La soldadesca: la evolución de una burla a Bien de Interés Cultural
- Érase una vez una burla que se inició hace 120 años… y a día de hoy se lucha por su reconocimiento
- Su existencia se remonta a la época inmediatamente posterior a la Guerra de la Independencia
- Te contamos la historia de esta tradición en España Directo
Érase una vez una burla que se inició hace 120 años… y a día de hoy se lucha por su reconocimiento como Bien de Interés Cultural. Se trata de la Soldadesca de El Gamonal, en Toledo, y nos vamos hasta allí para conocerla.
'La soldadesca' surge como una burla al ejército francés que tras la Guerra de la Independencia había sido expulsado de España y antiguamente suponía un importante rito de paso para los mozos de Gamonal, pues acabado el servicio militar entraban a formar parte de la misma, permaneciendo en ella para siempre.
¿Qué significa que sea declarado como Bien de Interés Cultural?
Conseguir este reconocimiento es todo un mérito: se trata de una figura jurídica de protección del patrimonio histórico español, tanto mueble como inmueble.
Y es que los carnavales del Gamonal van siempre unidos de forma ineludible a la soldadesca, una agrupación formada por vecinos y vecinas de todas las edades cuya existencia se remonta a la época inmediatamente posterior a la Guerra de la Independencia. Esta, fue un conflicto bélico que se dio entre 1808 y 1814 dentro del contexto de las guerras napoleónicas y donde España se enfrentó al ejército francés. Para burlarse de las tropas napoleónicas durante el conflicto bélico, surgió esta broma.
Cada vez que la Soldadesca sale a las calles es por hechos festivos, aunque el papel de cada uno de sus integrantes debe estar regido desde que se forman filas hasta que se rompen por la seriedad, la disciplina y el rigor.
Así lo mostraron durante las jornadas del sábado y el domingo por las calles de todo el municipio, haciendo las delicias de los presentes con el desfile de estos trajes típicos y únicos, así como con la exhibición de unos detalles muy propios: escarapelas, alabardas, bandas, Bandera de las Ánimas, jubones, refajos o bastones… y todo eso sin olvidar a esos instrumentos que hacen que toda la agrupación tenga un ritmo que seguir.