¿Viviremos en otro planeta en el futuro? ¿Cómo será la Tierra?

• Los recursos naturales de nuestro planeta se están agotando, ¿dónde viviremos en el futuro?
• No te pierdas Whaat!?, el programa de divulgación científica presentado por Javier Santaolalla y La Gata de Schrödinger
• Ya está disponible el capítulo 6, "Tecnología"

¿Viviremos en otro planeta en el futuro?

Los recursos de nuestro planeta son los que nos mantienen vivos pero, por desgracia, son limitados. Muchos de ellos ya se están agotando a causa de los seres humanos. Aunque todavía se desconoce con qué exactitud la Tierra puede aguantar cubriendo las demandas de alimentos, energía, agua o transportes, el fin está más cerca de lo que pensamos.

[Mira el capítulo anterior aquí: "Medio Ambiente"].

Llegados a este punto, algunos expertos se preguntan si volveremos al mar, que es de dónde venimos. Lo cierto es que esta disparatada idea podría convertirse en realidad. Todo parece apuntar a que las ciudades flotantes, e incluso las submarinas, son el futuro de las civilizaciones. Además, estas urbes serían una posible solución tecnológica a la falta de espacio a la que nos enfrentamos en los próximos años.

Ciudades flotantes o submarinas

Por un lado, la candidata a convertirse en la primera ciudad flotante de la historia es Oceanix City. El diseño está basado en los Objetivos de Desarrollo Sostenible, siendo capaz de producir sus propios alimentos y energía y cubrir abastecimiento de agua dulce para crear un proyecto de metrópolis marítima modular. Esta ciudad flotante autosuficiente está pensada para crecer, transformarse y adaptarse orgánicamente a lo largo del tiempo.

Otra idea, más difícil tecnológicamente, es construir ciudades submarinas. De hecho, una empresa de ingeniería de vanguardia en Japón ya ha presentado un proyecto para su construcción: Ocean Spiral. Esta ciudad estaría sumergida a tres kilómetros de profundidad y tendría una capacidad de 5.000 personas y 75 pisos de altura.

Tampoco se descarta la posibilidad de vivir en otros planetas o, al menos, de poder visitarlos frecuentemente. El primer hotel espacial de lujo del mundo se llamará Aurora Station y es un proyecto de la empresa estadounidense de tecnología espacial Orion Span. Se trata de una estación modular que acogerá a seis personas a la vez, incluyendo dos miembros de la tripulación, y hará viajes de 12 días de recorrido espacial. Según la propia empresa, podría estar funcionando en 2022. Eso sí, el precio por una estancia de 12 días es de 9 millones y medio de dólares. ¿Será el turismo espacial la versión comercial de la carrera espacial?

Desafíos del futuro

Sin duda, uno de los objetivos más ambiciosos de la tecnología espacial es obtener energía solar desde el espacio. Es decir, poner paneles solares en órbita, donde el sol brille casi constantemente y usar transmisores de microondas de baja intensidad para convertir la luz en electricidad. ¿Cómo podemos conseguirlo? Hay varias formas como, por ejemplo, a través de campos fotovoltaicos en la Luna o de paneles suspendidos. Sin embargo, hoy en día sería carísimo y, por este motivo, no es viable por el momento.

Mientras, otra de las grandes incógnitas es de dónde vamos a sacar los materiales para fabricar nuestras ciudades si estamos en otro planeta. Obtener minerales fuera de la Tierra podría ser viable gracias a los asteroides.

Estos cuerpos celestes rocosos que orbitan alrededor del Sol contienen cantidades variables de minerales muy valiosos y cuyas existencias en la Tierra están agotándose. Por ejemplo, los asteroides metálicos tienen sobre todo hierro, pero también minerales como el platino (el metal más caro del mundo), el oro y el iridio. Todos ellos se encuentran en los asteroides en una proporción mucho mayor que aquí, en nuestro planeta.

En efecto, el valor de estos minerales no pasa desapercibido, varias empresas privadas y organismos como la propia NASA ya están trabajando en la idea de enviar una nave a los asteroides para extraerlos. Solo con los minerales de los asteroides del cinturón principal de nuestro Sistema Solar (entre las órbitas de Marte y Júpiter) hay una riqueza que equivale a 100.000 millones de dólares por cada habitante del mundo.

Los robots semilla

Aunque esta no sería la única forma de aprovechar estos recursos voladores. Existe la posibilidad de que unos robots semilla fuesen capaces de utilizar la materia prima del asteroide para construir otras partes de cualquier proyecto usando la impresión 3D. Serían robots programados para imprimir otros componentes y expandir estructuras de forma autónoma.

Se trata del proyecto RAMA (Reconstituting Asteroids into Mechanical Automata) de la empresa Made In Space, que pretende transformar asteroides en naves autónomas. Por ahora es solo ciencia ficción, pese a que ellos insisten en que lo conseguirán en 2040. Por ahora, descubre esto y mucho más en Whaat!?, el programa de divulgación científica presentado por Javier Santaolalla y La Gata de Schrödinger. ¿Te lo vas a perder?