En esta ocasión, el chef Alejandro Montes se pasa por Como Sapiens. Además, nos explica la diferencia entre mermelada y confitura y usa terminología gastronómica que no te resultará muy familiar.
¿Sabrías decir lo que es osmotizar? ¿O gelificar? Esto y mucho más, nos lo cuenta durante la elaboración de la mermelada. Y como bien sabrás, hay un montón de variedades de mermeladas y se pueden elaborar con todo tipo de frutas. Aquí la haremos de frutos del bosque, concretamente con arándanos, fresas, frambuesas y moras.
Y que no te extrañe si has visto el tarro de la mermelada del revés, tiene una explicación… Si le das al ‘play’ te enterarás de todos estos trucos y a continuación, te dejamos los pasos a seguir para que la prepares desde casa:
Mermelada casera de frutas del bosque Mermelada casera de frutas del bosque
postres
Ingredientes
Preparación
500 g de frutas del bosque (arándanos, fresas, moras y frambuesas)
250 g de azúcar
Zumo de medio limón
El día anterior, disponemos los frutos del bosque en un bol (arándanos, fresas, frambuesas y moras) con azúcar y removemos. Tapamos con papel film y lo dejamos reposado en la nevera toda la noche.
Durante este tiempo, el azúcar penetrará en la fruta y sacará todos sus jugos. Con esto obtendremos una mermelada más colorida, con una cocción más regular (muy importante para la conservación) y de más calidad.
Cocemos los botes o recipientes en los que vayamos a guardar la mermelada al baño María. Si, si, como lo oyes, cocemos los tarros durante media hora y los secamos bien. Este proceso es para esterilizarlos al máximo y favorecer así la conservación de la mermelada.
Volviendo a las frutas del bosque, una vez hayan reposado toda la noche con el azúcar, les damos una cocción rápida entre 5 y 8 minutos desde que empiece a hervir. La temperatura ideal exacta sería de 104 ºC.
Una vez cocido, añadimos el zumo de limón para facilitar que la fruta gelifique.
Rellenamos uno de nuestros tarros con la mezcla, lo cerramos bien y lo dejamos reposar del revés en la nevera hasta que se enfríe. Esto provocará que se forme un vacío en el recipiente.
Con estos pasos, la mermelada duraría seis meses, pero si queremos que aún dure más, podemos cocer el tarro lleno y bien cerrado 30 minutos más, lo dejamos reposar de nuevo en la nevera boca abajo, y la mermelada nos duraría incluso un año.