Puede que el concepto Wellington no te suene de nada, pero sabemos que te encantará: estamos hablando de embadurnar algo en salsa cremosa, envolverlo en hojaldre y hornearlo hasta que el exterior esté dorado y crujiente y el interior quede exageradamente jugoso. ¡Una preparación demasiado fácil para un resultado tan espectacular!
Tradicionalmente se prepara con solomillo de ternera, vaca o buey, pero hoy Gipsy Chef estaba inspirado y ha decidido apostar por la lubina, que acompaña de finísimas láminas de calabacín, cantidades generosas de salsa de albahaca, tomate seco y mostaza y —por si fuera poco— unas adictivas patatas nuevas.
No diremos que el Wellington es más delicioso con pescado que con carne, pero... ¡Ups! Lo acabamos de decir ;)
Pescado Wellington Pescado Wellington
pescado
Ingredientes
Preparación
1 lomo de lubina (que antes de limpiar pesara unos 2 kg). Pide al pescadero que quite las escamas, corte las aletas y retire la espina central
Un manojo de hojas de albahaca
1 bote de tomates secos en aceite
2 cucharadas de mostaza de Dijon
Aceite de oliva virgen extra
Vinagre de Jerez
1 o 2 calabacines
Una masa de hojaldre (a poder ser, rectangular)
1 huevo
Azúcar moreno
Patatas nuevas
Romero fresco
Pimienta negra
Sal
Prepara el aliño triturando la albahaca, el aceite del bote de tomates secos, 4 o 5 tomates secos, la mostaza, un buen chorro de aceite de oliva virgen extra, un chorrazo de vinagre de Jerez y un toque de sal.
Corta los calabacines en lonchas muy finitas.
Bate un huevo con un toque de pimienta y otro de azúcar moreno. Sobre papel de horno, estira el hojaldre y píntalo con el huevo batido. Coloca una primera capa de calabacín encima y salpimenta.
Estira la lubina sobre el calabacín, dejando debajo el lado con piel. Embadúrnala con la salsa y cubre con una segunda capa de calabacín. Salpimenta.
Si no te la quieres jugar, cubre el calabacín con otra lámina de hojaldre. Si eres atrevido como Gipsy, gira el lomo de pescado sobre sí mismo hasta que se cierre, presiona los bordes hacia dentro y píntalos con el huevo batido. Sube y estira el extremo inferior hasta sellarlo con el superior. Ayudándote del papel, dale la vuelta al pescado. Cierra la parte delantera y, con la ayuda de un tenedor, aplasta la parte de atrás para que parezca una cola de pez.
Forra la bandeja con papel de aluminio y coloca el pescado (sobre papel de horno) encima. Hornea siguiendo las indicaciones del paquete de hojaldre que hayas comprado (en este caso, 30 min a 200 ºC).
Coloca patatas nuevas en un bol, ponles pimienta negra y aceite de oliva y tapa el recipiente con papel film. Cocina en el microondas a potencia máxima durante 8 minutos. Saca las patatas del bol, córtalas por la mitad, vuelve a colocarlas en un bol y embadúrnalas con el resto del aliño y un chorrito de aceite de oliva. Mételas en un recipiente que puedas meter en el horno con un último toque de pimienta negra y hornea junto a la lubina durante los últimos 20 minutos de cocción de la misma.
Esparce romero sobre las patatas, corta una tira de lubina hojaldrada y remata con un chorrito de aceite de oliva virgen extra.