La Virgen de la Cueva y otros lugares bizarros que visitar en Valencia
- Una casa dragón en la montaña y otros lugares curiosos que descubrir en la Comunidad Valenciana
- ¿Dónde puedes ver uno de los acueductos más importantes de la Península?
- Descubre los lugares más curiosos de España en el programa de viajes Rutas Bizarras
Ni la Ciudad de las Artes y las Ciencias, ni el Oceanogràfic, ni el Mercado Central. Marta Hazas y Touri deciden bucear por los lugares menos emblemáticos y turísticos de la Comunidad Valenciana. Y el plan les ha salido redondo, porque han podido conocer cinco espacios de lo más fascinantes y curiosos, de esos que sirven tanto para foto de Instagram, como para asombrar a un amigo en una tarde de bares.
Desde el Santuario de la Cueva Santa, el que alberga a la Virgen de la Cueva de la famosa canción popular, pasando por una casa con forma de dragón integrada en medio de la montaña. Nuestros protagonistas aprenderán la técnica del trencadís y valorarán el arte de los taxidermistas. ¡Descubre los 5 lugares más impresionantes de esta ruta bizarra!
El Santuario de la Cueva Santa: “que llueva que llueva, la Virgen de la Cueva”
No se sabe quién fue el autor de esta canción popular infantil, pero sí podemos afirmar que se refiere a la Virgen que se encuentra dentro del Santuario de la Cueva Santa, en la villa de Altura (Castellón). Amparo, vecina de pueblo, cuenta que la tradición comenzó porque es una cueva muy húmeda, hay goteo continuamente, y por eso la Virgen tiene relación con el agua. Parece ser que es prodigiosa y su valor es incalculable: “viene mucha gente a conocerla y a pedirle favores”. Una fe que bebe de un milagro ocurrido en 1915, cuando el pueblo sufría una sequía crítica y gracias a la Virgen se creó un manantial que ahora abastece al pueblo.
El dragón de Calderona y los muros de trencadís
Ni es un fósil de dragón, ni se ha escapado de la película Raya, de Disney. El dragón de Calderona es una Casa-Escultura que se encuentra insertado en la sierra homónima, dentro del municipio de Gilet. Fue ideada por la escultura húngara Rhea Marmentini, y su pareja, el saxofonista de jazz Perico Sambeat. Fue su vivienda hace unos años, pero ahora ha quedado solo como monumento de visita. Aunque, según confiesa Toni Fernández, vecino del pueblo: “estoy enfadado porque la gente viene sin orden, dejan basura, rompen la obra”. Y es que el turismo tiene que ser respetuoso, con conciencia social y ambiental.
Gilet es un sitio de artistas, Antonio Muñoz Oteros también tiene su propia gesta. En su jardín se pueden encontrar esculturas que nos recuerdan a Gaudí por la técnica del trencadís, es decir, de la cerámica rota y pegada en otra superficie. El muro que separa la calle de su hogar también es una obra de arte, con curvas que imitan las olas del mar, colores llamativos y la misma herramienta artística de la cerámica partida.
La Fundación Salvador Mollà: El arte reutilizar objetos y cerámica
En el municipio de Ontiyent se encuentra la Fundación Salvador Mollà, creada por el escultor del mismo nombre. El artista compró una fábrica y la ha convertido en un espacio de arte moderno. El material que utiliza es de lo más variado: lo compra reciclado, reutiliza objetos, usa cerámica. El fin es que ese “material con referencias etnológicas tenga un uso actual y moderno”. A lo largo del recorrido por el lugar, se puede ver un santuario, una obra hecha con retretes en homenaje a la sanidad pública, o un coche viejo personalizado también con la técnica del trencadís.
El Acueducto de la Peña Cortada y el romano convertido en guía turística
En el municipio de Calles se encuentra ubicado el Acueducto de la Peña Cortada, que no es tan conocido como el de Segovia, pero sí se considera como uno de los cuatro principales de la Península. Y para darle valor a toda la herencia que nos han dejado los romanos, está Rubén Ríos y sus compañeros de la Asociación cultural Hispania Romana. Vestidos de la época, cuentan la historia de obras como ésta, cuya fecha de creación se desconoce, pero se intuye que fue idea del senador Marcus Cornelius Nigrinus, “que tenía las termas en Llíria”.
Museo de Historia Natural de Ontinyent: un esqueleto real y una biblioteca mágica
El Museo de Historia Natural pertenece al Colegio de la Concepción, en Ontinyent. Es un tesoro singular, ya que tiene una colección de ciencias naturales que incluye cabezas reducidas de jíbaros, extraños animales disecados o fragmentos de momias egipcias. Manuel Requena, profesor, dice que “empezaron el museo los frailes, hace más de 100 años”. El centro tiene una parte etnográfica, religiosa, textil, armamentística… Hasta está Pepito, un esqueleto de verdad que se utilizaba para las clases de ciencias naturales cuando no había más avances. Una réplica de la Dama de Elche, animales disecados, amuletos egipcios y una biblioteca que parece sacada de Harry Potter con más de 20.000 volúmenes. Todo reliquias dignas de estudio.