Un mundo feliz: Diseño, Arte y Política como herramientas activadoras del cambio social
- Sonia Díaz y Gabriel Martínez conforman el colectivo 'Un mundo feliz'
- Apuestan por un diseño popular socialmente responsable que provoque la reflexión y el diálogo
- ‘Un Mundo Feliz’ se emite en Metrópolis el 8 de junio a las 00.50h en La 2
El nombre del colectivo nos remite directamente a la obra distópica de Huxley (“Un mundo feliz”, Aldous Huxley, 1932). Y efectivamente, su discurso no está muy alejado de esa referencia. Los diseñadores y activistas gráficos Sonia Díaz y Gabriel Martínez, o lo que es lo mismo, ‘Un mundo feliz’ se definen a sí mismos como trabajadores culturales al servicio de la sociedad. En su trabajo apuestan por un diseño popular socialmente responsable que provoque la reflexión y el diálogo, y fomente el análisis crítico llamando la atención sobre asuntos relevantes de la actualidad. Entienden Diseño, Arte y Política como herramientas activadoras del cambio social.
Su obra, de libre uso, y al margen de los circuitos oficiales y comerciales del arte o la publicidad, se materializa en carteles, publicaciones, fanzines, pegatinas, camisetas y todos los soportes posibles que hagan llegar sus mensajes al gran público. Pero estos mensajes no son sus opiniones personales, como afirman, “parten de ideas, noticias y pensamientos de otras personas y de hecho, muchas veces, aparecen citas, porque, consideramos que la mejor manera de llegar al mayor número de personas, es precisamente que no sean nuestras ideas, sino que sean ideas colectivas”.
Origen de UN MUNDO FELIZ
El colectivo se forma en torno al año 2000-2001 cuando un grupo de profesionales de la imagen y el diseño gráfico deciden hacer, como ellos mismos afirman “lo que les hace felices, es decir, comunicar”, libres de las ataduras de la industria o del mercado oficial del arte. Así, a lo largo de estos más de 20 años, sus creaciones, de libre uso, se han visto en muy diversos contextos. Su forma de entender su práctica, con un evidente carácter colaborativo y social, les ha llevado además a colaborar en numerosas ocasiones con otros grupos y artistas de todo el planeta con los que comparten enfoque y técnicas.
De los medios de comunicación, publicidad, redes sociales y el inmenso universo www rescatan las imágenes y mensajes que les sirven para, a través del mashup o mezcla de diferentes elementos, configurar sus creaciones. La parte editorial, desde la autoedición de fanzines y publicaciones, es un elemento igualmente significativo en la producción de UN MUNDO FELIZ, ya que supone un formato conocido y de fácil acceso para el gran público.
La actualidad como fuente de inspiración
Lo que ocurre en el mundo actual a nivel social, político o cultural, es la fuente de la que se nutre la obra de UN MUNDO FELIZ, sin olvidar el pasado, pero no en sentido nostálgico, sino con la intención de entender el mundo actual a partir de la revisión de la historia. Por eso, los medios de comunicación, lo que se comunica y cómo se comunica, se ponen en cuestión en todos sus trabajos para estimular el pensamiento crítico y generar debate.
En su obra se pueden ver claras referencias a artistas y activistas de todos los tiempos, desde el Goya que en sus caprichos y desastres ya manifestaba un claro interés por remover conciencias a través de la imagen, hasta creadores más contemporáneos como Antoni Muntadas o las artistas norteamericanas Jenny Holzer y Barbara Kruger, cuyo trabajo se centra en el cuestionamiento de los mensajes transmitidos a través de los medios de comunicación y la publicidad. Y en el ámbito más teórico y político, encontramos al escritor y sociólogo estadounidense Saul Alinsky.
Sin embargo, a UN MUNDO FELIZ no le interesa la Política ni la ideología más que en su sentido más amplio, pues consideran que todos participamos en política en la medida en que vivimos en sociedad. En la serie Politics, por ejemplo, cuestionaban algunos conceptos aplicando la palabra ‘POLITICA’ a diferentes imágenes para llamar la atención sobre lo que supone mirar diversas cuestiones bajo el prisma de la política.
Pictogramas y Tipografías
Una forma sencilla y directa de sintetizar los mensajes es a través de los pictogramas. Seña de identidad de UN MUNDO FELIZ, estas ilustraciones o formas gráficas simplificadas, forman parte del imaginario colectivo y, modificadas e intervenidas, sirven para llamar la atención sobre cuestiones relevantes de nuestro día a día desde un punto de vista crítico, pero desde el humor, dentro de la práctica denominada Risactivismo.
La tipografía es también una forma de comunicación muy potente y que nos ayuda a tomar conciencia sobre la importancia del lenguaje. El proyecto Political Types, a partir de diez tipografías modificadas, supuso una reflexión acerca de cómo se utiliza el lenguaje y la repercusión de su representación gráfica.
TOWAPO
En el programa que Metrópolis dedica a UN MUNDO FELIZ se ofrece además un recorrido por la exposición TOWAPO. Un Mundo Feliz (1999-2019) que tuvo lugar en c arte c (Centro de Arte Complutense de Madrid) en 2019. Esta muestra retrospectiva reunía casi un millar de imágenes en diferentes soportes, desde carteles, pancartas y vinilos, hasta fanzines, publicaciones o pegatinas. No es habitual ver estas piezas en un mismo espacio, por el carácter público de la obra de Un Mundo Feliz, pero es curioso cómo la convivencia de temas, soportes y temporalidades tan dispares, hacía que surgieran diferentes lecturas y recorridos posibles, lo que enriquece enormemente el discurso.