Gipsy Chef nos revela la receta de filete ruso que su familia lleva décadas preparando. Spoiler alert: hay muchísimo queso implicado
¿Cómo hacer patatas fritas crujientes por fuera y cremositas por dentro? Ahí va la receta de las patatas fritas de tus sueños
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Por
RTVE
¿Qué es un filete ruso? Nos atreviríamos a decir que la versión extrajugosa, extrasabrosa y extracárnica de la hamburguesa. Gipsy Chef nos desvela su mezcla secreta de carnes y sus aderezos estrella para que lo disfrutes siempre que quieras.
Su acompañante ideal son unas deliciosas patatas fritas, crujientes y saladitas. Cuando queremos hacer patatas fritas en casa, a veces no salen tan bien como querríamos... con los trucos de Gipsy, esta vez las clavas.
Filete ruso con patatas fritas perfectas Filete ruso con patatas fritas perfectas
carne
Ingredientes
Preparación
200 g de jarrete de ternera picado
200 g de aguja de ternera picada
100 g de panceta de cerdo (sin curar) picada
Queso parmesano (o Manchego o Idiazábal... cualquier queso seco valdrá)
Romero fresco
1 huevo
Pan rallado
Patatas agrias
Aceite de oliva para freír
Pimienta negra
Sal
Mezcla las tres carnes con las manos y salpimenta. Ralla un montón de queso parmesano y añádelo.
Pica el romero fresco e incorpóralo a la mezcla con las manos.
Casca un huevo sobre la carne e intégralo con las manos.
Añade pan rallado y mezcla bien hasta que se absorba.
Deja reposar esta mezcla en la nevera entre 30 minutos y una hora.
Pela las patatas y córtalas en puente nuevo (unos 5-7 cm de largo y 1,5 cm de ancho). Salpiméntalas generosamente y masajea con las manos para que sal y pimienta queden bien repartidas. Déjalas reposar un rato en un colador para que suelten agua.
Fríe las patatas a fuego lento unos 10-15 minutos, hasta que estén blandas. Retíralas con una espumadera.
Aplasta un poco las patatas con los dedos y vuélvelas a freír en aceite muy caliente.
Saca la mezcla de la nevera y forma los filetes dándoles una forma un poco más pequeña que una hamburguesa. Dóralos a la plancha con un poco de aceite de oliva. Sirve con las patatas fritas, un toque de pimienta negra recién molida y, si te gusta, mostaza a la antigua.