El Diesel de Glenn Martens ve la luz: así ha sido el debut del belga en la icónica firma italiana
- Martens tiene muy presente la historia y el legado de la casa pero añade su genial toque personal a las piezas
- Toda la colección mantiene un tono vintage, casi ajado, para potenciar la durabilidad de cada prenda
- La moda de esta temporada celebra el poder de los clásicos: de la camiseta blanca a la cazadora vaquera
La expectación era enorme. No todos los días hay un debut de estas características: un diseñador de éxito internacional al frente de una firma con un peso enorme en el sector de la moda. El tándem que forman ahora Glenn Martens y Diesel arranca su nueva andadura, y lo hace a lo grande, en casa, en la Semana de la Moda de Milán. Las medidas de seguridad de la pandemia no permiten hacer desfiles presenciales y los diseñadores y marcas optan por grabar desfiles al aire libre o mostrar la colección en un fashion film. Y esto ha hecho la firma italiana.
¿Es la realidad o es un sueño?
La colección con la que se estrena Martens se ha visto en un cortometraje realizado en colaboración con el artista y director Frank Lebon, con música del británico Leon Vynehall. "La película desdibuja las líneas entre la realidad y un sueño", dicen. Sin embargo, la ropa es muy real. La colección para la primavera y el verano de 2022 es una declaración de intenciones y un aviso: Martens no va a 'enterrar' el pasado de la casa, al contrario. Su concepto es una interpretación contemporánea la nuestra historia de la casa, hecha con audacia e ironía. Y, como no, una necesaria apuesta por desdibujar los límites de género que impone cierta parte de la sociedad y una clara defensa de la sostenibilidad bien entendida.
¿Cómo es la colección?
Martens combina la maravillosa herencia de la casa con nuevos elementos, modernizando los iconos para que se vean absolutamente nuevos. Vemos blazers, camisas y pantalones de mezclilla 'decorados' con una impresión láser que forma un efecto trampantojo de capas y costuras. Los pantalones de mezclilla de cinco bolsillos, símbolo de la firma, llevan ahora botas integradas (a Glenn le fascinan las botas), y se presentan en dos formatos, con cintura alta y con cintura mediana altura. No faltan los guiños a los archivos, los vemos con parches y logos vintage que se adhieren con ganas a las prendas, a veces con ese aire escultórico y un tanto dramático que caracteriza la moda del belga.
Toda la propuesta tiene una pátina de 'segunda mano', intencionada. Martens desprecia los tonos vivos de los colores para centrarse en los tonos más apagados, a veces con un aire ajado, vintage. Una buena manera de decir que las prendas buenas envejecen bien y que pueden resistir muchas temporadas en nuestros armarios. No hay brillos, y no hacen falta porque los tejidos tienen una altísima calidad que imprime carácter a las prendas. Y lujo pero un lujo tranquilo. Hay prendas muy sencillas básicos como las camisetas blancas que contrastan con otras muy especiales, piezas artesanales, elaboradas con mimo y cuidado, que son un reflejo del buen hacer italiano.
Una pieza fabulosa
Adora experimentar, con patrones y tejidos, pero también con acabados. Lo vemos en prendas más especiales, piezas de autor hechas en organza "impresas y ahumadas con motivos de pintura agrietada". Llama poderosamente la atención un elemento nuevo. Se trata de un cinturón entrelazado, hecho en distintas versiones, que une las prendas superiores (camisetas y tops) con las inferiores (pantalones y faldas), y lo hace a través de cortes y aberturas que llevan las prendas, siendo a la vez una especie de hilo conductor o columna vertebral de la colección.
El reciclaje es hoy una obligación y se enmarca, además, en esa filosofía sostenible que potencia además la moda vintage y de segunda mano. Martens trabaja reutilizando todo tipo de materiales e incluso prendas, logrando que todo lo que ya no servía o había caducado tenga otros usos, otras vidas. Un reflejo de la casa Diesel que ha sabido reinventarse en todas las crisis, las económicas y las sanitarias, avanzando siempre por nuevos caminos, resucitando, reciclándose. Evolucionando. Y demostrando que es mucho más que una firma de vaqueros, y que tiene un universo propio que se nutre constantemente de los cambios.