Os adelantamos la entrevista completa con Claudia Pinto, madrina del 'Días de cine' de esta semana
<span class="hddn">Hablamos con la directora de <em>Las consecuencias</em> sobre el cine y sobre la vida</span>
Grabamos con Claudia Pinto, la invitada / Madrina de Días de Cine esta semana, allá por finales de noviembre, con Las consecuencias aún fresca en mi memoria, con sus sonidos, silencios, sugerencias y sobreentendidos en una historia dura y áspera como la tierra en la que se ambienta, un remoto lugar de la isla de La Palma, justo cuando cada día veíamos por la televisión los estragos de la erupción del volcán de Cumbre Vieja. Y entonces me daba cuenta de que viendo Las consecuencias estaba viendo el paisaje conformado por las erupciones de ese volcán a lo largo de miles de años, y como decía Claudia Pinto, "probablemente mientras rodábamos, el magma que luego saldría por la boca del volcán, se estaría fraguando bajo nuestros pies".
Es Claudia Pinto una entusiasta cineasta, una de esas mujeres que hacen que la suma de mujeres que este año han dirigido películas en España sea del 14%, muy lejos de cualquier idea de paridad que podamos imaginar. Y también es Claudia Pinto una mujer luchadora y llena de talento. Esto segundo se ve en sus películas: La distancia más larga, con la que se dio a conocer y fue candidata al Goya a mejor dirección novel, y con Las consecuencias, su segundo trabajo como directora.
Hay un elemento en común entre ambas películas, más allá del nombre de su directora, y ese elemento en común se llama Carmen Elías, protagonista en la primera, importante personaje secundario en la segunda, que tiene además a Juana Acosta y Alfredo Castro como protagonistas en una película en la que deslumbra la jovencísima María Romanillos, ganadora del premio a mejor actriz revelación en el pasado Festival de Málaga.
Hablando, por los codos, con Claudia Pinto, me recuerda de inmediato que nos conocimos en la gala de los Premios Platino que tuvo lugar en Marbella, en la que, de carambola, me tocó ser el redactor del programa que los cubría, además de invitado como jurado, por enfermedad repentina de la redactora que iba a cubrirlo. No lo voy a negar, me lo pasé estupendamente bien, porque en aquel lugar, varios actores, actrices, cineastas, se les iluminaba la cara al saber que eran entrevistados por Días de Cine. Y una de esas personas fue Claudia Pinto, quien, como no pocas personas de América que hacen cine, confiesan que Días de Cine ha sido parte fundamental de su formación. Luego recordamos que moderé un coloquio en Casa América sobre La distancia más larga en el que estaba Carmen Elías, lo cual, he de decir, fue para mi todo un honor, admirándola como la admiro.
La charla es distendida y divertida, y en ella subyacen las observaciones de una mujer inteligente que sabe que, si ya es difícil hacer una película, lo es aún más siendo mujer, lo cual no es en ningún momento objeto de excusa, y si de acicate. Claudia Pinto es una luchadora que sabe que un "no" no es una puerta que se cierra, sino una que se abre. O Cómo dirían en La leyenda de la ciudad sin nombre: "El mundo se divide en dos tipos de persona, la que ven problemas, y las que ven soluciones". Claudia Pinto es de las segundas, sin duda.