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Acacias 38

9 historias de amor inolvidables que marcaron 'Acacias 38'

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Maite y Camino pueden empezar una nueva vida en París
Maite y Camino pueden empezar una nueva vida en París

El amor es una de las principales señas de identidad de 'Acacias 38'. A pesar de las desgracias y los problemas que han surgido a lo largo de las temporadas en el barrio, el amor ha sido el motor de personajes buenos y malos, motivo para matar y para morir, salvación y condena. Si echamos la vista atrás, en estos seis años hemos vivido grandes historias de amor que dejarán su marca para siempre en la serie.

Aprovechamos que 'Acacias 38' cumple seis años en antena para hacer un repaso de algunas de esas historias de amor inolvidables. No están todas las que son, pero si son todas las que están.

Maite y Camino

Maite y Camino, maitino para sus fans, se convirtió desde el minuto uno en una historia de amor viral, que cuenta con su propio podcast, rompió tabúes y suprimió cualquier frontera, física o ideológica en practicamente todo el mundo. Un ejemplo de igualdad, amor y tolerancia. ¡Nunca la olvidaremos!

Liberto y Rosina

Cuando murió Maximiliano, Rosina se sumió en una profunda tristeza. Sentía que después de enviudar, la vida no tendría más historias para ella. ¡Se equivocó! Cuando apareció Liberto, una indescriptible pasión y magnetismo les unió y ¡hasta el día de hoy! Libersina es una de las parejas más divertidas, queridas y envidiadas del barrio.

Jose y Bellita

El torero y la cantaora, ¡el tándem perfecto! Jose y Bellita son la vívida imagen de la pareja perfecta: artistas, cómplices y amantes. Tras recorrer juntos todos los escenarios y paises del mundo, ahora disfrutan de una madurez feliz y plena. ¡Qué envidia!

Antoñito y Lolita

Él señorito y ella criada, ninguna norma social evitó que el flechazo entre Antoñito y Lolita durara para siempre. Sólo la trágica muerte del hijo de Ramón en el atentado anarquista, que acabó también con la vida de Carmen, separó a una de las parejas más estables y queridas del barrio. ¡Y con un hijo encantador

Fabiana y Servando

Primero socios y después marido y mujer. Una historia tranquila, que se fraguó sin prisas con el paso del tiempo, en la tranquilidad, en el trabajo diario. Una historia que sigue viva cinco años después de su boda.

Jacinto y Marcelina

Sólo hay algo que Jacinto ame por encima de sus cabras: Marcelina. Le ha sido fiel en la distancia, en la enfermedad y hasta en el abandono. Cuando Marcelina decidió ingresar en un convento de clausura, el portero siguió cumpliendo y respetando su compromiso. ¡Un amor en mayúsculas!

Casilda y Martín

Una de las historias de amor más grandes y trágicas que hemos vivido en la historia de 'Acacias 38'. Fue tan grande el dolor de Casilda al perder a su joven marido, que la joven criada nunca ha conseguido rehacer su vida. Se casaron jóvenes, en la cárcel y no puedieron cumplir su sueño de tener un hogar y unos hijos. ¡Una enorme pérdida!

Cinta y Emilio

La hija de Bellita y el hijo de Felicia se las vieron y desearon para que sus respectivas familias les dieran permiso para salir. Hoy en dia viven en Argentina y esperan su segundo hijo. Un amor por el que valió la pena luchar y pelar. ¡Bravo!

Valeria y David

Lo que comenzó como un matrimonio de mentira se ha convertido en una preciosa historia de amor entre una pianista y su carcelero/cuidador. Incluso con la vuelta de Rodrigo, el verdadero marido de Valeria, la pareja ha conseguido volver a reencontrarse y emprender un nuevo camino juntos para siempre.