Las mujeres artistas piden mayor visibilidad en el mercado del arte y una cotización más justa de su obra
- Las creadoras siguen teniendo menor presencia en las galerías y en ferias de arte como ARCO
- El arte hecho por mujeres se vende un 47% más barato en el mercado
- 'El foco en las artistas' en Objetivo Igualdad este sábado en Canal 24horas a las 16.30h
La presencia de mujeres en ARCO sigue siendo baja. En 2019 habían sido un 32% y en 2020 los nombres femeninos descendieron al 25%. En 2021 desde la dirección de esta feria de arte se hizo un esfuerzo para mejorar la igualdad y se eligieron 25 proyectos liderados por mujeres artistas. No fue el único movimiento en favor de una representación más justa. El Museo de Prado anunció a principios de año que se haría una reordenación de su colección con el objetivo de tener un museo más inclusivo.
El programa Objetivo Igualdad ha querido tomar el pulso al camino que queda por recorrer para la igualdad y visibilidad de las mujeres dedicadas al arte y ha hablado con varias artistas. En febrero de 2018, durante la feria de ARCO, la artista Yolanda Domínguez protagonizó una performance secundada por más de sesenta creadoras con el lema “Estamos aquí”. Recorrieron las instalaciones coronadas con el signo de geolocalización de Google Maps, con el objetivo de visibilizar el papel de la mujer en la feria.
Artistas con menos visibilidad
La acción de Domínguez acaparó la atención mediática. “No se nos encuentra, no estamos en las exposiciones, no se nos dan becas, no dirigimos museos. Seguimos siendo musas, pero no se nos considera artistas”, aseguró Yolanda Domínguez.
Lo cierto es que el debate es candente por parte de los colectivos feministas de artistas porque ARCO recibe subvenciones públicas y se debería favorecer la igualdad. La gran pregunta sigue siendo: ¿Por qué hay tan poca presencia femenina en la mayor feria de arte en España? La artista Diana Larrea afirma que se trata de un problema generalizado: “La poca presencia de las mujeres en ARCO es un reflejo de la poca presencia de las mujeres en las galerías, porque las galerías llevan a sus artistas a ARCO. Aquí influyen muchos factores. El primer factor es que no se valora el trabajo de las mujeres y eso se refleja en el mercado. Y al final eso significa que las obras de las mujeres se cotizan menos que las de los hombres".
“La poca presencia de las mujeres en ARCO es un reflejo de las pocas mujeres en las galerías. “
Larrea ha creado el proyecto Tal día como hoy para recordar a las mujeres artistas olvidadas por los libros de Historia del Arte. Había asistido en 2017 a la performance de María Gimeno, Queridas Viejas, en la que la artista rajaba el manual canónico de E. H. Gombrich (1909-2001) -un libro de referencia en el que solo aparece una artista femenina-, y hacía sitio a las creadoras que el historiador excluyó al escribirlo. Ese mismo día, Diana Larrea empezó a investigar a todas esas artistas que el canon había ignorado para darles de nuevo su lugar. En Tal día como hoy, ha ido publicando a diario vidas y obras de artistas, desde el Renacimiento hasta mediados del siglo XX. En total, ha acumulado algo más de 500 biografías de mujeres artistas. Otro de sus trabajos, De entre las muertas, es un proyecto que propone una contrahistoria del arte, en la línea de los trabajos de María Gimeno, Verónica Ruth Frías y Marina Vargas.
Galerías más caras, menos mujeres
La polémica que está sobre la mesa es el hecho de que las mujeres, en general, venden menos y a las grandes galerías no les gusta exponer sus obras. “Según mi experiencia, por lo que yo he vivido: es más difícil vender como mujer que como hombre. Y los precios son más cuestionables para las mujeres que para los hombres. A lo mejor, a las galerías les viene mejor traer hombres”, afirma Alejandra Glez, fotógrafa feminista.
“Ese techo de cristal está en todos sitios, y no iba a ser menos en el mundo del arte. “
Un estudio publicado por Art Basel y UBS destaca que “las galerías más importantes representaron a menos mujeres artistas”, por esa razón no se las reconoce en la cúpula del mercado. Para la artista Estefanía Martín la discriminación a las creadoras es histórica: “Ese techo de cristal está en todos sitios y no iba a ser menos en el mundo del arte. A ver: es lo que hemos estado viviendo, años y años durante la historia en el Arte". El estudio de Art Basel y UBS se realizó en 2020 y sostiene que la proporción de artistas femeninas representadas por galeristas sigue siendo una minoría. Incluso señala un retroceso en la paridad: la proporción de representadas en las galerías analizadas en el año de la pandemia fue del 39%, frente al 41% de 2019.
Los datos de las encuestas que se realizan entre los galeristas también descubren que hay una tendencia a que la proporción de artistas femeninas emergentes sea mayor que entre las veteranas. Esa participación también disminuye a medida que aumenta la categoría económica de la galería. De ahí que no se rompa con la ausencia y que las artistas establecidas no aparezcan entre los galeristas más notables.
Estereotipos sobre la mujer artista
Otra cuestión que debatimos con las tres artista entrevistadas por Objetivo igualdad es la relativa a los estereotipos, clichés, etiquetas que pesan sobre la figura de la mujer artista. Alejandra Gzlez asegura que "te puedo hablar por mi experiencia propia y nos dicen que nosotras somos más sufridas, más dramáticas, y no nos concentramos en lo que realmente importa en el arte. Vamos a definir qué es arte primero de todo y por qué tú crees que por el hecho de ser mujer tengo que tener un sufrimiento por encima del tuyo que eres hombre."
“Hay muchos prejuicios, sobre todo por la edadCuando eres artista emergente, hay más igualdad. “
Sin olvidar los estereotipos que también gravitan sobre la obra de la creadoras. "Por ejemplo, que una mujer va siempre a hablar de lo doméstico, de lo personal, de lo pequeño. Mientras que el trabajo artístico masculinos va dirigido a lo político, al mural, a lo grande”, asegura Diana Larrea.
Las tres entrevistadas por Objetivo Igualdad coinciden en que es más difícil ser visible para una artista madura que para una creadora emergente. "Hay muchos prejuicios. Sobre todo por temas de edad. Cuando eres una artista emergente, creo que hay bastante igualdad. De hecho, se ve, no hay más que fijarse en los datos, en las exposiciones y hay mayoría de mujeres emergentes", afirma Diana Larrea.
‘Guerrilla girls’
En 1985, el MOMA (Museum of Modern Art) de Nueva York celebró una exposición de arte contemporáneo titulada An Internacional Survey of Painting and Sculpture. De los 169 artistas que participaron en ella, sólo 13 eran mujeres. Delante del museo se manifestaba un extraño grupo contra esta desigualdad: eran mujeres, llevaban máscaras de simios y se hacían llamar ‘Guerrilla Girls’. Compartían un sentimiento de frustración al comprobar que, a finales de siglo, las diferencias entre los sexos persistían y las mujeres artistas continuaban sin tener un verdadero reconocimiento.
Su lema: “¿Una mujer necesita estar desnuda para entrar en un museo?” se popularizó en los circuitos alternativos del mundo del arte. Eran feministas y su modus operandi consistía en mostrar al público la discriminación que vivían las mujeres artistas, acusando directamente a las instituciones que mantenían tal discriminación. Sus mensajes plagados de ironía, sus declaraciones provocadoras y el misterio que rodeaba su identidad oculta, contribuyeron a atraer la atención y despertar interés hacia el grupo.
Sus reivindicaciones siguen vigentes en la actualidad y no incluyen sólo el arte moderno porque "cuando haces el repaso de la historia del arte como he hecho yo, te das cuenta de que las mujeres han estado en todas las disciplinas del arte igual que los hombres," dice Diana Larrea.