Enlaces accesibilidad
'Imprescindibles'

Charo López, 7 películas de la actriz más allá del mito erótico

  • La actriz se esforzó toda su carrera en demostrar que era mucho más que una gran belleza
  • El cineasta Gonzalo Suárez le dio su primera oportunidad en la gran pantalla en 1969
  • Descubre su figura en el documental Me cuesta hablar de mi. Charo López (2022), disponible en RTVE Play

Por
Charo López en un retrato de archivo
Charo López en un retrato de archivo

Fue en un golpe de suerte lo que hizo que Charo López encontrase la pasión de su vida y cambiase pupitres y pizarras por focos y cámaras. Ocurrió a finales de los 60, en un fortuito cruce de caminos con el director Gonzalo Suárez, uno de los creadores más originales de nuestro país y la persona clave en su llegada al mundo del cine.

Bajo las órdenes de este debutante cineasta, Charo López probó cómo era eso de ser actriz en Ditirambo (1969). Un pequeño papel con el que capturó todas las miradas. La joven salmantina descubrió además la magia del mundo del celuloida. ¡Ya no habría marcha atrás!

A partir de ese momento, Charo decide tomar el destino que la vida le ha puesto por delante. “Yo no sabía lo que estaba pasando, pero si ahora soy actriz fue por él”, confiesa la actriz. Lo cuenta en el nuevo documental de Imprescindibles Me cuesta hablar de mí. Charlo López (2022), dirigido por Chema de la Peña. Un recorrido profesional y personal de un icono de nuestro cine en el que descubrimos que más allá del mito erótico en que la convirtió el cine del destape, la actriz desarrolló un impresionante talento interpretativo, llegó a producir sus propias obras y defendió un universo creativo propio.

Charo López en 'Ditirambo' (1969)

Charo López en 'Ditirambo' (1969)

Una belleza sin suerte

Pero hasya llegar hasta aquel punto de independencia artística, su carrera en el cine tuvo altibajos y fue irregular. La actriz trabajó con grandes cineastas españoles, pasó por televisión, donde tuvo grandes papeles como el de Gozos y sombras -con el que logró gran popularidad-, pero también papeles secundarios sin importancia.

En los años 70, el cine del destape la encasillo como mito erótico de la Transición. Una etiqueta de la que le costó mucho despegarse. Hubo un tiempo en que se planteó regresar a su vida como maestra, también se la vio en spaghetti western (El sol bajo la tierra, El bandido Malpelo), en los que "siempre hacía de india violada", y en películas de escasa proyección que únicamente resaltan su fotogenia y su rotunda belleza.

Convertida en una mujer más segura de sí misma, a partir de mediados de los 80 y hasta finales de los 90, la actriz encaró sus papeles más relevantes, se convirtió en una chica Almodóvar en Kika (1993) y logró el Goya a la mejor actriz por su papel como María en Secretos del corazón, película dirigida por Montxo Armendáriz, candidata al Óscar de Hollywood. A ellos se suman su inseparable amigo Gonzalo Suárez, con quien rodó siete películas, Mario Camus que la dirigió en cine y televisión o Basilio Martín Patino que la llevó de vuelta a su Salamanca natal.

Charo López en 'Kika' (1993), de Pedro Almodóvar

Charo López en 'Kika' (1993), de Pedro Almodóvar

A continuación, repasamos siete de sus interpretaciones más destacadas, personajes que la ayudaron a escapar de la imagen del mito erótico. Además descubrimos una película que pudo ser y nunca fue, cuya espinita siempre se quedará clavada en el recuerdo de la actriz.

1. El hueso (1967), de Antonio Giménez-Rico

El director de esta película descubrió el talento por explotar de Charo gracias a Gonzalo Suárez. Una sátira sobre la sociedad española, que fue una de las primeras películas dirigidas por Giménez Rico (Soldadito español, Tres palabras). Sus protagonistas fueron el popular humorista Cassen, en una de sus mejores interpretaciones, y una joven y casi debutante Charo López, por cuyo papel fue premiada a mejor actriz revelación por el Círculo de Escritores Cinematográficos.

2. Epílogo (1984), de Gonzalo Suárez

Descubiertas por él, Charo López trabajó con Gonzalo en siete películas, una de las más aclamadas fue esta con la que logró su consagración como actriz. La cinta logró el Premio de la Juventud en el Festival de Cannes concedido por el jurado de aquel año.

3. La vieja música (1985), de Mario Camus

Tras su trabajo para la serie de televisión Fortunata y Jacinta, Charo López vuelve a unirse a Mario Camus en la gran pantalla con esta película. Una cinta que llega tras la consagración del cineasta con títulos imprescindibles como La colmena y Los santos inocentes. Tras su paso por Cannes con la anterior cinta de Gónzalo Suárez, este fue el espaldarazo definitivo para mostrar el talento de la actriz.

4. Los paraísos perdidos (1985), Basilio Martín Patino

Es una de las cintas a las que Charo López guarda más cariño. Con Los paraísos perdidos, la actriz regresaba a su Salamanca natal de la mano del también salmantino Martín Patino. Ella encabezaba un reparto de lujo en el que también encontramos a Alfredo Landa, Francisco Rabal, Juan Diego o Ana Torrent.

5. Tiempo de silencio (1986), de Vicente Aranda

Soberbio papel de Charo López en esta lucha de clases que ofrece el cineasta barcelonés. El filme describe las diferentes clases y su forma de actuar: la alta, representada por Charo López y su hijo, llevan una vida vacía y sin aspiraciones; la clase media: Dorita (Victoria Abril, que ganó el Goya), su madre y su abuela, aspiran a ascender socialmente, sin reparar en medios.

6. Secretos del corazón (1997), de Montxo Armendáriz

La cinta con la que logró el Goya a Mejor Actriz. Una película que muestra con suma delicadeza el periodo de la infancia en el que la actriz sale del plano de la mujer deseada, para convertirse en una madre, una mujer que se despoja de todo artificio, con sus defectos y virtudes, plena y natural.

7. Plenilunio (2000), de Imanol Uribe

Uno de los papeles más desgarrados de la actriz, que aquí se mete en la piel de una mujer internada en un sanatorio tras vivir un desequilibrio emocional. Una cinta que tuvo una acogida desigual, pero cuyas críticas fueron unánimes en cuanto al talento interpretativo se refiere.

8. La vía Láctea (1969), Luis Buñuel

Desde su debut con Gonzalo Suárez, su objetivo siempre fue el de trabajar con grandes cineastas de renombre,  entre ellos el gran Luis Buñuel. El director de Viridiana, quedó fascinado por la energía que desprendían sus rasgos y quiso convertir a Charo en la Virgen María de su Vía Lactea, por eso la llamó ir hasta francia, donde había comenzado el rodaje de la película para hacerla una audición. Buñuel quedó encantado, pero el sindicato de actores francés veto su participación por tratarse de una actriz desconocida y no francesa.