La NASA planea poner en órbita el telescopio Webb el 18 de diciembre
- Será el principal observatorio del espacio profundo durante la próxima década
- Webb, un programa internacional dirigido por la NASA, la Agencia Espacial Europea y la Canadiense
- La revolucionaria tecnología del telescopio Webb explorará todas las fases de la historia cósmica
La NASA planea poner en órbita el telescopio espacial James Webb, para que sirva como el principal observatorio del espacio profundo durante la próxima década.
Tras retrasos por la pandemia del COVID que impidieron su lanzamiento en marzo pasado y con una nueva ventana que arrancaba el 31 de octubre, la agencia estableció la nueva fecha de lanzamiento objetivo en coordinación con Arianespace, encargada del lanzamiento, después de que Webb completara recientemente y con éxito su riguroso régimen de pruebas, un punto de inflexión importante para la misión, según un comunicado de la NASA.
Webb, un programa internacional dirigido por la NASA con sus socios ESA (Agencia Espacial Europea) y la Agencia Espacial Canadiense, se lanzará en un Ariane 5 desde el puerto espacial europeo en la Guayana Francesa en la costa noreste de América del Sur. La ESA proporciona el Ariane 5.
El sofisticado telescopio espacial se encuentra actualmente en su configuración de almacenamiento final en las instalaciones de Northrop Grumman en Redondo Beach, California.
El equipo de Webb se está preparando para las operaciones de envío, durante las cuales el observatorio se someterá a los procedimientos de cierre final y al embalaje para su viaje al sitio de lanzamiento. Los elementos principales del cohete Ariane 5 que llevará a Webb al espacio han llegado a salvo a Kourou, Guayana Francesa, desde Europa.
La revolucionaria tecnología del telescopio Webb explorará todas las fases de la historia cósmica, desde el interior de nuestro sistema solar hasta las galaxias observables más distantes del universo temprano y todo lo que se encuentre en el medio, destaca la NASA en un comunicado.
Sucesor del Hubble
El telescopio, que recibe el nombre del antiguo administrador de la NASA James Webb, es el más sofisticado que ha construido la agencia espacial de EE.UU. y la Agencia Espacial Europea (ESA). Está considerado el sucesor del Hubble, que fue lanzado en 1990 y que era también un proyecto de cooperación internacional entre la agencia espacial europea y la estadounidense.
El telescopio James Webb cuenta con complejas y vanguardistas aplicaciones, entre ellas la Cámara para el Infrarrojo Cercano (NIRCam). Este instrumento está diseñado principalmente para buscar estrellas; cúmulos estelares y núcleos de galaxias primigenios formados tras el "Big Bang"; descubrir supernovas en galaxias remotas y analizar la población estelar de galaxias cercanas, entre otras tareas.