Día Mundial del Gato: 5 curiosidades de los gatos que te van a enamorar
- Descubre cuál es el origen de estos felinos, que características tiene su cuerpo y por qué reconocen su nombre
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El 20 de febrero se ha proclamado como el Día Internacional del Gato con el fin de reconocer, defender y dar voz a los derechos de estos animales. Muchas personas deciden compartir vida con uno, o varios de ellos, son parte de la familia y la coronan con sus formas, sonidos y amor. Aunque convivamos cada día con estos pequeños felinos, cierto es que siempre hay algunos detalles que no conocemos y que nos pueden resultar realmente prácticos.
Tienen un origen común
Estos felinos de cuatro patas que tanto nos gustan tienen un pasado común. Según una investigación publicada en la revista Science, su ancestro nació hace más de 100.000 años en Oriente Próximo y pertenecía a la especie salvaje africana Felis Silvestris Lybica.
Tras analizar los genomas de 979 gatos, se pudo observar que sus ramas genéticas estaban emparentadas. Esto significa que, tanto los gatos domésticos, como varias especies salvajes provienen de un linaje anterior a esos 100.000 años, momento en el que el Homo Sapiens comenzaba a salir de África hacia Eurasia y compartía tierra con los neandertales.
Saben su nombre, si no obedecen es porque no quieren
Los gatos reconocen su nombre cuando una persona les habla, según concluye el estudio de un grupo de investigadores japoneses liderado por Atsuko Saito, de la Universidad de Sofía, Tokio.
Aunque estos pequeños felinos, aparentemente, no obedecen del mismo modo que los perros, resulta que sí saben que se les está llamando. Reconocen su nombre y lo diferencian de otras palabras con la misma longitud y entonación, incluso si quien lo dice es una persona que ellos no conocen. En resumen, si tu gato no acude cuando tú quieres es porque no le apatece, pero de entender te ha entendido.
Su cara, todo un regalo
El rostro felino puede ser realmente hipnótico. Quienes tienen en casa un gato saben bien qué se siente al quedarse fijamente observando sus gestos, bigotes u ojos. Pero todos esos componentes no son baladíes, sino que tienen un sentido dentro de su fisonomía.
Por ejemplo, sus fosas nasales están compuestas por 19 millones de terminaciones nerviosas, muchas más que las personas, que tan solo tenemos 5 millones.
Además, sus bigotes no están solo para hacerles fotos y fardar de belleza, sino que les resultan de vital importancia para medir las distancias con su entorno, orientarse, evitar caídas y consolidar sus destrezas de caza.
Sus lenguas son espectaculares, están formadas por unos “ganchos” que utilizan para atrapar y desgarrar el alimento. Y en cuanto a sus ojos... Pues para podérselos ver bien despiertos es muy probable que tengamos que esperar, porque duermen una media de 16 horas al día.
Los gatos y los humanos
Nuestra relación con ellos es sorprendente, no solo porque nos entienden al hablarles y ellos se comunican con nosotros mediante sonidos y gestos, sino porque nuestros cerebros comparten un 90% de similitudes, más que con los perros.
Ambos sudamos, aunque ellos por las patas, y podemos desarrollar intolerancia a la lactosa.
Su pelaje, muy curioso
No es común encontrarse un gato tricolor, pero si lo tienes, es muy probable que sea hembra. Solo uno de cada 4.000 gatos de tres colores es macho y suele ser estéril.
Sea cual sea la combinación cromática, su pelaje es muy útil porque les aporta información sensorial, facilita la comunicación mediante el erizado, les hace de aislante térmico. Además, fabrica nutrientes como la vitamina D y sus glándulas sebáceas les protege de patógenos. ¡Menudo pelo!
¿Cómo sumar uno a tu familia?
Si aún no tienes gato, pero te apetece compartir familia con uno, la bióloga Evelyn Segura nos descubre formas de adoptar con responsabilidad. Una de ellas es acudir a una protectora o a un curioso café-cat, una propuesta que te invita a conocer al animal antes de adoptar, así verás sus necesidades y te llevarás aquel al que mejor vida le puedas dar.