Tres municipios madrileños y castizos para visitar en el Día de la Almudena
- El 9 de noviembre se rinde homenaje a la Virgen que da nombre a la festividad
- Ofrendas florales, conciertos sinfónicos y calles repletas de gente en Madrid ciudad
- Descube cómo viajar con poco dinero y no perderte nada
Desde 1908, cada 9 de noviembre se celebra el Día de la Almudena, una de las fiestas más queridas en Madrid ciudad. Anualmente, la Virgen que da nombre a esta fecha señalada sale en procesión por las calles de la capital y, para rendirle tributo, se organizan actividades de lo más variadas, como ofrendas florales, conciertos sinfónicos, visitas guiadas por espacios religiosos y gastronomía especial.
Muchos son los afortunados que pueden disfrutar del día libre. Unos lo emplean para acudir a ese homenaje programado, otros deciden viajar a algún lugar cercano y pasar el día en familia, solo o con amigos. Y para visitar el Madrid más castizo, no hace falta quedarse en el centro de la ciudad, sino que toda la comunidad autónoma está repleta de cultura y tradición. Por ello, Viajes RTVE te tare tres preciosos municipios que puedes visitar en una jornada que se prevé soleada.
Aranjuez, de Palacio a jardines
Ciudad situada al sur de Madrid, en un valle donde confluyen el río Tajo y Garama. Es el paraíso terrenal del escritor José Luís Sanpedro, y presume de estar rodeada de grandes reservas naturales. Declarada Paisaje Cultural Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2001, fue poblada desde el paleolítico, pasando por la Edad Media, la Edad Moderna y hasta la actualidad.
De esta localidad te hipnotizará el lujoso Palacio Real, de estilo renacentista, con impresionantes ornamentos y jardines. También te dejará sin palabras la Iglesia de Alpajes, el Jardín del Príncipe, el estanque de los Chinescos, la Plaza de Parejas o la Plaza de San Antonio, entre otras localizaciones más.
El patrimonio de San Lorenzo de El Escorial
Ubicado al noroeste de la Comunidad de Madrid, en la ladera de la Sierra de Guadarrama, y a tan solo 53 km de la capital. Fue una ciudad fundada en tiempos de Carlos III, durante el siglo XVIII, y es majestuosa allá por donde la mires.
Lo primero que no puede faltar si visitas esta ensoñada población es el reconocido Real Monasterio, un monumento histórico-artístico reconocido, desde 1984, Patrimonio Mundial por la UNESCO. La espléndida edificación fue encargada por Felipe II para conmemorar la victoria de San Quintín, que tuvo lugar el día de San Lorenzo de 1557. Su arquitectura acoge los rincones más especiales que te puedes imaginar: el Palacio de los Austrias, Salas Capitulares, el Panteón de los Reyes, la Biblioteca, las escaleras del claustro, la basílica, y los frescos de sus paredes y techos. Una visita que te puede llevar horas si te quedas pasmado con toda su magia.
Otra de las cosas que tienes que ver es la Casa de Oficios, frente a la entrada del Monasterio de San Lorenzo, la colección Cocheras del Rey, el Real Coliseo de Carlos III, el Bosque de la Herrería y la Silla de Felipe II. Además, si eres un apasionado de la naturaleza, por la zona te esperan refrescantes rutas rurales.
Alcalá de Henares, la favorita de Cervantes
Localidad ubicada en la cuenca del Río Henares, muy próxima, tanto a Madrid ciudad como a Guadalajara. Es tanta su riqueza, que en 1998 la UNESCO la declaró Ciudad Patrimonio Mundial, y no es para menos, porque pasear por sus calles te transporta a un pasado sinónimo de tradición y cultura. Se conoce que los orígenes de Alcalá fueron durante la prehistoria y, desde entonces, muchas figuras han vivido en sus aires madrileños. Destaca, sobre todo, por ser la ciudad natal de Miguel de Cervantes y acoger la Universidad fundada por el Cardenal Cisneros en 1499.
Si visitas este municipio lo primero que tienes que hacer es pasear tranquilamente por el centro urbano. Todos sus rincones, suelos empedrados y edificios teñidos de historia te dejarán con la boca abierta. Descube el Museo Casa Natal Cervantes, el Antiguo Hospital de Santa María la Rica, la sede de la Universidad de Alcalá, la Capilla de San Ildefonso, el Monumento a Don Quijote y Sancho o la Calle Mayor, donde deberás parar a tomar algo.
Y si quieres irte más allá, descubre Santillana del Mar, un destino en el corazón de Cantabria.