'The Split': Hannah, una protagonista a la que no podrás prever
- Una ficción cuyas tramas y protagonistas nos invitan a reflexionar sobre el matrimonio y las necesidades sociales
- Descubre por qué The Split esconde el nuevo poder femenino
- No te pierdas la serie completa en RTVE Play, online y gratis
Si te gustan las series adictivas, RTVE Play te ofrece una de las más cañeras de la BBC. Se trata de The Split, cuya primera y segunda temporada están disponibles, gratis y online, en nuestra plataforma. Así que, prepárate, porque no tienes excusa para adentrarte en un mar de personajes perfectamente construidos con unas tramas que te dejarán pegado a la pantalla.
El matrimonio será ese omnipresente que rodeará las vidas personales y profesionales, tanto de Hannah, como de su hermana mediana y su madre, tres abogadas expertas en divorcios. Éstas, junto con la hermana pequeña, cuidadora de niños, se verán envueltas en dramas del pasado y del presente que tendrán que resolver, con mayor o menor maestría. Eso sí, será Hannah la que nos lleve de la mano por el sendero de dudas e incertidumbre a las que está sumergido su día a día. Vamos a ver cómo.
Un atracón de emoción
En The Split nada es baladí, aunque no lo veamos venir. Todo está majestuosamente tejido para que cobre sentido, antes o después. Conversaciones a medias y motivos insospechados son los que dan un vuelco a la trama de un capítulo a otro. Esto mismo le pasa a Hannah, una abogada de renombre en cuya vida personal se ha dejado llevar, casi sin quererlo, por las imposiciones sociales y las opiniones de su madre.
Unas decisiones imprevisibles
La primera temporada empieza con una protagonista que ha huido del bufete familiar para incorporarse en la firma rival. Deja atrás su apellido Defoe, para darse a conocer por el de su marido, Stern. Una ruptura profesional con su madre, creadora del gabinete, para emprender su propio camino. Este hecho, al que al principio no le damos importancia, es un vestigio de lo que se nos viene encima. ¿Será capaz Hannah de mantener esa distancia con su progenitora?
Cabizbaja y de mirada triste. Hannah es una mujer que expresa muy poco sus sentimientos, roza una frialdad que contrasta con la empatía y sororidad que mantiene con las clientas a las que defiende. Esto nos lleva a preguntarnos, ¿estará su felicidad blindada por llevar casada 20 años con la persona “equivocada”? A lo largo de las dos temporadas veremos cómo toma una serie de decisiones –que comentarlas sería spoiler – con las que nos sorprenderemos.
Su evolución es tan fascinante que querremos seguir viendo más hasta que, por desgracia, lleguemos al último capítulo de la segunda temporada. Es ahí cuando no nos creeremos que se ha terminado, por lo menos, de momento, porque la BBC ha confirmado una tercera entrega.
Y ya ni hablemos de las hermanas y de la madre. Todas ellas componen un cuarteto digno de palomitas, peli y RTVE Play. ¿Te lo vas a perder?