Chico Pellegrini, un pianista en bicicleta entre Bahía y Granada
- Creció musicalmente en conciertos informales en los bares de su ciudad
- Ha vivido en Granada, allí se gestó el disco 'Los viajes de Chico'
- Estrena en primícia en Radio Nacional dos temas de su álbum 'Movimentos contrarios'
Chico (o Francisco) Pellegrini nació en la ciudad brasileña de Niterói, en frente de Río de Janeiro. Una urbe que la define como "muy musical". Allí han nacido y residido algunos de los músicos más destacados de la escena de este país como el inclasificable Hermeto Pascoal, el músico Arthur Maia y el guitarrista Sergio Chiavazzoli, estos dos últimos han acompañado a Gilberto Gil durante años. Él es compositor, pianista y acordeonista. Ha vivido en diferentes ciudades de Brasil, así como Buenos Aires, en Argentina; Lisboa, en Portugal; Madrid o Granada, en España. Protagoniza un nuevo capítulo de la sección veraniega "Enraizados" de El gallo que no cesa de Radio Nacional, un espacio para conocer músicas creadas en la distancia de su lugar de nacimiento y para reflexionar la relación con este.
Cuando tenía siete años, estuvo viviendo en Brasilia. Allí estudió en una escuela donde se impartían clases de música y había un coro. Una tarde se acercó a una clase de piano y le gustó. Llegó a casa y le dijo a su madre que "quería estudiar piano". Ella se puso un tanto reticente porque le "obligaron a estudiar" este instrumento. Era una "época en la que las niñas tenían que aprender francés, piano, coser y otras cosas. Las clases no le gustaban nada. Tenía un completo trauma".
A partir de los 12 años y acompañado de sus padres, empezó a frecuentar unos bares donde se ofrecían unos conciertos "muy informales" donde "siempre dejaban a los jóvenes tocar". Allí creció musicalmente tocando con músicos muy buenos de la música brasileña instrumental, esta combina la improvisación con los ritmos de samba, bossa nova y otros de Brasil. El nivel "alto" y "muy exigente" de estos espacios le inspiró para estudiar técnica, armonía y composición.
La música en directo y el baile
En Río de Janeiro es "muy común la música en vivo". En "casi todos los restaurantes o bares que estén un poco más cerca de la playa tienen a alguien tocando, lo que puede ser un desastre porque no hay tanta gente que toca bien". "Así que si hay alguien tocando, uno siente que puede empezar a cantar o bailar". Esta manera de entender la música está en la vida y en la cultura de Brasil.
Lamenta cuando ha vivido en Madrid que la gente diga "yo no sé bailar" y vean necesario ir a clases de salsa. Él se pregunta: "¿Cómo que no sabes bailar?". Responde: "Es sentir la música y mover el cuerpo. Toda la gente lleva dentro el baile, el canto y la percusión. Es lo más ancestral, lo más vivo que tenemos. Si no podemos cantar y bailar pues no estamos vivos. Eso es lo que la cultura ancestral nos trae. Esa presencia de África".
La salida de Río
Los años previos a la celebración del Mundial de Brasil en 2014 y las Olimpiadas en Río de Janeiro en 2016 fueron "intensos" y "difíciles" para Chico Pellegrini. Se presentaba una urbe como "la ciudad del futuro" y el mundo les miraba, "pero era una gran mentira para nosotros". "Todo estaba muy caro y los sueldos eran igual de malos". Una situación que califica de "absurda" y que le llevó a decir "basta de ese estilo de vida de trabajar para pagar cuentas y sin tener tiempo de reflexionar y hacer mi música". Se fue al campo, aunque lamenta que después ha tenido que volver a la ciudad para poder desarrollar su carrera.
En Portugal dialogando con el fado
Estuvo viviendo durante un tiempo en Lisboa, Portugal, donde colaboró con Fernanda Paulo. Ella es actriz y "canta en musicales" de "estilo americano". También "canta el fado desde niña", pero "le rechazan" porque "dicen que su voz, su forma de cantar no es fado". "Siempre está buscando otro estilo de músicos porque lo que es fado, ella intenta hacerlo y a mí me suena a fado su forma de cantar", pero lamenta que "parece que no tiene algo especial y que suene súper dentro del estilo".
De Madrid a Granada
"Me quedé ilegal en Portugal y me iba a volver porque fui detenido en Inglaterra y todas esas cosas, pero al final he conocido a quien es mi mujer ahora. Ella es de España y vivía en Portugal". Ella le dijo que iba a Madrid, quiso ir a probarla, pero "la verdad que no me gusta esa cosa de la ciudad. Demasiada ciudad para mí, ruido, los horarios, el frío me va fatal. Al final fuimos a Granada, que es una ciudad que nos gusta más, es bastante fría también, pero tiene más que ver con nosotros. Siendo ciudad es la que nos toca. Puedes ir a cualquier sitio caminando, puedes ir a los pueblos en bici a un ensayo porque tardo media hora".
'Los viajes de Chico'
La gente les decía "ustedes son nómadas y están siempre viajando", explicaba el propio Chico Pellegrini sobre la caravana que aparecía en la contraportada del disco Los viajes de Chico que publicó cuando vivía en Granada. "Tenía doble sentido porque es un viaje musical. Son los viajes de pueblo a pueblo. Vivíamos en esa caravana un tiempo. No era tan linda, no había esa pintura. No eran viajes de turismo, realmente de vivir e inmersión. Ese viaje es bastante más profundo y es un viaje a la cultura de cada sitio. No una especie de zoológico, de ver de lejos, ni entiendes y ni tienes tiempo de empatizar con los problemas y entenderlos. Por otro lado, mi gente dice que mi música es muy cinematográfica. Siempre invito a que la gente cierre los ojos y se entregue al viaje musical porque el mundo es muy pragmático, objetivo".
Estos viajes se trasladan a la música "de la forma más abstracta". "He intentado por ejercicio de composición algunos estilos, pero al final he ido dejando de lado esa cosa más académica de estilo de mezcla e intentado buscar el alma de lo que es cada sitio, cada música, cada cultura y dejar que eso fluya a través de la música sin forzarlo".
Vuelta a Brasil
"Ahora estamos en Bahía. Después de toda esa aventura ibérica, volvimos a Río y fuimos a la sierra de Río. Tuvimos a nuestro hijo ahí, pero al final vino la pandemia. Mi mujer tenía mucha necesidad así como de una cosa ancestral del hijo con España, los abuelos y hemos ido a España. Fue un año muy raro para todos. Nos hemos mudado millones de veces. Estuvimos en Albacete, en Madrid, en la playa en Murcia. He intentado ensayar y grabar, pero al final como que todo es un poco limitante. Dijimos ahora tenemos que parar y tener una cierta estabilidad, una casa buena, que nuestro hijo pueda desarrollarse en la naturaleza y la visión de mundo que le queremos dar. Luego podemos volver a las ciudades. Que tenga una visión de lo que es el mundo para nosotros, donde se puede bailar y cantar libremente y estar con los pies en la tierra. No que tengas que estar por ahí buscando tierras y árboles locamente. Queremos que él crezca en la naturaleza, cómodamente."
Los 'Movimentos contrarios'
Francisco Pellegrini publicará próximamente el álbum Movimentos contrarios. Un trabajo discográfico que habla de los "impulsos" de los seres humanos y "las trabas" que nos imponen: "Hay unos para la belleza, el amor y la paz y hay otro para el miedo y el odio. Si no eliges uno de los caminos, y creo que todos los que lo identifican van a elegir el camino del amor, te quedas paralizado. Creo que las personas viven en esa paralización".
"Quiero que la gente se conciencie para entender que hay movimientos contrarios. Hay un movimiento que te lleva a querer a los que llegan a Europa y hay un momento que te dice: "Me va a faltar trabajo, me va a faltar comida, hay que miedo tengo". Entonces, qué haces. Te quedas ahí paralizado y con miedo. Si tú tomas conciencia de que hay algo dentro de ti que dice somos todos hermanos y todos queremos estar bien, ya eliges un camino".