Javier Gutiérrez: "'Principiantes' deja en el aire muchas preguntas"
- El actor presenta Principiantes, una adaptación de Raymond Carver, en el Teatro Canal de Madrid
- La compañía Animalario ha marcado la carrera profesional del ganador de dos Goya
Las preguntas de Pepa Fernández nos las hemos hecho alguna vez en la vida: "¿Qué pasa con el amor? ¿Por qué a veces se transforma en odio?". Principiantes, función que se presenta en el Teatro Canal de Madrid, nos habla del amor "planteándonos muchos interrogantes tanto al espectador como a sus actores". Así lo explica en De pe a pa uno de sus protagonistas, Javier Gutiérrez, en esta adaptación de Raymond Carver y dirigida por Andrés Lima.
En la obra hay una reunión festiva. "Dos parejas. Una más veterana que representa un amor más tóxico. Y se habla de eso en la función: de la violencia de género, el machismo, cómo luchar con la toxicidad. Y después hay otra pareja que está empezando. Es un amor empalagoso pero con Carver no todo es lo que parece y en ese sentido es un auténtico maestro", argumenta sobre la obra el actor.
El matrimonio veterano está interpretado por Javier y Mónica Regueiro, y la otra, los recién casados, con Daniel Pérez y Vicky Luengo. "Gracias a Mónica Regueiro me embarqué en la historia. Ella tenía una versión de Juan Cavestany. Leí el texto. Leí la versión. Me enamoré y decidimos que Andrés Lima era el director idóneo para subirla a escena", expresa sobre el momento de decisión.
Su vinculación con Andrés Lima
Para Javier no es la primera vez que trabaja con Andrés, con el que le une una larga complicidad profesional. "Somos como una pareja. Con Andrés y con mi vinculación con Animalario. Yo era un actor muy bregado en el circuito alternativo hasta que no llegué a Animalario gracias a una prueba que me hizo para un montaje que se llamaba El fin de los sueños. Y gracias también a Nathalie Poza, que invitó a Andrés que me viese sobre un espectáculo".
Como también le ha marcado Animalario a la hora de engrandecer su carrera profesional. "Yo no atraje la atención de muchos productores, directores de casting. Mucha gente de la profesión no sabía de mi existencia. Pero gracias a la proyección de esta compañía que tenía actores y actrices de primera línea y hacer el montaje tan importate e interesante de Alejandro y Ana, ganadora de casi todos los premios Max, a mí me colocó en otro lugar cualitativamente y comencé a hacer cine y televisión".
El ganador de dos Goya por La isla mínima y El autor es un actor que suele tener mucho trabajo y el mismo sabe que el mundo del teatro es muy exigente. "Por momentos tienes que viajar casi todos los fines de semana. Yo me lo pienso mucho, igual que una película o una serie de televisión. Para mí requiere mínimo un tiempo de un año o dos años y luego hay que saber escoger los compañeros de viaje porque no deja de ser una familia como aquella de cómicos que describia Fernando Fernán Gómez".
Justamente, cuando se estrenó Principiantes hace un año en Vitoria, Javier Gutierrez venía de estrenar Bajo cero, la nueva temporada de Estoy vivo y Lobo feroz. Y además ese mismo día jamás se le borrará de la retina porque nació su segundo hijo, Lucas. "Volvemos a la generación de actores como Fernando Fernán Gómez, José Luis López Vázquez, Amparo Rivelles, que se iban a hacer las Américas y cuando volvían había nacido su hijo y lo conocían con seis meses. No es lo mismo, pero yo tuve la desafortunada coincidencia de que mi hijo nació la noche del estreno", confiesa.
A veces, le ha tentado parar
A punto de cumplir 51 años el 17 de enero, Javier dice que a partir de esta edad "iba a llegar lo mejor". Y tiene razón porque no ha dejado de trabajar. Pero también alguna vez ha confesado que tuvo la sensación de parar. "Ahora mismo estoy leyendo unas memorias de Jose Luis López Vázquez, al que admiro muchísimo. Y él habla por boca de Laurece Oliver que las tres patas del oficio del actor son el talento, la suerte y el aguante. El aguante. Y por eso él decía que hacía tanta comedia ligera, tanto trabajo alimentario, porque lo importante de nuestra profesión es la visibilidad".
A lo que añade que "si no te ven no existes. Y a veces hay que hacer trabajos que a uno no le gusta o que pasan inadvertidos o que parece que no disfrutan del favor del público en aras de esa visibilidad para luego prepararse y estar a punto para trabajos mayores".