Boris Izaguirre tiene un sueño: ser la tercera 'Ana'
- Boris Izaguirre presenta Telepasión y tiene una cuenta pendiente: las Campanadas
- Hablamos con el presentador sobre el secreto de Lazos de sangre y sus deseos para el nuevo año
- El emotivo deseo de Anne Igartiburu para este 2022
Boris Izaguirre repite como presentador y conductor de la cuarta temporada de Lazos de Sangre con el mismo éxito de siempre. Estuvo nominado a los Premios Iris 2021, reconocimiento que ya ganó en 2019 por presentar Prodigios, el talent de baile, canto e instrumental de los más jóvenes. Y ya sea en RTVE o en cualquier otro canal, cualquier programa se rifa a Boris para tenerlo de presentador. Es el más culto y glamuroso de los presentadores de la casa, y tiene todo el sentido del mundo que vaya a conducir Telepasión junto a otra grande nuestra tele: Ana Obregón, que también dará las Campanadas 2022 con Anne Igartiburu.
Los tres han deslumbrado en la gala de presentación de La Navidad que quieres, la programación festiva que entre el 19 de diciembre y el 6 de enero nos alegrará el invierno en Televisión Española. Ana y Boris han explicado que este año Telepasión será “mucho más guerrero y gamberro, pero con mucho amor y mucha química, con un guion y dirección maravilloso” y que va a pasar a la historia aunque, como bromea Ana: "Boris canta igual de mal que yo”.
Hablamos con el presentador de su trabajo en esta cadena, sus sensaciones antes de presentar la Navidad junto a estas dos mujeres de altura y sus deseos para el Año Nuevo, entre otras cosas. ¡No dejes de leer!
P: ¿Qué sientes al presentar telepasión con Ana Obregón?
R: Es un sueño hecho realidad. Yo comencé mi carrera en esta cadena haciendo un guion para el programa de Navidad de Ana Obregón, la primera vez que hizo las Campanadas. 24 o 25 años después, estar juntos haciendo Telepasión me parece un viaje increíble. Es un círculo que se cierra y se abre de una forma extraordinaria. Soy muy feliz acompañándola porque creo que nosotros somos la otra familia de Ana, los espectadores y el público de Televisión Española son su otra casa y devolverla en lo más alto a lo más importante de su vida en este momento, que yo creo que es su carrera, su extraordinaria profesionalidad, lo maravillosa compañera que es... es un verdadero regalo de Navidad.
P: Quedan menos de diez días para la Navidad. ¿Qué le pide Boris Izaguirre a 2022?
R: Más felicidad para Ana. Que nos hagamos más amigos. Que estemos juntos todos los días. Me encantaría.
P: Este año has tenido muchísimo éxito con Lazos de sangre, algo por lo que te felicitamos. ¿Por qué crees que el programa conecta tanto con la audiencia?
R: Yo creo que hemos crecido mucho. Es la cuarta temporada del programa, la tercera que yo conduzco el debate, y yo pienso que es un programa que nos exige mucho, pero esa exigencia a mí me ha hecho estar más feliz en esta etapa de mi vida. Eso no tiene precio. Yo me entrego mucho al programa, lo disfruto mucho, y siempre pienso que en el fondo es una crónica histórica y sentimental de nuestro país, es la historia pequeña de los grandes personajes, entendiendo y conociendo mucho más a tu país y a tu cultura y de lo que es capaz a través de esas historias personales: su capacidad de crear ídolos que te representan, que te influyen y te inspiran. Ese creo que es el gran secreto de Lazos de sangre y por eso gusta tanto.
P: ¿Qué opinas de que Anne Igartiburu y Ana Obregón vayan a presentar las Campanadas?
R: Pues que debería estar yo en el medio, ya va siendo hora. Creo que somos un trío perfecto y que en el fondo los tres nos llamamos Ana. Yo creo que Boris, en vez de Pedro que se supone que es lo que significa, significa Ana. Yo soy la tercera Ana que falta en ese triunvirato.
P: Ayer conocíamos la triste noticia de la muerte de Verónica Forqué
R: No nos conocimos tanto, pero me da tanta pena. Porque siempre que nos saludábamos era tan tierna, tan fantástica. Yo creo que es muy difícil hablar en este momento por todo lo que significa, pero creo que tenemos todos que intentar sacar fuerzas para pedir más ayuda a las enfermedades mentales. Estamos muy solos en ese aspecto. Y no podemos seguir contando más víctimas que desaparecen de una manera tan terrible, y tantas familias terriblemente afectadas por cosas que claramente se pueden solucionar de otra forma.