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Lazos de sangre

Antonio Carmona (Ketama) y Mariola Orellana, ¿por qué no consiguieron divorciarse?

Noticia Lazos de sangre 
  • Su historia podría haber acabado como la novela más famosa de Shakespeare
  • La madre de Antonio amenazó a Mariola con quitarla de en medio
  • La pareja sufrió un pequeño revés en 2017 cuando Antonio casi pierde la vida

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Lazos de sangre - Antonio Carmona desafía a su familia por amor

Si algo hemos descubierto con el documental de Lazos de sangre sobre la familia Carmona es que, aunque llevan el arte en las venas y lo tenían todo para triunfar, su vida no ha sido nada fácil. Ni siquiera ha sido sencilla la historia de amor de Antonio Carmona de Ketama y su mujer Mariola.

Los Carmona tuvieron unos inicios bastante complicados, migraron de Granada a Madrid con solo una bolsa de plástico como maleta y se compraron un piso de 25 metros cuadrados en el que convivieron diez personas. Una imagen muy distinta de la que podríamos esperar, pero no solo han sufrido por sus inicios humildes, también por las pérdidas que les han golpeado desde jóvenes y por la lucha incansable para demostrar su lugar en el mundo y su amor, un cuento de hadas que podría haber acabado como una novela de Shakespeare.

Una pareja destinada a estar juntos

Así es la vida de Antonio Carmona y Mariola Orellana, una pareja que lleva 28 años de matrimonio, que ha sufrido algún que otro bache sentimental, y con dos hijas artistas que pasean con orgullo el apellido Carmona por los escenarios. Son una pareja ejemplar en el mundo del espectáculo, pero no siempre ha sido así, al principio sufrieron el rechazo de sus amigos y de su familia, sobre todo de la familia de Antonio, que se negaba a aceptar su relación por "estar con una paya".

Ellos pensaban que eso era historia, que las barreras entre comunidades ya no existían, pero finalmente complicaron su historia de amor. Antonio se quedó prendado de Mariola en cuanto la vio, una mujer rubia, fuerte, fuerte, de aspecto peligroso pero muy segura de sí misma. ¿Quién no habría caído rendido ante una mujer así? Lo suyo fue amor a primera vista, porque Mariola también se fijó en aquel chico gracioso, encantador y con mucho arte nada más conocerse. Sin embargo, la historia no podía ser tan sencilla, conocerse, enamorarse y hacer frente al mundo era su destino.

Antonio no dudó en desafiar a su familia para estar con la mujer que amaba, su propia hija, Marina, habla en el documental de la historia de sus padres con estas palabras: "Mis padres, para estar juntos, fue versión Romeo y Julieta. Fue bastante difícil". Primero por la familia de Antonio, que no veía con buenos ojos a Mariola e intentó por todos los medios que esa relación no llegase a buen puerto. Mariola ha confesado para Lazos de sangre que su suegra llegó a decirle que "iba a hacer todo lo posible por quitarme de en medio". ¿Quién no se habría asustado ante una amenaza así? Mariola no se acobardó, ella tenía muy claro que cuando viese como quería a Antonio sería aceptada.

El eterno rechazo de su suegra

Aun así, con toda la familia en contra, decidieron casarse en Gibraltar en una boda en la que solo estuvo presente el hermano de Mariola. Menudo disgusto se llevó la familia Carmona, pero ya no había nada que hacer. Habían decidido luchar y confiar en ellos mismos y en lo que sentían el uno por el otro: "Al principio lloró mucho, pero estaba tan segura de lo que ella sentía por Antonio y de lo que Antonio sentía por ella que creo que le mereció la pena", dice Rosa Villacastín en el documental.

Le hizo llorar y no es de extrañar, porque según ha contado la propia Mariola en el documental su suegra Matilde llegó incluso "a rezar para que perdiese a su hija" mientras estaba embarazada de Marina. Iba a ser su primera nieta, pero tenía tal disgusto que no veía más allá. Ella no quería una nieta que fuese fruto de la relación entre Mariola y Antonio. Ante esta confesión comprendemos que para Mariola fue muy complicado abrirse paso en esa familia.

Con el tiempo Marina fue aceptada como una más. Al fin y al cabo, Antonio hacía todo lo posible para que así fuera. Acudía cada fin de semana a dejar a su hija en casa de sus padres con su bolsa de pañales y la dejaba al cuidado de sus abuelos. Al final fue inevitable y quisieron a Marina como a una más, quizás Mariola aún tenía que esperar un poco más para ser aceptada, pero "la niña ya era suya".

¡Y por fin llegó la reconciliación!

¿Cuándo aceptaron finalmente a Mariola? No hay una respuesta clara, pero Matilde, la madre de Antonio, también ha participado al contar la historia y ha dejado claro que eso ya es historia: "Luego me ha ganado la rubita, para mí, es mi hija". Una afirmación que corroboran otros rostros de su entorno, como su gran amiga Rosario Flores, que asegura que Matilde está "muy contenta con su nuera y no la cambia por nada", o Marta Sánchez, a quien Mariola representa, que también ha sido testigo de que su manager ya "es una más en la familia".

Una historia de superación y de innovación en la que hicieron algo totalmente rompedor porque juntar a una pareja así era algo explosivo en aquella época. Eso les hizo más fuertes y quizás por eso cuando en 2011 decidieron separarse, no duraron ni dos meses alejados. Pronto se dieron cuenta de que no sabían vivir el uno sin el otro y que juntos formaban el mejor equipo posible. Mariola no evita el tema en su entrevista y deja claro que es algo normal: "Hemos tenido momentos de crisis, pero como todo el mundo que lleva más de treinta años conviviendo".

Antonio también tiene claro que esa crisis era necesaria para salir más fuertes en la relación y no hay duda de ello porque se volvieron a casar en 2012 en Jerusalén y eso les sirvió de motor para uno de los momentos más difíciles de su vida, cuando en 2017 el cantante estuvo a punto de morir por una infección respiratoria que llevó a estar varias semanas en coma, pero que finalmente superó y le hizo regresar a la vida con más ganas que nunca, tanto que volvió a los escenarios con Ketama, su grupo de siempre.

Una historia que demuestra una vez que más que no siempre lo más fácil es lo correcto, cuando hay amor, comprensión y ganas de emprender un camino juntos en la misma dirección, todo es posible. Después de conocer su historia nos sumamos a las declaraciones de su hija Marina, desde ahora, ellos también son una de nuestras historias favoritas de amor de Lazos de sangre.