Kiko Rivera celebra su aniversario de boda con Irene Rosales: así fue la ceremonia
- El DJ olvida por un momento sus problemas familiares y recuerda el día de su boda cuando se cumplen cinco años
- ¿Cómo fue la ceremonia? ¿Quién estaba invitado? ¿Y el vestido de la novia?
- Quique Sánchez Flores, el sobrino discreto de Lola Flores
Demasiadas cosas han pasado en la vida de Kiko Rivera estos últimos días y ninguna buena. Ni la muerte de su abuela doña Ana ha servido para unir a una familia rota. Todavía no ha terminado la guerra con su madre Isabel Pantoja y ya tiene otro frente abierto, esta vez, con su prima Anabel Pantoja. La sobrina de la tonadillera acaba de celebrar su polémica boda. "Mis tíos Isabel y Agustín me obligaron a seguir con la boda", asegura a la revista ¡HOLA!. Después de salir a la lu sus declaraciones, Kiko Rivera ha utilizado de nuevo sus redes sociales para mandar una pullita a su prima: "La mentira y el engaño tienen fecha de caducidad. Al final todo se descubre. Al mismo tiempo la confianza se muere... para siempre". Corren los rumores de que Kiko Rivera estaría pensando ofrecer una entrevista para contar su verdad, pero por el momento lo único que quiere es olvidarse de sus guerras familiares y celebrar un día muy especial para él. Hoy se cumplen cinco años de su boda con Irene Rosales.
Los rumores de infidelidad que rodeaban a la pareja hace unas semanas parece que no han afectado a su relación. "Cinco años de casados. Cinco años del día más bonito de mi vida. Fue un día maravilloso lleno de cosas bellas. Pero lo más bello sin duda fuiste tú. ¡Feliz aniversario! Te amo. ¿Vamos a por otros 5?", escribe el DJ en su última publicación de Instagram. "Día lleno de magia y de amor", escribe ella también en sus historias.
Irene Rosales fue el centro de atención aquel día. La novia llevó un vestido clásico y sofisticado, un diseño de la firma St. Patrick confeccionado con mikado pulcro de talle en la cintura, escote redondo y tul. La espalda, con un toque romántico, de encaje con pedrería. Además, dos metros de cola que no pasaron desapercibidos. Para el pelo, un moño bajo que sujetaba un velo liso. Las joyas eran bastante sencillas para no robar el protagonismo: unos pequeños pendientes de doble brillante. Para rematar el look nupcial, un original ramo-joya hecho de flores tratadas, hojas doradas y broches de perlas y cristales Swarovski.
Kiko Rivera vistió un traje en azul marino que combinó con una camisa blanca y una corbara en color coral a juego con el vestido de su madre. Parece mentira ahora, pero Isabel Pantoja sí estuvo invitada a la boda de su hijo, cuando su relación parecía perfecta. La tonadillera, también madrina de la ceremonia, optó por un vestido en crepé de seda con un prendido en el hombro con bordado de flores de azahar. Su suegra, la madre de Irene Rosales, también pudo disfrutar junto a su hija de la velada. Su muerte el año pasado fue un gran varapalo para la familia.
Unos 325 invitados compartieron con la pareja su felicidad. También contó con la presencia de los hermanos de Kiko, Francisco y Cayetano Rivera, acompañados de sus respectivas mujeres, Lourdes Montes y Eva González.