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Tania Llasera: "La vida no te da más de lo que puedes masticar"

  • 'La vida a mordiscos', un libro para conocer a Tania Llasera a través de su historia... ¡y de recetas!
  • Recetas caseras, para la vida, para pasar el tiempo y que alimentan el cuerpo y el alma

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Tarde lo que tarde - 'La vida a mordiscos' con Tania Llasera

Comer es un placer, eso es un hecho. Y en España es casi obligatorio. Así que, si lo tuyo es la cocina y el buen comer, pero con ese punto desobediente, atento a 'La vida a mordiscos' de Tania Llasera, nuestra invitada de hoy en Tarde lo que tarde.

Un recetario para rebeldes a los que les gusta jugar entre los fogones: "Es para personas ingobernables como yo que no seguimos una receta ni para atrás. Con lo cual, es una ironía que yo escriba un libro de recetas. Es verdad que no es un libro de recetas al uso. Tiene bastantes cosas, tiene un paseo por mi vida y de lo que he aprendido, por ejemplo recetas para aprender a decir que no, que es muy difícil. Un poquito todo mi viaje".

La idea, nos confiesa Tania, surgió antes del confinamiento y fue de su abuela: "Mi abuela lleva muerta 12 años, pero yo sigo hablando con ella siempre. No sé si me escucha o no, pero de repente un día, me manda un mensaje mientras yo estaba en el sofá con una resaca de escándalo y con mi hija encima. Y me manda un mensaje Anne Germain, la medium, y me dijo: "Sé que tienes pensado escribir un libro. Escríbelo", y me dijo que desde hacía días tenía una persona muy educada y muy persistente que le decía que escribiera lo que tenía en mente. Y era mi abuela porque luego le hizo varias preguntas y efectivamente".

Otro de los motivos por los que Tania se lanzó a escribir 'La vida a mordiscos' fue el de guardar la báscula para siempre en el baúl de los recuerdos. Y así nos lo ha asegurado en el programa: "A mí los vaqueros son los que me dicen si estoy o no estoy cómoda. Mi propia piel. Yo la báscula hace mucho tiempo que la aparqué y quité las pilas". En el libro lo deja claro, así como que lo único que ha cambiado en ella es su "yo exterior": "Yo he sido nudista toda la vida y estoy muy cómoda con mi cuerpo para bien y para mal. Y tengo muy claro que "me la trufa" lo que piensen los demás. La pandemia lo ha puesto muy claro: la gente que te merece la pena darle un abrazo, es la gente que realmente deberías escuchar. El resto, pamplinas".

Abanderada del amor propio para el que, nos asegura, también tiene receta: "Mira, hoy tenía un día de bajón. Ayer vi 'Vikingos' hasta las cuatro de la mañana, he dormido cuatro horas y hoy me he vestido de "colorinchis", me he duchado, me he puesto música y luego he estado bailando descalza un rato que viene bien", por ejemplo.

Su viaje personal por la vida

En 'La vida a mordiscos' se combinan recetas con capítulos de su vida y de sus propias experiencias, y en el que encontramos a Tania Llasera en estado puro: "Me desnudo. Yo no sé escribir un libro sin desnudarme". El punto de partida es la niñez con esa mezcla de culturas. Por un lado, el marmitaco y por otro esas costillas crujientes y adictivas con las que se nos ha hecho la boca agua.

Llegamos a la adolescencia y vemos a una Tania mucho más de cremas frías, chili con carne, cheescakes que traduce en lecciones como "comete tus propios errores" o "esta casa no es un hotel". En la veintena es donde comienza esa explosión de pasta, patatas y ensaladas: "Es la edad en la que te haces la cama donde luego vas a dormir el resto de tu vida. Es donde haces las elecciones de lo que realmente quieres estudiar, encontrar pareja en mi caso, empezar a currar... Hacerte la cama y elegir sábanas. De verdad, me parece de las décadas más importantes de tu vida".

Por supuesto, no nos olvidamos de pasearnos por la maternidad, de ese episodio de la vida de Tania Llasera que le dio la vuelta a la tortilla a todo. "Ser madre para mí fue algo muy deseado, pero es verdad que me costó muchísima terapia llegar a ese punto porque, además, yo como vivía de mi imagen, me daba mucho miedo quedarme embarazada y quedarme sin trabajo y que luego no los puedes aparcar. Una vez que los tienes, son 24 horas al días, entonces hay que elegir muy bien".

'La vida a mordiscos. Recetas para rebeldes que no siguen recetas', el nuevo libro de Tania Llasera en el que nos enseña a comer con mucho gusto y a dejar a un lado los estereotipos y prejuicios. En definitiva, "a que no se nos atragante la vida".