La nueva Meri: liderazgo y confianza en sí misma

• Con la confianza por las nubes, Meri coge ritmo en MasterChef
• Los jueces elogiaron su reinterpretación de la clásica tarta Tatin
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Meri no quiere que vuelva nadie a las cocinas

Si algo está descubriendo Meri en su paso por MasterChef es que es capaz de enfrentarse y superar muchos más retos de los que ella se pensaba. Y el último programa de MasterChef ha sido buena muestra de ello. Ya en los momentos previos a la prueba del robo, Meri se mostró tranquila y con ganas: “Voy a ser muy inteligente robando”.

Pero el detonante de la nueva Meri llegó tras la valoración de los jueces. “Tiene mérito, la manzana está muy embebida en el almíbar. Y estéticamente está bien”, afirmó Jordi Cruz. Por su parte, Pepe Rodríguez confesó que “aunque no es la tarta tatin clásica, está muy rica”. Incluso Josie se rindió al plato de Meri: “Muy bien. Lo has llevado por el lado pecaminoso”. Aunque los platos de Amelicious y José estuvieron por encima de la tarta de manzana de Meri, los jueces felicitaron a la aspirante: “Ese es el camino”.

Liderazgo y confianza

Este subidón de confianza dio mucha seguridad a Meri y a partir de aquí vimos un cambio en la aspirante, con mucho liderazgo y muchas esperanzas en sus posibilidades: “La Meri de programas anteriores no existe. Soy otra mujer. Quiero ganar MasterChef”.

Y como las palabras se las lleva el viento, Meri decidió plasmar todo esto en la prueba de exteriores, donde compartió equipo con Arnau, Toni, Fran y Dani. Rodeada de gallitos, Meri logró tener la frialdad suficiente para mantener el equipo cohesionado, incluso en los momentos de emplatado, donde estuvieron a punto de tirar por la borda el gran trabajo previo. Con compañeros que trabajaron bien pero cada uno por su lado, Meri fue el pegamento que los llevó al éxito. Y este detalle no pasó desapercibido para Jordi Cruz: “Meri no se ha hecho pequeñita. Ha seguido defendiendo lo que ella creías. Felicidades. Objetivo cumplido”.

Meri está demostrando que MasterChef es una carrera de fondo, y que ella poco a poco “siendo hormiguita y con humildad” se ve llegando muy lejos. Por lo pronto, sus compañeros ya saben que tiene una dura rival compitiendo con ellos.