Lobo ibérico y oso pardo: "El cuento no es como nos lo contaron"

• Nos adentramos en tierra de lobos y osos: la Sierra de la Culebra en Zamora y el Valle de Luna en León
• Observar a estos animales con tus propios ojos produce una sensación que no se te olvida nunca
• No es posible conservar una especie si no existe conciencia y aceptación social
• Reduce tu huella, sábados en La2 a las 18:30h | Disponible en RTVE Play y en la web de Ciencia y futuro

Un ejemplar de lobo ibérico (Canis lupus signatus) se esconde tras la maleza

Arranca una nueva temporada de Reduce tu huella y hemos querido estrenarnos con un programa dedicado a dos de las especies más emblemáticas de nuestro país: el lobo ibérico y el oso pardo.

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Hubo un tiempo en el que ambas especies campaban a sus anchas por todo el país. Pero ahora la situación es bien distinta y la población de estos animales se localiza en áreas muy concretas. Nos hemos adentrado en tierra de lobos y osos: la Sierra de la Culebra en Zamora y el Valle de Luna en León.

Observar a estos animales con tus propios ojos produce una sensación que no se te olvida nunca. Son un símbolo de vida salvaje, de supervivencia.

Dos joyas que no podemos perder

A lo largo de nuestra historia, los seres humanos hemos sido la causa de la desaparición de innumerables grandes mamíferos. Cuanto más grande es el animal, mayor es su nivel de vulnerabilidad. De los que quedan, una buena parte se encuentra en riesgo de extinción, incluidos el oso y el lobo ibérico. El lobo es el último gran depredador que nos queda en España; el oso es el animal terrestre más grande de la fauna ibérica. En plena crisis de biodiversidad en el planeta, son dos joyas que no podemos perder.

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¿Cómo hemos llegado a esta situación? El oso pardo siempre ha sido considerado el gran trofeo de caza de la península, hasta el punto de que en los años 80 tan sólo quedaban 40 ejemplares vivos. Hasta la década de los 70, las Juntas de Extinción de Alimañas, pagaban por alimaña muerta, incluido el lobo. Ambas especies valían más muertas que vivas.

Pero “El cuento no es como nos lo contaron”. Los expertos en conservación a los que hemos acompañado para la grabación de este programa nos muestran cómo todos los seres vivos en el planeta formamos parte de un delicado balance, en el que una pequeña alteración puede desencadenar una sucesión de cambios que alteren por completo el equilibrio de la naturaleza, provocando la degradación del ecosistema o incluso la desaparición de ciertas especies. El lobo y el oso no son la excepción. Ambos cumplen un importantísimo papel en el círculo de la vida. Lejos de ser alimañas son reflejo de salud medioambiental.

Lobos y osos valen más vivos que muertos

Afortunadamente y gracias al gran esfuerzo que se ha hecho estos últimos 40 años por su conservación, la población de osos y lobos crece en nuestro país año a año. Su interacción con el mundo rural supone un reto especialmente para la ganadería extensiva. Por eso quisimos acompañar a Alberto y Rosi en su jornada de pastoreo en tierra de lobos. 14 mastines mantienen a salvo a su rebaño de 900 ovejas.

Félix Rodríguez de la Fuente llegó en los años 70 para salvar al lobo en su momento más crítico, e inculcarnos a todos la semilla del respeto y admiración por nuestra fauna y flora.

Nosotros queremos reforzar ese mensaje y actualizarlo. De ahí el título de nuestro primer programa: “El cuento no es como nos lo contaron”. No es posible conservar una especie si no existe conciencia y aceptación social. Es imprescindible que se respete a una especie por el valor que tiene en sí misma. En definitiva, lobos y osos valen más vivos que muertos.

*Reduce tu huella se emite los sábados en La2 a las 18:30h. Siempre disponible en RTVE Play y en la web de RTVE PlayCiencia y futuro