Los rincones más románticos de Budapest

• Descubre la capital de Hungría, un destino ideal para un fin de semana en pareja
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Budapest puede presumir de ser una de las ciudades europeas con más rincones “instagrameables” por metro cuadrado, además de ser uno de los rincones más románticos del viejo continente. La capital de Hungría es perfecta para pasar un fin de semana en pareja. Descubre los rincones que no te puedes perder para que tu estancia sea inolvidable en Españoles en el Mundo, ya disponible en RTVE Play.

Primera parada, un “selfie” en el Puente de Cadenas

El Danubio divide la capital húngara en Buda y en Pest, y el Puente de Cadenas o puente Széchenyi, el más antiguo de la ciudad, es el encargado de unir ambos lugares, dando nombre a Budapest.

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La monumental estructura de este puente tardó en construirse más de 10 años y a lo largo de sus 375 metros acoge cada día a decenas de viajeros deseosos de captar la mejor postal de la ciudad.

Si se trata de una escapada romántica lo ideal es visitar este lugar cuando cae la luz, para poder apreciar la auténtica belleza de la ciudad a ambos lados del río, especialmente el castillo de Buda, iluminado.

Los baños de Széchenyi

Uno de lo templos termales de toda Europa se encuentra en la ciudad de Budapest y esto lo convierte en una visita obligada. Los baños de Széchenyi disponen de piscinas con aguas que se mantienen a una temperatura aproximada de 25 grados y que contienen sulfato de calcio, acido metabórico, flúor y magnesio.

Se trata por lo tanto de una parada obligatoria para todos los viajeros que quieren descansar después de una jornada de turismo en la capital.

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Ballet en la Ópera de Budapest

Una cita en la ópera de Budapest, también conocida como Magyar Állami Operaház, puede ser el final perfecto de un fin de semana romántico en la ciudad, concretamente en Pest. Los amantes de las artes escénicas, en especial del ballet o la ópera podrán deleitarse, en este escenario de la famosa Avenida Andrássy, de un cartel en el que brillan los nombres de los artistas más reconocidos del panorama mundial. Además, si no se dispone de mucho tiempo, se aconseja realizar una visita guiada para conocer todos los secretos que se esconden entre las paredes de este monumental edificio de estilo neorenacentista que se inauguró en 1884.

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Cenar en Menza, un restaurante indispensable

Si se trata de reponer fuerzas y probar la gastronomía local, Menza es el restaurante que todo viajero debería conocer a su paso por Budapest. Este establecimiento, que se encuentra en la conocida plaza de Liszt Ferenc tér, atrae cada día a locales y curiosos dispuestos a probar la auténtica gastronomía húngara.

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Además del propio local, el menú y su precio es un aliciente más para visitarlo. Concretamente durante la semana podrás encontrar un menú compuesto por dos platos a tan solo 5 €.