¿Cómo elegir el mejor queso para cada ocasión?, una masterclass de intensidades y sabores
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- Descubrimos los mejores trucos para aprender a diferenciar las intensidades de los quesos y seleccionar sin sorpresas
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Los quesos son la debilidad de muchos amantes del buen comer, y no es para menos, porque… ¿quién se puede resistir a su sabor, intensidad y textura? Aunque, la verdad sea dicha, no todos son iguales ni apetecen en los mismos momentos, hay veces que tu paladar necesitará uno de más suave, otras veces nos derretiremos por uno de esos fuertes, o habrá días en los que ni mucho, ni poco, sino intermedio.
Así que, para saber elegir el más adecuado, desde Cocina RTVE Y Aquí la Tierra os proponemos una cata que nos ayude a diferenciar intensidades y sabores. Además, así le rendimos homenaje porque el 27 de marzo es el Día Mundial del Queso. ¡Un aplauso!
¿Por dónde empezamos?
Claro está que lo más sencillo es comprar el queso de turno dejándote aconsejar en tu tienda de confianza, pero si eres curioso y atrevido y prefieres hacer tú mismo la elección, lo primero que debemos hacer es intentar probar ese queso, porque el aspecto puede engañarnos. Pero si eso de dejarnos comer un trocito no entra en el protocolo del comercio, tendremos que pasar al plan B: olerlo. En general, cuanto más intenso nos huela, más intenso será su sabor, aunque haya excepciones.
Fijarse en el color no es una buena idea y es que resulta que esto depende de la época del año en el que se haya elaborado, de lo que han comido los animales… Así que de ese dato no nos podemos fiar.
Y como curiosidad antes de empezar, ¿sabías que hay más de 2.000 variedades de queso en el mundo? aunque los más consumidos son los cheddar, parmesano, mozzarella y brie. ¡Vamos a ello!
Quesos de intensidad suave para días amables
Si empezamos por los quesos suaves, hay que conocer un dato que suele descolocar un poco al principio, y es que resulta que éste puede ser de cualquier tipo de leche y de curación. Existe mucha variedad, como los elaborados con leche de vaca, los tiernos de A Coruña, los de tetilla, otros de cabra o de oveja. Todos ellos son ideales para incorporarlos en las ensaladas.
Quesos de intensidad media, ni frío ni calor
Para esos días en los que queremos subir la potencia, podemos decantarnos por un morbier, un queso francés que presenta una línea de ceniza en medio, o un belegen, que es un estilo gouda hecho con leche de cabra. Y si preferimos quedarnos en nuestra tierra, el abuelo Ruperto es una riquísima opción originaria en Murcia. Todos son perfectos para meterlos dentro de un buen bocadillo.
Quesos de intensidad fuerte, ¡para días atrevidos!
Muchos pueden llegar a pensar que lo más fuerte de una tabla de quesos va a ser el azul, pero eso no tiene por qué. Puede haberlos de intensidad media y que queden superados por otros que no sean azules.
Hay unos que presentan unas cortezas lavadas cuyo olor y sabor es muy intenso. Es el caso de Lavega, que hace en Palencia.
El remate es probar uno ahumado acompañado con membrillo y nueces. ¡Apasionante!
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