por eso, cuando se le ha formulado la pregunta de forma directa, Ivanka ha escogido mantener la ambigüedad. Evita pronunciarse sobre las decisiones de su padre que más heridas levantan, como la cuestión migratoria o la violencia racial en Estados Unidos, y una cita suya se repite: “La gente me pregunta si alguna vez estoy en descuerdo con mi padre, y sería un poco extraña si no lo estuviera”.

Ivanka insiste en esta división entre lo público y lo privado incluso cuando, en política, el discurso público es el único discurso oficial: "Diría que no hay que confundir la falta de denuncia pública con el silencio", le decía a la periodista Gayle King en una entrevista con CBS News que abordó estas cuestiones. "Creo que hay muchos modos de hacer que tu voz sea escuchada. Cuando no estoy de acuerdo con mi padre, él lo sabe. Me expreso con total candor".

Ivanka Trump durante la campaña republicana en Georgia, diciembre de 2020

Ivanka Trump durante la campaña republicana en Georgia, diciembre de 2020

Él lo sabe, pero nosotros no: el único mensaje explícito que Ivanka Trump y Jared Kushner han transmitido durante el mandato de Trump es el de un frente totalmente unido en el apoyo al que hoy se convierte en expresidente de Estados Unidos. Sus acciones dicen lo contrario que este distanciamiento calculado: viaja en su nombre a Jerusalén, a Abu Dhabi y a la cumbre del G20, mientras aplaude el carácter "espontáneo" de Donald Trump y el modo en que "siempre dice lo que piensa". Se atiene al discurso oficial, y las preguntas de la prensa a menudo quedan sin contestar.

La 'marca Ivanka': feminismo, trabajo y familia

Antes de su victoria electoral, Donald Trump ya tenía claro cuáles iban a ser las competencias oficiales de Ivanka. Lo que en su momento definía como “temas con importancia crítica para las mujeres y familias” se ha transformado en un lema: "el empoderamiento económico de las mujeres", que incluiría el apoyo a las pequeñas empresas y la creación de empleo.

De hecho, Donald Trump generaba gran polémica al afirmar, a finales de 2019, que Ivanka era responsable de la creación de 14 millones de puestos de trabajo. Una afirmación que inflamó a varios medios y que la revista Forbes analizaba cuidadosamente y desmentía parcialmente: lo que Ivanka hizo fue acordar con más de 300 compañías la creación de programas de prácticas y otro tipo de oportunidades, aunque varios de estos acuerdos no se debieron exclusivamente a sus esfuerzos y muchos estaban tácitcamente cerrados antes de que la 'primera hija' entrase en escena.

El presidente Donald Trump e Ivanka en Ahmedabad durante una visita oficial a India, febrero de 2020

El presidente Donald Trump e Ivanka en Ahmedabad durante una visita oficial a India, febrero de 2020

En cuanto a la cuestión feminista, Ivanka representa con su imagen un giro conservador que, sin embargo, no duda en abrazar el término. Se declara pro-vida, en contra del aborto y una defensora de la familia, pero es una mujer empresaria y afirma: “Creo en la igualdad de género al 1000 por 100, lo que me convierte en feminista por definición. Y me enorgullece”. Y lo hace extensivo a su padre, por encima de los escándalos que ha protagonizado: “Yo creo que es feminista. Es una de las razones primordiales por las que soy la mujer que soy.”

Si Ivanka ha sido la cara visible de las políticas de empleo de Trump, su marido, Jared Kushner, es a quien se atribuye la labor diplomática en Oriente Medio y los acuerdos de paz de Israel con Marruecos, Emiratos Árabes, Baréin y Sudán.

Ivanka Trump en su visita a la gran mezquita Sheikh Zayed en Abu Dhabi, 2020

Ivanka Trump en su visita a la gran mezquita Sheikh Zayed en Abu Dhabi, 2020

Cronología de Ivanka: de modelo a 'primera hija' de la Casa Blanca

1996-2002: Ivanka debuta como modelo a los 14 años. Entonces no era la hija de Donald Trump, sino de Ivana: una modelo y esquiadora checa que la convertía en su legado sobre las pasarelas. Fue portada de Seventeen con 16 años y desfiló para Versace, Marc Bouwer o Therry Mugler. En sus apariciones públicas, insistía en haber sido educada desde niña para comprender el valor del dinero. Quería viajar a París para estudiar francés y economía y atender la universidad de Pensilvania, considerada una de las mejores escuelas de gestión, para dedicarse a construir y administrar edificios.

Una joven Ivanka Trump junto a su madre, Ivana

Una joven Ivanka Trump junto a su madre, Ivana

2002-2007: Ivanka entra en el mundo de los negocios y se hace cargo del legado de Donald Trump. En 2002 unía fortunas con Paris Hilton para emprender un pequeño negocio; en 2005, la revista Diva entrevistaba a la que había sido bautizada como "la niña de los 1000 millones de dólares". En 2007 la revista Hola presentaba a la vicepresidenta de la empresa familiar: a los 24 años, se convertía en el miembro más joven de la junta directiva de la Universidad Trump y fundaba una línea de joyería.

Ivanka Trump desfila con la modista Toton Comella en la pasarela Gaurdi, en Barcelona, en 1999

Ivanka Trump desfila con la modista Toton Comella en la pasarela Gaurdi, en Barcelona, en 1999 EV

2008-2016: Ivanka comienza su relación con Jared Kushner, el editor más joven de Nueva York. Aunque su padre se opone en un principio a su conversión al judaísmo ortodoxo, ambas familias aprueban y sufragan el enlace. Su linea de joyería crece y funda una marca de ropa con escaparates en Estados Unidos, Canadá y varios países árabes. Tiene tres hijos con Jared Kushner.

2016-2017: Su padre anuncia la firme intención de sortear las leyes contra el nepotismo para hacerle un hueco a Ivanka en la Casa Blanca si sale elegido. Se anuncia que se encargará de "temas relacionados con las mujeres y la familia". Ivanka Trump y Jared Kushner renuncian al sueldo público —sus empresas siguen generando beneficios— y participan en reuniones internacionales. La marca de ropa de Ivanka triunfa en China.

Donald Trump e Ivanka en un acto de campaña en 2018 en Cleveland

Donald Trump e Ivanka en un acto de campaña en 2018 en Cleveland

2018-2020: Se enfría su relación de amistad con Chelsea Clinton, que critica su papel en la incorporación del odio al discurso político estadounidense. En 2019, su padre baraja colocarla al frente del banco mundial, pero Ivanka finalmente lo rechaza. Se afianza la influencia del matrimonio Trump-Kushner por encima de miembros del gabinete Trump como John Kelly o el secretario de estado, Rex Tillerson. Trabajan en las relaciones con Corea del Norte, Oriente Medio y Oriente Próximo. Se afianza la imagen pública de Ivanka como "feminista emprendedora" y propulsora del empleo, aunque afirma: “El trabajo más importante que cualquier mujer puede tener es ser madre”.

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