De héroe a villano, así ha sido la vida del polémico futbolista O.J. Simpson
- El pasado y presente más claroscuro de un mito que cayó a la deriva
- En juicio por doble asesinato, robo, asalto, coacción y secuestro
- Mira todos los capítulos de O.J.: Made in America, gratis y online en RTVE Play
Orenthal James Simpson, popularmente conocido como O.J. Simpson. Brillante de pequeño y sombrío de adulto. Ha protagonizado uno de los escándalos más mediáticos de la sociedad norteamericana que es, nada más y nada menos, que estar acusado –y luego absuelto – del brutal asesinato de su mujer Nicole Brown Simpson y del amigo de ésta Ron Goldman. La serie documental O.J.: Made in America, ya disponible en RTVE Play, hace un repaso por la vida de esta oscura figura, desde su infancia, hasta su ascenso a la fama como mito futbolístico, y su caída a las tinieblas.
Cinco capítulos cargados de un relato que traza paralelismos entre Simpson y los abismos de la sociedad estadounidense. ¿Cómo se comportaba?, ¿qué tipo de niño era?, ¿cómo creció hasta el estrellato?, ¿por qué terminó cumpliendo condena? Incógnitas que podemos resolver repasando brevemente su biografía personal y profesional.
De joven, una estrella
El historial de Simpson no ha estado siempre manchado de negro betún, sino que, afortunadamente para él, sus primeros años de vida fueron brillantes. Nació en 1947, en San Francisco, hijo de madre administradora de hospital y padre guardia bancario. Como es sabido, de niño fue patizambo, sufría de raquitismo, y tuvo que utilizar aparatos ortopédicos en las piernas hasta quinto aniversario. Con coraje, fue capaz de salvar su pasado, convertirse en un corredor extraordinario y en un jugador de futbol ejemplar durante el instituto. Estudió en la universidad de Southern California, donde jugó como running back, obteniendo una beca deportiva con los Southern California Trojans. Se coronó como el mejor jugador del equipo universitario en 1968. Tras cosechar estos éxitos, se trasladó a Búfalo, en Nueva York, lugar en el que pasó la mayor parte de su carrera deportiva.
Su escalada a héroe americano profesional
Una vez instalado en la nueva ciudad, en 1969, debutó como profesional en el Buffalo Bills, de la Liga Nacional de Fútbol. Con este equipo se convirtió en el mejor corredor de la NFL en la temporada de 1972. Un año más tarde seguía despuntando por encima de sus compañeros de profesión, proclamándose como el primer jugador en lograr más de 2.000 yardas en un solo curso. Por si esto fuera poco, en 1975 batió el récord de touchdowns, con 23 en una temporada. En 1978 su equipo lo mandó a los San Francisco 49ers, donde jugó hasta los últimos días de su carrera. Este fin no fue mucho más tarde, sino que llegó un año después, de la mano de unas lesiones que le obligaron a apartarse del deporte.
De mito del deporte a estrella de Hollywood
Como no podía estar alejado de los focos, Simpson decidió que tenía que abrirse un hueco entre las estrellas de Hollywood. Desde 1973 al 1994 ha aparecido en más de 20 largometrajes, como El coloso en llamas, o Agárralo como puedas. También se animó con la publicidad y ganó grandes sumas de dinero apareciendo en varios anuncios. Lo que está claro, es que, desde que salió a la luz que era el presunto asesino de su mujer y de sus amigos, ya todo cambió para él. Todo el brillo que le rodeaba como héroe americano se convirtió en tenebrosa oscuridad. Las familias de los asesinados reclamaron 30 millones de dólares por daños y prejuicios, dinero que nunca ha llegado a pagar por haber dejado de trabajar.
Bodas, hijos y un ahogamiento en la piscina
Y es en este punto de su historia donde la parte personal de O.J. Simpson cobra importancia. Durante sus años de mayor esplendor, no solo se dedicó al trabajo, sino que también tuvo tiempo para casarse. Lo hizo con Marguerite L. Whitley en 1967, esposa con la que tuvo tres hijos: Arnelle, Jason y Aaren Lashone. La desgracia nubló a la familia en 1979, cuando, con tan solo dos años, el pequeño Aaren se ahogó en la piscina de su casa por accidente. Al poco tiempo la pareja se divorció y, en 1985, el deportista se volvió a casa, esta vez con Nicole Brown. Durante su matrimonio tuvieron dos hijos, y se divorciaron en 1992.
A juicio por un doble asesinato
El deportista pasa de ser un héroe para toda la nación americana, a un villano. El punto de giro se da el 12 de junio de 1994, cuando su última exmujer, Nicole Brown, y el amigo de ésta, Ronald Goldman, fueron encontrados muertos en el exterior del dúplex de ella. Habían sido asesinados, degollados y acuchillados. Rápidamente se acusó a Simpson del doble crimen, pero como disponía de los medios económicos, el actor contrató para su defensa, un equipo de destacados abogados. F. Lee Bailey, Robert Kardashian y Alan Dershowitz, entre otros, fueron los responsables de argumentar que el ya caído héroe estaba siendo víctima de fraude policial y de procedimientos poco rigurosos.
A lo largo de 134 días, el país entero siguió lo que conocen como ‘el juicio del siglo’, emitido a diario en televisión casi a modo de reality show. Si ya la opinión pública estaba dividida durante todo el proceso, su sentencia fue abrumadora. El 3 de octubre de 1995, 100 millones de personas esperaban pegadas a la pantalla el resultado de todo ese espectáculo mediático, y para sorpresa de muchos, el juez dictaminó que O.J. Simpson ‘no era culpable’ de los dos cargos de asesinato.
Una imagen muy rota
A pesar de haber quedado libre, su imagen pública se arruinó. Su buena fama se oscureció, cayendo en picado. Desde entonces, la racha por los juzgados no cesó. En 2001 lo volvieron a absolver de un robo y asalto en Florida, pero seis años después no consiguió esquivar la bala. Fue acusado de secuestro, robo a mano armada y coacción en La Vegas. Lo condenaron a 33 años de cárcel en 2008, aunque salió en libertad condicional en 2017. Desde ese momento, vive en Las Vegas gracias a la pensión de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL), del Sindicato de Actores y por vender autógrafos en las reuniones con sus fans.
Mira aquí más detalles sobre la serie documental O.J.Simpson, no te la pierdas en RTVE Play.