De Isabel Pantoja a José Vélez: los famosos con fama de 'gafes'
- Isabel Pantoja, Jorge Sanz, Juan Pardo, Carlos Sainz y José Vélez arrastran la mala suerte en sus vidas
- Aunque nadie supera los goles de Aaron Ramsey, que cada vez que marca muere alguien
- Fran Rivera dice que Isabel Pantoja es gafe: "¡Tened cuidado al nombrarla, trae 'mal bajío"
Durante años, el color amarillo estaba prohibido en los platós de televisión por creer que atraía la mala suerte. Las presentadoras e invitadas huían de este color, por si acaso. Sobre todo las folclóricas, más dadas a las supersticiones. Ya lo decía Lola Flores. "Sí, soy muy supersticiosa, y además es gratis". Se evitaba el amarillo y se evitaba decir ciertos nombres de artistas. Eran los 'impronunciables'. Entre los años 70 y los 90, hubo dos cantantes que tenían fama de gafe, José Vélez y Juan Pardo. Su mala suerte les ha acompañado desde entonces. A ellos se han sumado otros cantantes, actores, deportistas y famosos como Isabel Pantoja, Rappel, Jorge Sanz, Carlos Sainz o Mathew Perry, que reveló el porqué tomaba drogas mientras grababa Friends. Conciertos con fallos, accidentes y muertes repentinas, mala suerte para la gente que los rodea... Esta es la lista de todos los famosos 'que no deben ser nombrados' si no quieres acabar con 20 años de mala suerte.
De José Vélez a Isabel Pantoja: los cantantes famosos españoles 'gafes'
Cuentan que José Vélez era una joven promesa de la música. El cantante canarió despuntó en los años 80 poco después de representar a España en el Festival de la Canción de Eurovisión de 1978 con Bailemos un vals. Pero rápidamente empezó a correr la voz de que era gafe... Y aunque no se sabe a ciencia cierta qué ocurrió, lo cierto es que las radios dejaron de programar sus canciones y los periodistas se negaron a cubrir sus conciertos, relegando al cantante al olvido.
Otro cantante que ha tenido una muy mala suerte en su carrera profesional es Juan Pardo, de Los Brincos. El grupo de música nació de casualidad cuando tras la muerte de Luis Sartorius su hermano, Fernando Arbex, llevó a cabo sus sueños musicales con Juan Pardo. Se dice que, además de la muerte de uno los fundadores de la banda, en los conciertos siempre fallaba algo: focos, sonido, etc. Según el blog de Diana Aller, en los círculos discográficos Juan Pardo se ha ganado a pulso su fama de gafe y todos lo llaman JP, por miedo a invocar la mala suerte con su nombre, como si de Voldemort se tratase: 'el que no debe ser nombrado', el 'innombrable'.
Tampoco se libra Isabel Pantoja, de quien hasta Fran Rivera ha dicho lo 'gafe' que es: "Tened cuidado al nombrarla, porque trae 'mal bajío'", advierte en Lazos de sangre. Pero según la leyenda, fue el compositor y director de orquesta Alfonso Santiesteban quien afirmó por primera vez que 'la Pantoja' daba mala suerte. Desde entonces, la cantante ha recolectado un varias desgracias en su vida como la muerte de su marido Paquirri por una cornada mortal o la muerte prematura por cáncer de su examiga Encarna Sánchez. A ello hay que sumar el caso Malaya, que fue de los finales de Marbella y del comienzo de la decadencia de su carrera, cuando pasó a ser llamada I.P. para no mencionar su nombre.
La mala suerte del cantante Roberto Carlos ha estado presente desde su infancia: le atropellaron con una locomotora con seis años mientras jugaba en la estación de su pueblo. Acabó con la pierna derecha amputada y desde entonces lleva una prótesis permanente. No fue la única desgracia que se cirnió sobre él. Siendo ya una estrella en los años 90, su mala suerte pasó a ser la de las mujeres de su vida.
Su primera esposa (y el amor de su vida), Cleonice Rossi, murió de cáncer después de haber tenido con él un hijo con graves problemas de visión. La misma enfermedad se llevó a su segunda mujer, María Lucila Torres, dos días después de reconocer al hijo que habían tenido, Rafael Braga, y a su tercera esposa, María Rita Simões Braga, también murió por un cáncer ocho años más tarde, cuatro después de haberse casado. Derrotado y hundido, Roberto Carlos se sumió en una depresión que casi acaba con él y su carrera. Siguió adelante, pero en 2010 se despidió de la otra mujer de su vida: su madre, que murió a causa de una infección respiratoria. Además, el cantante tiene una aversión por el número 13, es muy supersticioso y sufre de un trastorno obsesivo compulsivo, del que se enteró en el año 2000.
Mala suerte en el deporte: Aaron Ramsey y Carlos Sainz, gafados
En el mundo del deporte también existen las personas gafes. En el caso del futbolista galés Aaron Ramsey, los hinchas del equipo en el que juega nunca saben si celebrar un gol. Cada vez que marca, fallece una personalidad conocida en todo el mundo. Sin ninguna explicación lógica, la maldición del jugador de ya se ha cobrado 20 víctimas, siendo el primero el periodista Andrés Montes, en octubre de 2009, y poco después el futbolista mexicano Antonio de Nigris, en ese mismo año.
Por orden de defunción, estos son los goles de Aaron Ramsey que 'han matado' a Osama Bin Laden, Steve Jobs, Muamar Al-Gaddafi, Whitney Houston, Chavela Vargas, Bebo Valdés, Jorge Rafael Videla, Ken Norton, Paul Walker, el boxeador 'Huracán' Carter, el ilustrador HG Giger, Robin Williams, Eduardo Galeano, Günter Grass, David Bowie, Alan Rickman, Guillermo Sánchez y Chester Bennington.
En otras ocasiones ni el mejor entrenamiento te salva de la mala suerte: el deportista más gafe del mundo y de todos los tiempos es Carlos Sainz. Así consideran muchos al piloto español desde que participó en el rally de Reino Unido en 1998 junto a Luis Moya. A grito de "¡Trata de arrancarlo! ¡Trata de arrancarlo, Carlos! ¡Trata de arrancarlo, por dios!", Carlos Sainz perdió su oportunidad de proclamarse campeón del mundo por tercera vez cuando su Toyota Corolla se quedó a 500 metros de la meta. El piloto español no volvió a ganar nunca un mundial de rallys.
Actores que caen en el olvido: Jorge Sanz, Lucy Liu, Matthew Perry...
Por su parte, Jorge Sanz no pasa por su mejor momento. A principios de 2021 confesó que los actores Antonio Resines y Santiago Segura, dos buenos amigos suyos, le han mantenido durante dos años. Jorge Sanz cayó en desgracia y en el olvido pese a haber debutado con tan solo nueve años en el cine español con La miel (1979) y haber aparecido en Cónan el Bárbaro, tres años más tarde. Se convirtió en un rostro habitual y popular hasta los años 2000. Desde entonces no ha estrenado apenas proyectos. No es el único actor que tras una prometedora carrera acaba sin recibir ofertas de trabajo. Josep Luinesa también aseguró estar arruinado este mismo año en Twitter.
Y del extranjero, todo el mundo recuerda a actores famosos de los años 90 y 200 como Lucy Liu (Los ángeles de Charlie, Kill Bill: Volumen 1), Amanda Pett (Identidad, Falsas apariencias) o Matthew Perry (Friends). Todos ellos tienen algo en común: serie que pisan, serie que acaba cancelada. Y mientras que Robert Pattinson se desencasilló de ser Edward Cullen en la saga de Crepúsculo, Tylor Lautner tocó techo como el hombre-lobo Jacob en la saga y desde entonces apenas ha tenido proyectos relevantes.